Rajoy va al Congreso a la fuerza y con dificultades para ser cre¨ªdo

Jugar con la palabra y la confianza tiene graves contraindicaciones para la actividad pol¨ªtica. Mariano Rajoy ha malgastado gran parte de su credibilidad como gobernante y cuando necesita echar mano de ella se encuentra con que su dep¨®sito est¨¢ casi vac¨ªo. El pr¨®ximo jueves deber¨¢ ir al Congreso de los Diputados a pasar el peor trago de sus 19 meses al frente del Gobierno y acudir¨¢ con el lastre de la falta de credibilidad entre los ciudadanos.

El sondeo de Metroscopia para EL PA?S da por consolidado el desgaste continuo de Rajoy y del PP por la crisis econ¨®mica y los esc¨¢ndalos y, adem¨¢s, muestra que la inmensa mayor¨ªa de los ciudadanos percibe que acude al Congreso a hablar del caso B¨¢rcenas a rastras, forzado por la oposici¨®n y con dificultades para exponer un relato sobre lo ocurrido. Un 90% considera que se ve obligado a comparecer por la presi¨®n de la oposici¨®n. La estrategia de Alfredo P¨¦rez Rubalcaba de amenazar con presentar una moci¨®n de censura instrumental y con el ¨²nico fin de llevar a Rajoy a la fuerza al Parlamento parece haber dado resultado en un clima de cr¨ªtica al presidente al que se han sumado todos los dem¨¢s grupos sin excepci¨®n.

Al desgaste de credibilidad por haber enterrado el programa electoral frente a la crisis econ¨®mica y por los titubeos y rectificaciones sobre medidas concretas le ha seguido la dificultad de crear el relato sobre G¨¹rtel y B¨¢rcenas. Ha pasado por ¡°el finiquito diferido y simulado¡± al extesorero, el respaldo a su inocencia y la protecci¨®n del partido, las declaraciones incriminatorias de B¨¢rcenas, las cuentas en Suiza, los papeles de la contabilidad b del partido, la evidencia de que el presidente del Gobierno le daba ¨¢nimos v¨ªa sms y frases como la de ¡°todo es falso, salvo alguna cosa¡± han terminado por minar esa credibilidad. Hasta el punto de que, seg¨²n el sondeo, un 89% prejuzga ya que la comparecencia del presidente en el Congreso no servir¨¢ para aclarar el caso. Incluso, un 78% de los votantes del PP desconf¨ªa del relato que pueda hacer el jueves.

Santamar¨ªa es la preferida para una futura sustituci¨®n del presidente

Lo que es peor para Rajoy, la mayor¨ªa de espa?oles asegura que cree m¨¢s la palabra de un imputado, que est¨¢ en la c¨¢rcel acusado de graves delitos y al que se le han descubierto m¨¢s de 48 millones de euros en cuentas opacas, que en la del presidente del Gobierno y los dirigentes del partido. La respuesta del Gobierno y el PP ha sido descalificar la palabra de B¨¢rcenas por sus cambios de versi¨®n, sin preguntarse qu¨¦ ha podido ocurrir para que se desequilibre en su contra la opini¨®n p¨²blica, en favor de un presunto delincuente que hasta a?ade obscenidad a su actuaci¨®n con gestos hacia los fot¨®grafos. El presidente no tiene un problema con los medios de comunicaci¨®n, sino con los ciudadanos. Un 56% asegura que cree a B¨¢rcenas cuando dice que pag¨® sobresueldos a la c¨²pula del PP y que el partido se financi¨® irregularmente. En su beneficio se mantiene una ligera ventaja de los votantes del PP que desconf¨ªan del extesorero, aunque un significativo 30% de simpatizantes populares, aparentemente hastiado, no cree a ninguno de los dos. Con ese dep¨®sito de confianza en la reserva acudir¨¢ Rajoy el jueves al Congreso, a contrarriente de la opini¨®n p¨²blica y de todos los dem¨¢s grupos de la C¨¢mara que le exigir¨¢n explicaciones.

Tendr¨¢ un grupo parlamentario s¨®lido, dispuesto a aplaudirle antes de iniciar su intervenci¨®n, y sin que nadie en su partido, por el momento, discuta su autoridad y liderazgo. Al menos no lo hacen en p¨²blico, porque a¨²n resuenan las palabras cr¨ªticas de Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar sobre su gesti¨®n econ¨®mica y, de forma m¨¢s velada, a la manera en la que hace frente a las acusaciones sobre G¨¹rtel y B¨¢rcenas. Tambi¨¦n est¨¢n presentes las significativas frases de Cospedal, n¨²mero dos del partido, reprochando a miembros del Gobierno y del partido falta de reacci¨®n ante las acusaciones. No hay destinatarios identificados de esas palabras de Cospedal, pero si constataci¨®n de a qui¨¦nes beneficia la situaci¨®n o, al menos, qui¨¦nes est¨¢n mejor colocados para una supuesta sucesi¨®n no planteada de Rajoy. En esa lista de preferencias, la mejor colocada es la vicepresidenta Soraya Sa¨¦nz de Santamar¨ªa, esforzada desde hace meses en diferenciar partido y Gobierno para preservar a La Moncloa del lodazal.

La n¨²mero dos del Gobierno es la que suscita mayor apoyo entre los ciudadanos y tambi¨¦n entre los votantes del PP que, en definitiva, son los indicados para opinar sobre un eventual futuro liderazgo en el centroderecha.

Le sigue una pol¨ªtica que no tiene m¨¢s cargo que el org¨¢nico como presidenta del PP en la Comunidad de Madrid y que lidera de manera virtual al sector heterodoxo del PP. Esperanza Aguirre no tiene, no obstante, el apoyo de la mayor¨ªa del PP para esa supuesta sustituci¨®n.

Los m¨¢s rechazados entre los votantes del PP son Gallard¨®n y Cospedal

Los dos m¨¢s rechazados por los votantes del PP como supuestos sustitutos de Rajoy son el ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallard¨®n, y la secretaria general del PP, Dolores de Cospedal. Si fuera cierto lo que explica el primero sobre su retirada de la pol¨ªtica al abandonar el ministerio, no debe afectarle lo m¨¢s m¨ªnimo no estar bien situado para una sucesi¨®n a¨²n no desencadenada. Peor es el dato para Cospedal porque es la n¨²mero dos del partido y porque es reconocida su antagonismo con su equivalente en el Gobierno, Soraya Sa¨¦nz de Santamar¨ªa.

El desgaste del PP, sin alivio por los datos econ¨®micos que apuntan una lejana recuperaci¨®n, siguen manifest¨¢ndose en su menguante estimaci¨®n de voto. No est¨¢ en su nivel m¨¢s bajo, pero s¨ª en situaci¨®n de pr¨¢ctico empate con el PSOE y eso que los socialistas siguen sin remontar y se mantiene el beneficio de IU y UPyD de la crisis evidente del bipartidismo. O, al menos, la crisis de la suma de los votos de los dos grandes partidos.