El hundimiento del ¡®Prestige¡¯ y su marea negra se sientan hoy en el banquillo

Hoy, por fin, comienza el juicio por el hundimiento del Prestige, el petrolero hundido frente a la Costa da Morte el 19 de noviembre de 2002 con 77.000 toneladas de fuel a bordo. Han tenido que pasar casi diez a?os ¡ªse cumplen el pr¨®ximo 13 de noviembre¡ª durante los que la instrucci¨®n judicial ha alcanzado un tama?o casi inabarcable, 230.315 folios de diligencias que incluyen desde largas declaraciones ante los jueces a conversaciones transcritas, exhaustivos informes periciales o documentos recopilados en medio mundo. Una d¨¦cada de trabajo a marchas forzadas culmina en el juicio por la mayor cat¨¢strofe ecol¨®gica de la historia de Espa?a, una vista que se celebra en el recinto ferial de A Coru?a y que juzgar¨¢ las responsabilidades penales por la serpiente t¨®xica del Prestige, que emponzo?¨® de fuel las costas de Galicia, se extendi¨® por el Cant¨¢brico y lleg¨® hasta Francia.

Las cifras y los n¨²meros resultan astron¨®micos en todo lo que se refiere al Prestige. La mayor causa jam¨¢s instruida en Espa?a por un delito medioambiental suma 230.315 folios de sumario. Los perjudicados, agrupados en 55 acusaciones, se redujeron a 1.500 (eran inicialmente m¨¢s de dos millares). En el macrojuicio intervendr¨¢n 70 abogados, 27 procuradores, 140 testigos, 98 pruebas periciales... Se espera la sentencia para septiembre de 2013. Cuando ya est¨¦ pr¨®ximo el und¨¦cimo aniversario del naufragio.

En el banquillo se sentar¨¢n cuatro personas. El principal acusado ¡ªy ¨²nico detenido cuando sucedieron los hechos¡ª es el capit¨¢n del buque, el ya anciano marino griego Apostolos Mangouras. Junto a ¨¦l, otros dos oficiales del Prestige, el jefe de m¨¢quinas, el tambi¨¦n griego Argyropoulos Nikolaos, y el primer oficial, el filipino Ireneo Maloto. Pero tambi¨¦n se enfrentar¨¢ a la justicia un alto cargo del Gobierno de entonces, el que fue director general de la Marina Mercante Jos¨¦ Luis L¨®pez-Sors, acusado de dictar la orden de llevar el buque mar adentro ¡ªlo que propici¨® la extensi¨®n de la marea negra¡ª sin contar con avales t¨¦cnicos sobre las consecuencias de tal medida.

Este martes el tribunal decidir¨¢ si admite nuevas pruebas, resolver¨¢ otras cuestiones previas y suspender¨¢ la vista hasta el 13 de noviembre. Ese d¨ªa, hace 10 a?os, comenz¨® la tragedia con la rotura de un tanque del buque, y ese d¨ªa, 10 a?os despu¨¦s, empezar¨¢ el interrogatorio al principal acusado: Apostolos Mangouras, el capit¨¢n griego del petrolero con bandera de las Bahamas, due?o liberiano (Mare Shipping), armador griego (Universe Maritime), mutua brit¨¢nica (The London Steamship Owners), certificado estadounidense (ABS) y fletado por una sociedad suiza (Crown Ressources) que ti?¨® de negro 1.600 kil¨®metros de costa: desde la desembocadura del Mi?o entre Galicia y Portugal hasta el litoral atl¨¢ntico franc¨¦s.

Esta esperada vista, que durar¨¢ otros siete meses, ya no solo se ci?e a determinar al fin qui¨¦n o qui¨¦nes fueron los culpables de la cat¨¢strofe. En juego est¨¢ tambi¨¦n el prestigio de la Justicia, tras los nueve a?os que le llev¨® al peque?o juzgado de Corcubi¨®n cerrar una instrucci¨®n que sufri¨® tantos bandazos como err¨¢tico fue el rumbo del petrolero escupiendo fuel durante los seis d¨ªas que fue paseado frente a Galicia hasta que se parti¨® y se hundi¨®.

En el caso de L¨®pez-Sors, se dirime algo m¨¢s que su culpabilidad personal. Si fuese condenado, el Estado espa?ol resultar¨ªa tambi¨¦n responsable de los da?os de la cat¨¢strofe, que la fiscal¨ªa ha calculado en 4.121 millones de euros. Y en este caso, el Estado es al mismo tiempo acusador y acusado, ya que ¨¦l mismo reclama 3.862 millones por los perjuicios y los gastos que supuso la lucha durante semanas contra la marea negra.

Lo que comienza ahora es solo un aperitivo, la exposici¨®n que har¨¢n las partes de cuestiones jur¨ªdicas previas. El primer plato fuerte llegar¨¢ precisamente el 13 de noviembre, el d¨ªa en que se cumple una d¨¦cada justa desde que el Prestige? lanzase una se?al de socorro al descubrir una v¨ªa de agua en su casco cuando navegaba junto a Finisterre. Mangouras volver¨¢ a estar en Espa?a ese d¨ªa, aunque esta vez para prestar declaraci¨®n en el juicio. A partir de ese momento, se esperan largas semanas de testimonios, informes periciales y exposici¨®n de pruebas. Un ej¨¦rcito de 70 abogados trabajar¨¢ en el juicio. Y est¨¢n llamados a declarar 140 testigos. El desenlace, con la sentencia, a¨²n tardar¨¢ casi otro a?o m¨¢s: no se espera hasta el oto?o de 2013.