El ¨²ltimo de Qala-i-Naw

El ¨²ltimo soldado espa?ol que a¨²n quedaba en Qala-i-Naw entreg¨® el pasado jueves las llaves de la base militar construida por Espa?a en 2010 al general afgano Dawood Wadafar. Eran las tres de la madrugada, y en mitad del polvo y del silencio del desierto, el convoy ?ltimo Infante, formado por 183 militares espa?oles y tres traductores, pon¨ªa fin para siempre con su marcha a la presencia espa?ola en la provincia afgana de Badghis. Los ¨²ltimos espa?oles en Qala-i-Naw emprend¨ªan un ¡°accidentado camino¡± de 160 kil¨®metros hacia Herat: una ruta que atraviesa el paso de monta?a de Sabzak, a m¨¢s de 2.000 metros de altura, en el que m¨¢s de dos tercios del viaje discurren por una pista de tierra y donde todav¨ªa persiste la amenaza de las emboscadas de talibanes.

¡°El principal riesgo son los ataques con IED [artefactos explosivos improvisados] pero llevamos radares para detectarlos¡±, narraba el capit¨¢n Juan Rom¨¢n Torres, que viaj¨® en el ¨²ltimo de los 14 convoyes que desde junio han ido vaciando Qala-i-Naw. Aunque el recorrido, de 12 horas, transcurri¨® sin ning¨²n incidente, los soldados tiradores no quitaban ojo a las colinas pedregosas que les rodeaban y que pod¨ªan servir de escondite a alg¨²n insurgente.

Despu¨¦s de ocho a?os de misi¨®n en la provincia afgana de Badghis, Espa?a se retiraba ¡°con discreci¨®n¡±. Solo algunos soldados afganos, encabezados por el general Wadafar, desped¨ªan a los espa?oles en Qala-i-Naw, mientras la ciudad, un conjunto de casas de adobe en mitad de una colina, dorm¨ªa. ¡°Es un honor que los amigos espa?oles salgan de una forma tan buena y tan pac¨ªfica¡±, comentaba horas antes Wadafar.

Ni siquiera en la ceremonia celebrada por la ma?ana, que oficializ¨® de forma g¨¦lida la transferencia de la base al Gobierno afgano, se escuch¨® un ¡°?Viva Espa?a!¡±, que m¨¢s tarde s¨ª sonar¨ªa en Herat. Fue el ministro de Defensa, Pedro Moren¨¦s, que presidi¨® el acto, quien insufl¨® de patriotismo la ceremonia al recordar que aquella tierra, a m¨¢s de 6.000 kil¨®metros de Espa?a, ¡°hab¨ªa sido regada con la sangre y el sudor¡± de sus soldados.

El ¨²ltimo de Qala-i-Naw

La misi¨®n en Afganist¨¢n se ha cobrado la vida de 98 soldados espa?oles y de dos traductores. De los militares fallecidos, 62 murieron en el accidente a¨¦reo del Yak-42, y del resto, la mayor¨ªa cay¨® en ataques de los insurgentes, que colocaban bombas al paso de las tropas espa?olas. ¡°En cualquier patrulla te pod¨ªan atacar¡±, cuenta un traductor que ha trabajado con el Ej¨¦rcito espa?ol y que en una ocasi¨®n ayud¨® a evacuar ¡°desde lo alto de una colina¡± a un soldado que hab¨ªa recibido un ¡°balazo en la espalda¡±.

Y, sin embargo, ni una sola bandera de Espa?a adornaba la mesa en la que se sentaba Moren¨¦s, cubierta por un extenso manto con un estampado de elefantes. Espa?a prefiri¨® ceder el protagonismo a los afganos en el traspaso de la base. Era el broche de uno de sus cometidos como miembro de la misi¨®n de la OTAN en Afganist¨¢n (ISAF): preparar al Ej¨¦rcito afgano para que asumiera la responsabilidad de mantener la seguridad en Badghis.

¡°Cuando llegamos en 2005 hab¨ªa solo unos cien polic¨ªas para defender toda la provincia [del tama?o de Asturias] pero ni siquiera pod¨ªan controlar Qala-i-Naw¡±, explican fuentes militares. Adem¨¢s de la base militar, Espa?a lleg¨® a desplegar en Badghis tres puestos avanzados, en Ludina, Moqur y Darra e Bum. ¡°Era un momento penoso para la regi¨®n, porque la delincuencia y los se?ores de la guerra campaban a sus anchas¡±, comenta un militar que estuvo destinado el pa¨ªs asi¨¢tico.

Aunque hay m¨¢s seguridad, no ha desaparecido la amenaza talib¨¢n

Pero poco a poco, el Ej¨¦rcito afgano penetr¨® en Badghis. ¡°Lleg¨® porque Espa?a lo llev¨® desde Kabul¡±, matizan fuentes de Defensa. Militares, polic¨ªas y guardias civiles espa?oles les ense?aron desde las tareas m¨¢s sencillas, como la elaboraci¨®n de un estadillo, a la planificaci¨®n de operaciones de combate. ¡°Agradecemos el trabajo de los consejeros espa?oles de seguridad, que nos han adiestrado y nos han forjado como soldados¡±, proclam¨® el general Wadafar, jefe de la 3? Brigada del 207 Cuerpo del Ej¨¦rcito Afgano, ahora responsable de la seguridad en Badghis.

Seg¨²n fuentes de Defensa, los afganos ya est¨¢n preparados para operar con independencia de la ISAF en esta provincia, situada al noreste de Afganist¨¢n. Las tropas espa?olas ¡°han llevado a cabo m¨¢s de 28.000 operaciones conjuntas¡± con el ej¨¦rcito afgano, destac¨® Pedro Moren¨¦s.

Desde el comienzo de la misi¨®n de Espa?a en Afganist¨¢n, en enero de 2002, el Gobierno ha invertido en el pa¨ªs m¨¢s de 353 millones de euros, de los que 108 se han destinado exclusivamente al desarrollo de Badghis, seg¨²n fuentes del Ministerio de Defensa. Adem¨¢s de las labores de entrenamiento del Ej¨¦rcito afgano, Espa?a ha protegido desde la base de Ludina, que ocup¨® en 2010, los trabajos de construcci¨®n de la ruta Lithium, que une la provincia de norte a sur.

Asimismo, la Agencia Espa?ola de Cooperaci¨®n y Desarrollo (AECID) ha llevado a cabo programas destinados a incrementar la productividad de los cultivos y ha construido siete cl¨ªnicas b¨¢sicas y tres institutos de educaci¨®n secundaria. Se ha proporcionado, adem¨¢s, acceso al agua a la poblaci¨®n de Qala-i-Naw, se han pavimentado sus calles y se han rehabilitado m¨¢s de 160 kil¨®metros de carreteras rurales.

Un total de 98 soldados espa?oles y dos traductores han muerto en el pa¨ªs

La complejidad y la magnitud del repliegue de Badghis pone de relieve el esfuerzo espa?ol: una operaci¨®n log¨ªstica, ¡ª¡°la m¨¢s importante de los ¨²ltimos a?os¡±, seg¨²n Defensa¡ª, de m¨¢s de 24 millones de euros para repatriar 4.285 toneladas de material valoradas en 310 millones de euros.

Y, a partir de ahora, seg¨²n dej¨® claro Moren¨¦s, la responsabilidad de mantener la seguridad y de continuar con el desarrollo econ¨®mico y social de la regi¨®n es de los afganos, porque los espa?oles ya solo se encuentran en Herat.

Aunque la seguridad ha aumentado, el peligro de los ataques talibanes todav¨ªa no ha desparecido. Los 14 convoyes que han desalojado la base de Qala-i-Naw han viajado, por ejemplo, escoltados por helic¨®pteros Tigre.

A¨²n as¨ª, el gobernador de Badghis, Ahmadullah Alizahi, se comprometi¨® a mantener la estabilidad de la provincia y a ¡°seguir trabajando por los derechos humanos y la presencia de la mujer en el terreno social y econ¨®mico¡±, en una ceremonia en la que las dos ¨²nicas mujeres afganas, entre unos 200 asistentes, prefirieron sentarse entre los militares espa?oles antes que con sus compatriotas. Ahora ya no tendr¨¢n esa alternativa. Ning¨²n soldado espa?ol queda ya en Qala-i-Naw.