El 100% de lo que se pudo

¡°Se hizo el 100% de lo que se pudo¡±, dec¨ªan las pancartas desplegadas en el pueblo mexicano de Champton, Campeche, todo engalanado el s¨¢bado, d¨ªa 15, por los vecinos que homenajeaban al alcalde-presidente del consejo municipal con motivo de su jubilaci¨®n tras largos a?os de ejercicio. Hubiera sido tambi¨¦n un buen resumen para conmemorar el Primer A?o Mariano Compostelano. Pero, en este caso, se prefiri¨® solemnizar la efem¨¦rides con la reuni¨®n de la interparlamentaria del Partido Popular en el cigarral de Mar¨ªa Dolores de Cospedal, secretaria general y presidenta de Castilla-La Mancha.

El lema del c¨®nclave, ideado por los comunic¨®logos de cabecera, ha sido m¨¢s pretencioso, como demuestra su recurso al gerundio: ¡°Un a?o impulsando reformas¡±. As¨ª que, de nuevo, aqu¨ª los tenemos, incapaces de iluminar el futuro, impasible el adem¨¢n y empe?ados en proseguir el ennegrecimiento del pasado. Estamos ante un caso claro de herencia interminable, que promete nuevos cap¨ªtulos apasionantes, sin m¨¢s arrepentimiento ni dimisi¨®n que la del diputado navarro Santiago Cervera, fulminado en la muralla de Pamplona por un qu¨ªtame all¨¢ una rendija. Basta de reticencias y celebremos todos tener un Gobierno que en vez de ocultar los problemas (como hac¨ªa el anterior, de los malaventurados socialistas), los elimina. Elimina los problemas y de paso privatiza los servicios p¨²blicos. Elimina las prestaciones sociales, la gratuidad de la justicia, la educaci¨®n para la ciudadan¨ªa, las ambulancias para los enfermos cr¨®nicos, las condiciones favorables de acceso al Registro Civil y tantos otros excesos que ten¨ªan anestesiada a la poblaci¨®n.

Toledo confirm¨® ayer lunes que el Gobierno del PP es irresponsable de las medidas desfavorables para el p¨²blico de a pie, una vez establecido de modo irrefutable que se han adoptado porque ¡°no pod¨ªa ser de otra manera¡±. El juego gubernamental se completa con la t¨¦cnica del futurible, mediante la cual Rajoy y todo su equipo se preguntan qu¨¦ desgracias se habr¨ªan apoderado de nosotros de no ser porque ellos est¨¢n empe?ados en nuestra bienandanza. Este sistema de atribuirse haza?as indemostrables facilita el regreso al esquema de Minority Report (2002) ¡ªla pel¨ªcula dirigida por Steven Spielberg y protagonizada por Tom Cruise¡ª. All¨ª, los llamados precogs ven im¨¢genes del futuro con desastres a¨²n no sucedidos, los cuales, procesados en el departamento precrime (situados en La Moncloa y G¨¦nova, a nuestros efectos), pueden dejar de ocurrir de modo que quedemos a salvo.

Rajoy, a la hora de formar el Gobierno, lo hizo en la l¨ªnea del cuaderno azul de Aznar y de los caprichos de Zapatero. La intenci¨®n era dejar claro desde el principio qui¨¦n ten¨ªa el mando. Ni tendencias, ni barones, ni influencias, salvo la de Pedro Arriola. Los nombrados deb¨ªan saber que s¨®lo a ¨¦l deb¨ªan el nombramiento. Sin m¨¢s delegaciones de poder que las hechas en favor de la ¨²nica vicepresidenta y ministra de la Presidencia y Portavoz y encargada del Centro Nacional de Inteligencia, Soraya S¨¢enz de Santamaria. Solo as¨ª se entiende que se haya privado de la figura de vicepresidente econ¨®mico o que haya considerado imprescindible contar con figuras del toreo como Crist¨®bal Montoro, Jorge Fern¨¢ndez, Ana Mato, F¨¢tima B¨¢?ez o Jos¨¦ Ignacio Wert. En parte alguna est¨¢ escrito que la virtud m¨¢xima de un presidente del Gobierno sea la de sorprender y cu¨¢nto mejor el acierto a la sorpresa. Otra cuesti¨®n es que los ministros y ministras sobrevenidos presenten la ventaja de cristalizar en el sistema de la adhesi¨®n incondicional al benefactor que les ha nombrado. Pero sucede que en lugar de sumar criterio y lucidez, lo restan.

Rajoy ha optado por la pol¨ªtica del desprecio a la oposici¨®n, tan caracter¨ªstica del aznarismo rampante, del que solo recibe oprobios. Como tiene holgada mayor¨ªa parlamentaria, piensa que le est¨¢ permitido dedicarse, o que sus subalternos se dediquen, a denigrar a la oposici¨®n con el reproche y la descalificaci¨®n permanente. Sin atender a que las dificultades del momento aconsejar¨ªan la b¨²squeda de los mayores respaldos posibles a las propuestas para salir de la crisis que nos asuela. He aqu¨ª pues un Gobierno con tanta mayor¨ªa como soledad, que frente a la calle sublevada no ha encontrado mejor recurso que cambiar la narrativa mediante el apoderamiento de la RTVE. Se presentaron como la soluci¨®n pero, eliminado Zapatero, han perdido el cr¨¦dito que se les conced¨ªa. Pens¨¢bamos que la derecha sab¨ªa de n¨²meros y manejar¨ªa bien la crisis. Pero ni saben de econom¨ªa ni tampoco de moverse en el seno de la Uni¨®n Europea, pese a que casi todos los Gobiernos sean de su mismo color. ?Para cu¨¢ndo desmontar el fingido oasis alem¨¢n?