¡°Que nos dejen de utilizar los pol¨ªticos¡±
Miriam Soto lleg¨® de Ecuador en 2004 y trabaja de orientadora laboral. La discriminaci¨®n sigue vigente, asegura
Aterriz¨® en Espa?a procedente de Quito justo cuando Zapatero lo hizo en La Moncloa. Casada con un espa?ol, Miriam Soto habla de un pa¨ªs que suena a Cu¨¦ntame. ¡°Cuando iba sola a hacer los papeleos para regular mi situaci¨®n me trataban mal y con dureza, pero si ven¨ªa mi marido eran muy amables¡±. Transcurr¨ªa 2004.
Siete a?os despu¨¦s, la inmigraci¨®n sigue sufriendo discriminaciones propias de otros tiempos en Espa?a. ¡°En mi caso, por mujer, inmigrante y joven¡±, dice Miriam. ¡°Entonces [en 2004] solo te quer¨ªan para el servicio dom¨¦stico o para el cuidado de mayores o ni?os, ni siquiera como dependienta o cajera. Pero hab¨ªa trabajo¡±, recuerda.
Lleg¨® con 24 a?os, ahora tiene 31. Estudi¨® en su pa¨ªs la carrera de Educaci¨®n Parvularia (Educaci¨®n Infantil) y conoci¨® all¨ª a su marido en una ONG. Ya en Espa?a, trabaj¨® los primeros seis meses cuidando a mayores. Han pasado dos legislaturas y todav¨ªa no le han homologado el t¨ªtulo universitario. Es m¨¢s, tardaron casi cinco a?os en responderle que le faltaban unos cr¨¦ditos (horas lectivas y de estudio) para hacerlo.
¡°La mayor¨ªa de la gente nos ve como un grupo que no viene preparado. Y no es as¨ª. Hay una parte de profesionales, desde profesores a contadores, auditores o veterinarios. Aunque cuando necesitan un empleo trabajan de lo que sea. Y hay mucha gente que viene con un proyecto migratorio familiar, como el m¨ªo, o formativo¡±.
¡°Yo pido que no se nos criminalice¡±, prosigue, ¡°no venimos ni a saquear ni a quitar puestos de trabajo a nadie. Y valoramos mucho el Estado de bienestar que hay en Espa?a, el derecho a la sanidad y la educaci¨®n universal, no porque abusemos de ella, como se dice otras veces, sino porque desde nuestros pa¨ªses lo ve¨ªamos como una quimera y al llegar aqu¨ª y ver que es posible una conquista as¨ª te das cuenta de las cosas que puede conseguir un pa¨ªs¡±.
Conoce la situaci¨®n laboral de los inmigrantes de primera mano. Tras colocarse de administrativa, desde hace cinco a?os trabaja como orientadora laboral de inmigrantes en una asociaci¨®n. Durante las dos legislaturas de Zapatero han cambiado algo las cosas, asegura. ¡°Antes [con la anterior legislaci¨®n] la reagrupaci¨®n familiar no permit¨ªa trabajar a los que ven¨ªan a vivir con sus familiares. Ahora s¨ª se puede cuando se hace la reagrupaci¨®n desde el pa¨ªs de origen. Era un problema¡±, afirma. ¡°Tambi¨¦n fue relevante la regularizaci¨®n que se hizo en 2005, era necesaria y se not¨® mucho porque entonces a¨²n hab¨ªa trabajo¡±. ?De qu¨¦? ¡°Sobre todo en el sector servicios, de cajeras, limpieza, en la construcci¨®n y en el servicio dom¨¦stico¡±.
Pero empez¨® a aflorar la crisis. ¡°A mediados de 2008 dej¨® de haber ofertas. A muchos contratados, sus empresas les redujeron la jornada o les ped¨ªan que trabajaran la completa pag¨¢ndoles media, para ahorrarse la seguridad social. Se par¨® el empleo en la construcci¨®n y detr¨¢s cayeron los dem¨¢s, en servicios y en el servicio dom¨¦stico, porque las familias no pod¨ªan pagarlo. Empez¨® a haber m¨¢s abusos: se ofrec¨ªan 500 euros a las internas, sin vacaciones ni medias pagas extras¡±. La situaci¨®n no ha cambiado.
Miriam cree que ¡°el Gobierno s¨ª ha intentado potenciar las pol¨ªticas sociales¡±. ¡°La Ley de Dependencia, por ejemplo, es vital, si hubiera recursos para aplicarla bien se descargar¨ªa a las familias y se crear¨ªa empleo¡±. ?Sus expectativas con el nuevo Gobierno? ¡°Que los pol¨ªticos dejen de utilizar a la inmigraci¨®n, pero no solo en campa?a, cada vez que les viene bien a unos o a otros¡±. ¡°Creo que los verdaderos culpables de la crisis¡±, prosigue, ¡°son los bancos¡±. ¡°Adem¨¢s se les financia y al final se sigue el juego a los mercados. Y luego no hay dinero para otras cosas, como la dependencia. Por eso la gente est¨¢ tan desilusionada, tan decepcionada¡±, concluye. ?Los inmigrantes? ¡°No, todo el mundo en general¡±.
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