El momento clave de la vida del partido

El congreso federal es uno de los momentos clave de la vida interna del partido. Normalmente se celebra entre el tercero y el cuarto a?o desde la ¨²ltima reuni¨®n del ¨®rgano soberano del PSOE. El ¨²ltimo, el XXXVII, se celebr¨® a principios de julio de 2008. Casi un cheque en blanco recibi¨® entonces Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero, al que votaron el 98,5% de los delegados.

El congreso que ha comenzado hoy es un Congreso ordinario, es decir, organizado en el plazo ordinario previsto por las normas internas del partido. Se habla de congreso extraordinario cuando se convoca fuera de este plazo, en circunstancias especiales, si lo decide el comit¨¦ federal, la comisi¨®n ejecutiva federal o lo soliciten las mitad m¨¢s uno de los militantes.

?Qu¨¦ hace el congreso?

El ¨®rgano define los principios y fija los programas del partido, establece su l¨ªnea pol¨ªtica y se?ala su estrategia; debate y juzga la gesti¨®n de la comisi¨®n ejecutiva federal y del resto de ¨®rganos federales, y elige la comisi¨®n ejecutiva federal y el resto de ¨®rganos federales a excepci¨®n del comit¨¦ federal, del que solo elige una parte.

?Qui¨¦nes lo forman?

Las delegaciones elegidas en los congresos provinciales e insulares, cuyo n¨²mero viene determinado por el n¨²mero de militantes, adem¨¢s de una delegaci¨®n de Juventudes Socialistas, con voz y voto, y una delegaci¨®n de cada una de las organizaciones sectoriales, con voz y voto, salvo para el control de la gesti¨®n de los ¨®rganos federales y la elecci¨®n de sus integrantes. A este congreso asisten un total de 956 delegados.

?Qu¨¦ ocurri¨® en los congresos anteriores?

Desde la democracia, quedan como memorables los dos congresos que el PSOE celebr¨® en 1979. El primero, en marzo, cuando tras ver rechazada la propuesta de renunciar al marxismo como ideolog¨ªa oficial del partido, el entonces secretario general Felipe Gonz¨¢lez, present¨® su dimisi¨®n, para volver a ser elegido a la cabeza del partido en el sucesivo congreso extraordinario, celebrado en septiembre y que aprob¨® la propuesta rechazada seis meses antes.

Un momento clave fue tambi¨¦n el XXXIII Congreso, en 1994, que marc¨® la victoria de los renovadores frente a los guerristas, dos corrientes internas de los socialistas, y el fin del poder del Alfonso Guerra en el partido.

Otro cenit lo marc¨® el Congreso de julio de 2000, cuando con el 90,2% de los votos emitidos, los delegados aprobaron la direcci¨®n de renovaci¨®n y consenso confeccionada por Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero, que se impuso a los otros tres candidatos Jos¨¦ Bono, Rosa D¨ªez y Matilde Fern¨¢ndez.