El teatro llena y la taquilla ¡°se la quedan los pol¨ªticos¡±
Las compa?¨ªas se hunden porque las Administraciones p¨²blicas les ¡°estafan, adeudan y sobornan¡±
Emilio del Valle (Madrid, 1961) es actor, director, y fundador de la compa?¨ªa Inconstantes Teatro, en 1994, considerada entre las mejores del mundo de la escena en Espa?a. Un grupo en parte alternativo, aunque con vocaci¨®n de trascender, cosa que logra cualitativamente, con sus montajes de dramaturgos espa?oles vivos, cl¨¢sicos contempor¨¢neos y autores del Siglo de Oro. ?l y su grupo ejemplifican perfectamente la situaci¨®n parad¨®jica, enfermiza y disparatada por la que est¨¢ atravesando el mundo de la escena. Por primera vez desde que el teatro naciera en la democracia griega, siglos antes de la era cristiana, son los c¨®micos, faranduleros, titiriteros, actores y todo un largo etc¨¦tera, los que est¨¢n manteniendo con sus dineros a las administraciones p¨²blicas (sobre todo municipales y auton¨®micas) y no al rev¨¦s.
Del Valle habla de ¡°el virus incurable de la morosidad¡± para referirse a la situaci¨®n cr¨ªtica por la que est¨¢n pasando la pr¨¢ctica totalidad de las compa?¨ªas de teatro, como la suya, sin olvidar a los productores quienes arriesgan en una actividad que de poco les sirve que est¨¦ pasando por un claro ¨¦xito, como es el teatro.
La realidad de una compa?¨ªa como Inconstantes Teatro pasa por llevar los n¨²meros al d¨ªa. De lo contrario se hunde el proyecto art¨ªstico. ¡°Y la cuenta de resultados se equilibra mediante la aportaci¨®n de capital propio, el apoyo institucional, la distribuci¨®n y el sentido com¨²n; donde no llegue el dinero ha de aflorar la imaginaci¨®n, nunca el gasto por encima de nuestras posibilidades. Sobre estas bases se han consolidado un buen n¨²mero de proyectos art¨ªsticos reconocibles en los ¨²ltimos 25 a?os¡±. El director menciona compa?¨ªas como Micomic¨®n, Meridional, Cuarta Pared, Factor¨ªa, El Zurdo, El Cruce, La Tartana, Animalario, Morboria, Kamicaze, Ur, Inconstantes y muchas otras. Todas justifican el dinero p¨²blico que reciben, cumplen escrupulosamente con las administraciones p¨²blicas y sus complejas estructuras, atienden sus responsabilidades en materia impositiva y pagan la seguridad social de sus trabajadores. Pero el dinero ingresado en taquilla habitualmente no les llega o si cobran es como enormes retrasos hasta de a?os.
¡°Con la crisis econ¨®mica como tel¨®n de fondo, la clase pol¨ªtica, enti¨¦ndase el t¨¦rmino en sentido marxista, incumple su responsabilidad contractual con las compa?¨ªas de la manera m¨¢s vergonzosa e inmisericorde. No hay un solo miembro de la clase pol¨ªtica que haya dejado de cobrar su sueldo, mientras decid¨ªa no pagar nuestros contratos. Alg¨²n ayuntamiento, por ejemplo el de Illescas (Toledo), ha negociado con entidades financieras la concesi¨®n de cr¨¦ditos blandos a las compa?¨ªas, pagando estas los intereses. Me pregunto por qu¨¦ el Ayuntamiento no pide el cr¨¦dito, nos paga la deuda, y paga los intereses del cr¨¦dito. A Inconstantes se le adeudan contratos desde 2009 (Ayuntamiento de Pinto, en Madrid), y la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, unos 30.000 eurejos, limosna¡ Y as¨ª, ?hasta 60.000 euros!¡±, se?ala desbordado Del Valle. El afamado grupo Animalario gana dinero, pero como no cobra pide cr¨¦ditos para pagar a actores y dietas y las ganancias son los intereses que se queda el banco.
Entre tanto, la Administraci¨®n Central pide a las compa?¨ªas que liquiden el IVA de facturas impagadas por la propia Administraci¨®n p¨²blica: ¡°Ver¨¢n el truco: el IVA de 60.000 euros asciende a 9.000, es decir, que debo pagar a Hacienda 9.000 euros que no he cobrado, de manera que la Administraci¨®n no paga mis facturas pero recauda el IVA de las mismas. Hay que redefinir el IVA: adem¨¢s del soportado y el repercutido, el adeudado/estafado/sobornado/impagado¡. Podemos convivir con los recortes, y con el trato humillante que la clase pol¨ªtica dedica a la cultura. Lo que es m¨¢s dudoso es que podamos mantener nuestros proyectos con deudas que superan con creces el 50% de nuestros ingresos. Si algo no lo remedia la nuestra ser¨¢ una de las pr¨®ximas compa?¨ªas en desaparecer¡±. Entretanto, Del Valle propone una relectura de nuestra Constituci¨®n (pre¨¢mbulo y art¨ªculos 9, 10, y 48) y acudir los d¨ªas 1, 2 y 3 a la madrile?a Sala Pradillo, donde Inconstantes Teatro representar¨¢ uno de sus ¨²ltimos e interesantes trabajos: Unos cuantos piquetitos, de Laila Ripoll.
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