Doscientos expertos sientan las bases de un consenso en pol¨ªtica exterior

Jos¨¦ Manuel Garc¨ªa-Margallo, Javier Solana y Marcelino Oreja presentan hoy, en la Escuela Diplom¨¢tica, el informe Hacia una renovaci¨®n estrat¨¦gica de la pol¨ªtica exterior espa?ola elaborado por el Instituto Elcano. La personalidad de los presentadores ¡ªel actual ministro de Exteriores y dos de sus antecesores, de los otros dos partidos que han gobernado en democracia, PSOE y UCD¡ª da idea del car¨¢cter de este documento, sin precedentes en Espa?a: una reflexi¨®n colectiva en la que, a lo largo de diez meses, han colaborado casi 200 expertos de diversos ¨¢mbitos: la Administraci¨®n, la Universidad, las empresas, otros think-tanks (centros de pensamiento) o el Parlamento.

El informe Elcano no es la Estrategia de Acci¨®n Exterior prevista en la Ley de Acci¨®n y del Servicio Exterior actualmente a tr¨¢mite en el Senado, pero est¨¢ llamado a servir de base para el texto que corresponde aprobar al Gobierno. Aunque su objetivo es m¨¢s ambicioso. Se trata, seg¨²n su coordinador, Ignacio Molina, profesor de Ciencias Pol¨ªticas de la Universidad Aut¨®noma de Madrid, de ¡°acometer una renovaci¨®n estrat¨¦gica de la pol¨ªtica exterior espa?ola¡±, que se qued¨® sin referentes cuando alcanz¨® los grandes objetivos fijados en la transici¨®n: la plena inserci¨®n de Espa?a en la UE y la completa normalizaci¨®n de sus relaciones internacionales.

El informe parte de una visi¨®n realista del papel que puede jugar Espa?a en el mundo, como una ¡°potencia media con presencia global, que ha de boxear conforme a su peso¡±, consciente de sus debilidades y amenazas (de la crisis econ¨®mica a la p¨¦rdida de confianza en las instituciones), pero tambi¨¦n de sus fortalezas y oportunidades (un idioma compartido con m¨¢s de 20 pa¨ªses).

El texto reafirma que la ¡°integraci¨®n europea constituye la principal apuesta estrat¨¦gica de la pol¨ªtica exterior espa?ola¡±, pero reclama un europe¨ªsmo ¡°inteligente¡±, que tenga en cuenta los intereses de Espa?a, pues ¡°los ¨²ltimos a?os han demostrado que no cualquier tipo de construcci¨®n europea es positiva¡±.

El proyecto del Instituto Elcano (una fundaci¨®n p¨²blico-privada presidida por el Pr¨ªncipe de Asturias, en cuyo patronato se sientan las principales empresas espa?olas, cuatro ministerios y el primer partido de la oposici¨®n) ya hab¨ªa echado a andar cuando, en mayo pasado, Margallo le dio su espaldarazo y lo convirti¨® en el referente intelectual de su propio proyecto de pol¨ªtica exterior. Seg¨²n el profesor Molina, ello no ha supuesto injerencia ni cortapisa para una reflexi¨®n en la que han colaborado, entre otros muchos, Felipe Gonz¨¢lez, Ana Palacio, Carlos Westendorp, Eduardo Serra, Juan Fernando L¨®pez Aguilar, Josep Piqu¨¦ o Rosa Conde.

El documento final, de 150 p¨¢ginas, solo es responsabilidad del equipo de redacci¨®n, pero refleja el m¨ªnimo com¨²n denominador (¡°semilla de consenso¡±, en palabras de Margallo) entre expertos de PP y PSOE ¡ªaunque tambi¨¦n han hecho aportaciones miembros de CiU o el PNV, y responsables de la acci¨®n exterior vasca y catalana¡ª y aspira a ¡°integrar sensibilidades pol¨ªticas distintas, reforzando cierta continuidad en la pol¨ªtica exterior al margen de posibles cambios de gobierno¡±.

Aunque se centra en la identificaci¨®n de grandes objetivos tem¨¢ticos y espacios geogr¨¢ficos prioritarios, o en el modo de integrar los diversos instrumentos de la acci¨®n exterior, tambi¨¦n aborda algunos de los asuntos que han dividido a las fuerzas pol¨ªticas:

? Catalu?a. No menciona expresamente el reto soberanista catal¨¢n, pero admite que ¡°las evidentes tensiones territoriales que ponen en cuesti¨®n el pacto constitucional¡± constituyen una debilidad de Espa?a. Propone, sin embargo, convertir esta debilidad en fortaleza al recomendar al Gobierno que asuma ¡°de manera m¨¢s expl¨ªcita la pluralidad territorial en la proyecci¨®n exterior de Espa?a, una de las sociedades m¨¢s multiling¨¹es y uno de los Estados m¨¢s descentralizados de Europa que, sin embargo, no incluye a¨²n esa diversidad como uno de los principales elementos de su pol¨ªtica exterior¡±. El objetivo ser¨ªa situar a Espa?a como referente internacional de esa pluralidad interna y ¡°acercar al proyecto colectivo de pa¨ªs a ciudadanos que hoy se sienten alejados del mismo¡±; en especial, catalanes y vascos.

? Diplomacia auton¨®mica. M¨¢s que reforzar los mecanismos de control sobre la acci¨®n de las comunidades aut¨®nomas en el extranjero, el informe aboga por potenciar los mecanismos de colaboraci¨®n para ¡°contribuir a una participaci¨®n efectiva y leal de las comunidades aut¨®nomas¡± en el dise?o de la pol¨ªtica exterior; cuya direcci¨®n corresponde al Gobierno.

? Gibraltar. Respalda la posici¨®n oficial de crear un nuevo foro de cooperaci¨®n transfronteriza en el que est¨¦ representada, adem¨¢s de Espa?a, Reino Unido y Gibraltar, la Junta de Andaluc¨ªa; y al que se asocie a la Comisi¨®n Europea. Como soluci¨®n definitiva, aboga por negociar con Londres ¡°un estatuto imaginativo¡± (en alusi¨®n a la cosoberan¨ªa) que tenga en cuenta ¡°los intereses¡± no solo de los llanitos, como hasta ahora, sino tambi¨¦n de sus vecinos del campo de Gibraltar.

? S¨¢hara. Aunque con cautela, se desmarca de una posible independencia de la excolonia espa?ola, al advertir la preocupaci¨®n que suscita la aparici¨®n de ¡°un nuevo Estado poblado por habitantes no homog¨¦neos y susceptibles de radicalizaci¨®n¡±, en una regi¨®n muy inestable. ¡°Espa?a¡±, agrega, ¡°podr¨ªa adoptar una posici¨®n m¨¢s proactiva y, cuando las condiciones sean favorables, plantear una soluci¨®n de autogobierno genuino y garantizado que permita satisfacer los deseos de Marruecos y el Frente Polisario¡±.

? Cuba. En este punto, quiz¨¢ el m¨¢s controvertido, el informe es lac¨®nico: ¡°Cuba, pa¨ªs al que los espa?oles se sienten muy pr¨®ximos sentimentalmente, vive un delicado proceso de transformaci¨®n que reclama que Espa?a lo acompa?e con una pol¨ªtica espec¨ªfica¡±.

? Intervenciones militares. No menciona los antecedentes de Irak o Kosovo, pero reconoce que puede plantearse la intervenci¨®n en una crisis humanitaria o conflicto sin el aval de la ONU. ¡°Este dilema, solo puede resolverse de forma pol¨ªtica y caso por caso¡±, de acuerdo con la Ley Org¨¢nica de Defensa Nacional, que exige autorizaci¨®n de las Cortes.

? Am¨¦rica Latina. El documento aboga por utilizar esta expresi¨®n, y no la de Iberoam¨¦rica, ¡°por consideraci¨®n y respeto¡±, ya que es la que utilizan los propios latinoamericanos, as¨ª como los organismos internacionales, y porque esta ¨²ltima debe reservarse a la comunidad que engloba a los pa¨ªses de Am¨¦rica Latina y la pen¨ªnsula Ib¨¦rica.

? Revisi¨®n consular. Espa?a tiene 117 embajadas bilaterales, 10 multilaterales y 92 consulados, pero su ubicaci¨®n, sobre todo la de estos ¨²ltimos, no responde a las necesidades de los espa?oles, por lo que propone una revisi¨®n de su funcionamiento y despliegue.