Acebes, la imagen del aznarismo

Entre los d¨ªas 11 y 14 de marzo de 2004, a ?ngel Acebes se le pobl¨® el pelo de canas. En esos d¨ªas, al entonces ministro del Interior le cayeron a?os encima y el pol¨ªtico moderado y centrista vivi¨® un antes y un despu¨¦s en su biograf¨ªa, la personal y la p¨²blica.

Su nombre, incluso, hab¨ªa estado en algunas quinielas en los ¨²ltimos d¨ªas de agosto de 2003 como el destinatario del dedazo de Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar que, finalmente, se dirigi¨® hacia Mariano Rajoy para designarle sucesor y candidato del PP en las elecciones del 14 de marzo de 2004.

¡°Hay dos l¨ªneas de investigaci¨®n...¡±, dec¨ªa en esos d¨ªas de marzo de 2004. Sus comparecencias p¨²blicas entre el 11 y el 14 de marzo de 2004 intentando dirigir la atenci¨®n de los atentados islamistas de Madrid hacia ETA perseguir¨¢n y marcar¨¢n siempre a Acebes, que fue la imagen de la gesti¨®n que hizo el Gobierno de Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar de aquella masacre. En esos d¨ªas pas¨® de su imagen de centrista a la de protagonista de la imagen m¨¢s dura del PP del postaznarismo.

Acebes (Pajares de Adaja, ?vila, 1958) hab¨ªa sido un joven pol¨ªtico, con carrera fulgurante en los a?os de Aznar. Proced¨ªa de ?vila, donde fue entre 1991 y 1995 el alcalde m¨¢s joven de una capital de provincia y su padrino fue Feliciano Bl¨¢zquez, como en su momento lo fue del propio Aznar.

De ese ayuntamiento dio el salto a la pol¨ªtica nacional como diputado y como senador. Sustituy¨® a Alberto Ruiz Gallard¨®n como portavoz en el Senado entre 1995 y 1996 y se gan¨® la confianza del entonces l¨ªder del PP.

Cuando Aznar lleg¨® a La Moncloa en 1996 a Acebes le toc¨® la labor ingrata de cuidar del partido, como coordinador, a las ¨®rdenes del entonces todopoderoso vicepresidente Francisco ?lvarez Cascos. Adem¨¢s de soportar esa dif¨ªcil relaci¨®n entre ambos, le toc¨® hacer frente a una etapa de especial dureza terrorista contra el PP, con atentados de ETA contra concejales populares en toda Espa?a. Por ejemplo, Acebes vio a Miguel ?ngel Blanco en sus ¨²ltimos minutos antes de que se certificara su muerte, tras dos d¨ªas de secuestro y cruel ultim¨¢tum de ETA. Tambi¨¦n fueron los d¨ªas en los que brot¨® el llamado ¡°esp¨ªritu de Ermua¡± que modific¨® las estrategias contra ETA.

Entre 1999 y 2000 fue ministro de Administraciones P¨²blicas en sustituci¨®n de Rajoy; entre 2000 y 2002 de Justicia y entre 2002 y 2004 de Interior. En estos dos ¨²ltimos departamentos, ejecut¨® la pol¨ªtica antiterrorista de Aznar basada en la persecuci¨®n implacable contra ETA, con nuevos instrumentos legales y judiciales, como la persecuci¨®n contra el entorno de la organizaci¨®n terrorista y las ilegalizaciones.

En toda esa trayectoria pol¨ªtica, Acebes fue totalmente fiel a Aznar y de la estricta confianza del entonces presidentes del Gobierno. Eran los a?os de Cascos, Javier Arenas, Rodrigo Rato, Jaime Mayor Oreja y Mariano Rajoy en la primera fila, pero tambi¨¦n los de Jos¨¦ Mar¨ªa Michavila y Loyola de Palacio, entre otros, con Acebes con un papel de eficaz ejecutor de las decisiones de Aznar, sin muestra alguna de ambici¨®n de sucederle o b¨²squeda de brillo para hacer su propia carrera.

Tras la derrota del PP en 2004, Rajoy mantuvo la l¨ªnea aznarista e hizo a Acebes secretario general del partido, con Eduardo Zaplana como portavoz parlamentario. Fueron los a?os en los que el PP mantuvo una estrategia de oposici¨®n basada en el seguidismo y el aliento a las teor¨ªas conspirativas sobre el 11-M, resumidas en el eslogan de ¡°ha sido ETA¡±. Tambi¨¦n a las manifestaciones casi semanales contra la pol¨ªtica antiterrorista de Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero. Acebes fue en esos cuatro a?os uno de los abanderados de una pol¨ªtica de oposici¨®n dura y de reivindicaci¨®n del aznarismo, bajo la tesis de que Zapatero fue elegido presidente del Gobierno casi por accidente y como consecuencia de una conspiraci¨®n sin aclarar.

La nueva derrota del PP en 2008 llev¨® a Rajoy a romper con el aznarismo y con esa oposici¨®n tan dura y basada en el 11-M y Acebes fue postergado a un esca?o del Congreso. En Valencia, en el congreso del PP de 2008, las cabezas cortadas de Acebes y Zaplana simbolizaron la ruptura de Rajoy con el aznarismo.

Al margen de la primera fila de la pol¨ªtica partidaria, Acebes reabri¨® su despacho de abogado y progres¨® en la actividad privada, hasta que el 4 de junio de 2011 anunci¨® que abandonaba su esca?o. Entonces se convirti¨® en miembro del Consejo de Administraci¨®n y presidente de la Comisi¨®n de Auditor¨ªa y Cumplimiento del Banco Financiero y de Ahorro (Cabecera deBankia).