Gallard¨®n rectifica y dejar¨¢ en las Cortes la elecci¨®n del Poder Judicial

El caso D¨ªvar, la salida del anterior presidente del m¨¢ximo ¨®rgano de gobierno de los jueces por el pago de sus viajes privados de fin de semana con fondos p¨²blicos, ha tra¨ªdo m¨¢s consecuencias que el mero relevo en la presidencia del Tribunal Supremo y del Consejo del Poder Judicial. El Gobierno ha modificado su criterio y ahora est¨¢ m¨¢s que dispuesto a revisar su posici¨®n de que solo se pueda elegir por y entre los jueces a la mayor¨ªa de los vocales del Poder Judicial. El Ministerio de Justicia ha enviado estos d¨ªas un documento al nuevo presidente del Consejo, Gonzalo Moliner, que ha recibido con la mejor de las disposiciones esa aut¨¦ntica rectificaci¨®n. El PSOE tampoco apoy¨® nunca esa idea.

El Ejecutivo de Mariano Rajoy apost¨® desde el primer d¨ªa por cambiar radicalmente la forma de elegir a los 20 miembros del Poder Judicial. As¨ª se fijaba en el programa electoral: ¡°Promoveremos la reforma del sistema de elecci¨®n de los vocales del Consejo General del Poder Judicial, para que, conforme a la Constituci¨®n, 12 de sus 20 miembros sean elegidos de entre y por los jueces y magistrados de todas las categor¨ªas¡±. Los otros ocho vocales tienen que ser designados por el Congreso y el Senado, porque as¨ª lo se?ala la Constituci¨®n.

Fue esta la posici¨®n manifestada varias veces por el titular de Justicia, Alberto Ruiz-Gallard¨®n. Apostaba por volver al modelo de los ochenta, antes de la llegada de los socialistas por primera vez al poder. Esa elecci¨®n directa supondr¨ªa que los conservadores, muy mayoritarios entre los jueces por el nivel de afiliaci¨®n a la Asociaci¨®n Profesional de la Magistratura (APM), pr¨¢cticamente controlar¨ªan siempre el Poder Judicial, ganase quien ganase las elecciones. Por eso el PSOE cambi¨® esa norma en los noventa.

El panorama ha variado radicalmente en cuesti¨®n de semanas. Y el punto de inflexi¨®n fue el caso del enquistado relevo de Carlos D¨ªvar, donde la APM apost¨® muy fuerte por su expresidente Jos¨¦ Ram¨®n Ferr¨¢ndiz, un candidato claramente de confrontaci¨®n con el Ministerio de Justicia y con sus planes para acotar el poder del Consejo. Alrededor de la candidatura de Ferr¨¢ndiz se aglutinaron al final, adem¨¢s y de manera muy corporativa, los vocales del Consejo que son jueces.

La soluci¨®n de Gonzalo Moliner, que recab¨® los 12 votos necesarios para salir presidente, sum¨® una mayor¨ªa de vocales no jueces pero s¨ª juristas de reconocido prestigio. Y tambi¨¦n concit¨® el apoyo de dos jueces, de miembros del te¨®rico sector conservador del Consejo y de los denominados progresistas. Esa vocaci¨®n de consenso que significaba Moliner convenci¨® al ministro, que ha perdido la sinton¨ªa con la APM y algunos de sus representantes en el Consejo y tambi¨¦n con la vocal progresista Margarita Robles, que le ha acusado p¨²blicamente de presionarles durante las ¨²ltimas semanas y que podr¨ªa perder en el nuevo reparto el poder que hasta ahora ten¨ªa en la comisi¨®n de nombramientos.

Moliner ha llegado al Consejo para poner orden con sosiego y ha celebrado ya su primer pleno ejecutivo, donde intervino para llevar las riendas del debate. Este lunes convocar¨¢ otro pleno especial para recortar partidas por encima del 10% en su presupuesto actual de 72 millones de euros. Se ha citado en su despacho con vocales de todos los sectores. Y ha quedado emplazado para un almuerzo con el ministro, con el que ya ha hablado varias veces y ha firmado un plan de ayuda al Tribunal Supremo, para un primer intercambio de impresiones.

La rebaja presupuestaria ha sido uno de los motivos de confrontaci¨®n ¨²ltimos del ministerio con el Poder Judicial. Algunos de sus funcionarios interpretaron esa demanda del Ejecutivo como una intromisi¨®n. Gallard¨®n lo neg¨® y Moliner la ejecutar¨¢.

Gonzalo Moliner y otros vocales progresistas del Consejo tienen, adem¨¢s, otra carta a su favor para establecer mejores relaciones con el ministerio. Tambi¨¦n creen, como Ruiz-Gallard¨®n, que el ¨®rgano de gobierno de los jueces est¨¢ algo sobredimensionado y que podr¨ªa reducirse. El Poder Judicial mantiene ahora un pleno de 20 vocales m¨¢s el presidente, todos con dedicaci¨®n exclusiva, coches oficiales y sueldos que oscilan entre los 110.000 y los 130.000 euros. Y el problema no es solo de coste. Tambi¨¦n de operatividad. Muchos asuntos se llevan a pleno y suscitan discusiones poco resolutivas. Los temas de m¨¢s relevancia se sustancian en secreto en otras comisiones.

La presidencia de Moliner desbloquea la relaci¨®n con el ministerio

El objetivo del nuevo presidente es ser m¨¢s ejecutivo, tomar m¨¢s decisiones y, tambi¨¦n, tener m¨¢s voz y presencia. Se mantendr¨¢ a la actual portavoz, Gabriela Bravo, pero ¨¦l se reserva comparecer para fijar posici¨®n en los asuntos m¨¢s importantes. Lo dijo ya en su primera rueda de prensa.

Los primeros contactos del ministro con Moliner y de este con el l¨ªder de la oposici¨®n, Alfredo P¨¦rez Rubalcaba, han sido positivos. El PSOE ha transmitido al ministro que el cambio de modelo de elecci¨®n del Poder Judicial para favorecer a los jueces era una l¨ªnea roja que no pensaba traspasar en la negociaci¨®n y el ministro se ha plegado a esa demanda en favor del consenso.