Los piratas que abordaron un buque del Ej¨¦rcito espa?ol: ¡°Est¨¢bamos perdidos¡±
"El esquife estaba lleno de sangre. Hab¨ªa dos heridos", declara el capit¨¢n del 'Pati?o'
Ni fusiles de asalto, ni lanzagranadas ni escaleras. Los seis somal¨ªes que presuntamente abordaron el buque de la marina espa?ola Pati?o en el Oc¨¦ano ?ndico han afirmado este lunes en la Audiencia Nacional que son pescadores y que no iban armados en la noche del 12 de enero de 2012. Los asaltantes han asegurado que llevaban una semana a la deriva y que se dirigieron a la nave espa?ola en busca de ayuda. La fiscal¨ªa pide 23 a?os para cada uno de ellos. Los investigadores creen que el intento de abordaje se produjo por error a causa de la oscuridad de la noche y que la intenci¨®n de los piratas era secuestrar un buque mercante.
Enrique Cubeiro, capit¨¢n de fragata de la marina y comandante del Pati?o, ha ratificado que oy¨® el tiroteo entre su tripulaci¨®n y los asaltantes, aunque asegura desconocer qui¨¦n lo inici¨®. "El esquife estaba lleno de sangre. Hab¨ªa dos heridos", ha definido Cubeiro en relaci¨®n a la lancha en la que huyeron los supuestos piratas, ahora en manos del Ej¨¦rcito espa?ol, y ha asegurado que les sorprendi¨® la cantidad de carburante que hab¨ªa en la embarcaci¨®n, "mucho m¨¢s de lo que es habitual" y "suficiente para permanecer una semana en alta mar", adem¨¢s de comida envasada al vac¨ªo y agua en abundancia.
Los acusados sostienen que hab¨ªan salido de Mogadiscio para ayudar a reparar una embarcaci¨®n averiada en alta mar, aunque desconoc¨ªan su situaci¨®n exacta, por lo que se perdieron. Mohamed Abdullah Hassan, Mohamed Aden Mohamed, Issa Abdullah Issa, Abdillahi Mohamed Gouled, Mohamed Said Ahmed y Hamoud Elfaf Mahou est¨¢n en prisi¨®n, acusados de pertenencia a organizaci¨®n criminal (seis a?os), pirater¨ªa (13 a?os) y tenencia y dep¨®sito de armas (cuatro a?os). Seg¨²n su versi¨®n, se habr¨ªan acercado al buque espa?ol para pedir socorro. En todo momento han defendido que fueron los espa?oles los que abrieron fuego. A la espera de las declaraciones del centinela que los avist¨® y de otros testimonios que presenciaron el tiroteo ¨Cel juicio continuar¨¢ el martes y el mi¨¦rcoles¨C, ning¨²n testimonio espa?ol ha declarado lo contrario. Mohamed Said Ahmed, de 25 a?os, ha negado que los acusados llevaran el el esquife en el que navegaban armas o que hubieran disparado contra el buque de combate espa?ol. "Nos acercamos para pedir ayuda. No para atacar. No nos escucharon y empezaron directamente a disparar sin hablar nada", ha declarado.
"Eran en torno a las siete y cuarto de la ma?ana, hora local, una hora antes de que amaneciera. Estaba en mi camarote prepar¨¢ndome para subir a cubierta cuando recib¨ª una llamada. Me comunicaron que se hab¨ªa detectado un esquife aproxim¨¢ndose y que pretend¨ªa instalar una escalera", ha relatado el comandante. "O¨ª r¨¢fagas de disparos durante unos 20 o 30 segundos. Termin¨¦ de atarme las botas y sal¨ª. Cuando llegu¨¦ a cubierta, el puente estaba a oscuras y el buque, en completo silencio", ha a?adido.
Entonces, seg¨²n las declaraciones de los tres militares citados como testimonios, empezaron a buscar la lancha, que se hab¨ªa escabullido aprovechando la oscuridad. La fiscal¨ªa de la Audiencia Nacional rebaj¨® en junio, cuando acept¨® asumir el caso, la pena de 1.122 a?os que ped¨ªa el juez instructor del caso, Eloy Blasco, achacando a cada uno de los seis somal¨ªes 218 tentativas de secuestro por los 218 tripulantes del barco.
Al amanecer, el helic¨®ptero del Pati?o sali¨® en b¨²squeda de la lancha, "demasiado peque?a para ser detectada por el radar", seg¨²n el testimonio de otro militar. La detectaron una media hora despu¨¦s, pero por el oleaje, volvieron a perderla, hasta dar con ella. Una c¨¢mara del helic¨®ptero grab¨® la operaci¨®n. "Lo primero que nos sorprendi¨® fue que no llevaban redes de pesca", ha afirmado Ricardo Giner, teniente del nav¨ªo y piloto del helic¨®ptero. "Cuando los ten¨ªamos a unos 300 metros, mis subordinados recibieron la orden de lanzar una r¨¢faga al aire. Al no cesar los tiros, lanzaron una segunda", ha explicado Cubeiro. El tiroteo provoc¨® dos heridos en la lancha de los somal¨ªes que fueron operados a bordo del Pati?o. Ambas embarcaciones recibieron impactos de bala.
La grabaci¨®n s¨ª registr¨® el lanzamiento de objetos al agua por parte de los fugitivos. "Los acusados comenzaron arrojar al mar siete fusiles AK 47, dos lanzagranadas, tres escalas, una bolsa de pl¨¢stico blanca y una negra, as¨ª como otros objetos no identificados de peque?o tama?o", constata el escrito de acusaci¨®n de la fiscal¨ªa, de acuerdo con esa grabaci¨®n. "Los fusiles de asalto tienen una fisionom¨ªa muy clara. Se ve perfectamente en el v¨ªdeo", ha abundado Cubeiro. Los asaltantes han incurrido en contradicciones al referirse esos lanzamientos: unos han negado sistem¨¢ticamente haberse deshecho de nada, otro ha afirmado haberse desprendido de bolsas de basura y comida y un tercero, de una bolsa negra que usaban de ba?era.
Las diligencias previas al juicio sacaron a luz una prueba con la que los acusados tienen muy dif¨ªcil desmarcarse de una red de pirater¨ªa que opera en este estado fallido del cuerno de ?frica. Las agendas de dos tel¨¦fonos m¨®viles encontrados en el esquife ten¨ªan grabados 12 n¨²meros que tambi¨¦n aparecieron en otras detenciones de piratas realizadas previamente por otros barcos de la Operaci¨®n Atalanta. El an¨¢lisis de los tel¨¦fonos sirvi¨® tambi¨¦n para confirmar que d¨ªas antes del ataque al barco de guerra recibieron 19.000 d¨®lares con los que habr¨ªan comprado las armas y utensilios necesarios para el abordaje.
Cubeiro ha a?adido que el motor del esquife de cuatro metros de eslora no es propio de un barco de pesca, adem¨¢s de ser "muy caro para unos simples pescadores". El n¨²mero de serie de este aparato Yamaha est¨¢, adem¨¢s, muy cercano al de otros de la misma marca incautados a otros piratas de la zona, ha explicado.
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