Las cartas de la ¡®hermanita¡¯ presa Matilde Landa a la ni?a Carmencilla
Natxa Pomar y Es Baluard homenajean a las mil reclusas de la c¨¢rcel de ¡°Las Hermanitas¡± de Palma
Dan voz a una historia cruel, en una narraci¨®n coral de cartas de una madre presa cargadas de met¨¢foras para despistar a los censores. Setenta y una mujeres vestidas de negro leen fragmentos de seis misivas que la m¨ªtica activista roja Matilde Landa escribi¨® desde una c¨¢rcel franquista a su hija, la ni?a Carmencilla, refugiada en M¨¦xico. Es un film-poster de evocaci¨®n de las v¨ªctimas de la prisi¨®n de mujeres de Palma, can Salas, una micro instalaci¨®n documental que se puede ver en el museo Es Baluard. Cientos de personas en silencio siguieron la exhibici¨®n callejera del v¨ªdeo, en pantalla gigante de diez por siete metros. Unas im¨¢genes proyectadas precisamente contra el muro de la Biblioteca P¨²blica, alzada en el solar del viejo centro de represi¨®n.
¡°Es un homenaje simb¨®lico y po¨¦tico que quiere sintetizar la pervivencia de la memoria de las 1.000 reclusas de las Hermanitas¡±, detalla Natxa Pomar, artista de Mallorca, de 24 a?os, que ha creado esta acci¨®n visual, de investigaci¨®n documental y est¨¦tica, tras poner im¨¢genes y sonidos actuales al otro cat¨¢logo del horror: las fosas comunes, paredones, cunetas, pozos, playas y acantilados que desde 1936 se usaron en la isla para lanzar o soterrar a los asesinados tras el golpe de Franco. "En Mallorca dicen que no hubo la guerra (apenas 20 d¨ªas en Manacor) pero la represi¨®n fue terrible", dice Pomar. Ning¨²n enterramiento ha sido excavado. La creadora hizo fotos coloristas de hoy y capt¨® sonidos ambientales, sin voces de los lugares de la muerte. En uno y otro proyecto art¨ªstico-hist¨®rico disecciona vivencias traum¨¢ticas para suscitar una reflexi¨®n contempor¨¢nea y universal.
Matilde Landa Vaz (Badajoz, 1904-Palma,1942), feminista pionera, alumna de la Instituci¨®n Libre de Ense?anza y comunista en la primera mitad del siglo XX, fue de las 1.000 presas del exconvento y exasilo, transformado en centro de represi¨®n de can Salas, ¡°Las hermanitas¡±.
Landa se lanz¨® al vac¨ªo. Cay¨®, seg¨²n las autoridades franquistas. Se supone que se quit¨® la vida para no verse forzada a renegar de sus ideas, abrazar la fe cat¨®lica y comulgar como le exig¨ªan. Le presionaron con dejar de alimentar a los ya mal nutridos hijos de las presas, en un chantaje doblemente irresistible, seg¨²n la versi¨®n del historiador David Ginard en su biograf¨ªa Matilde Landa de 2005. Landa, una de las "m¨¢rtires" del PCE, fue bautizada in art¨ªculo mortis, inconsciente. El grupo vasco Barricada homenaje¨® en una canci¨®n a Matilde Landa.
Ten¨ªa que ¡°redimirse¡±, seg¨²n el chantaje de los agentes de la dictadura y su brazo interior de autoridad de la c¨¢rcel, las monjas guardianas del orden y represoras seg¨²n el relato de las v¨ªctimas. Una de ellas, Isabel Coll, joven obrera de Menorca, como cientos de republicanas activistas y otras esposas, madres, mujeres e hijas presas, fue condenada inicialmente a muerte: ¡°No sab¨ªamos que quer¨ªa decir¡±, narr¨® a?os atr¨¢s, antes de enfermar. Coll posiblemente es la ¨²nica superviviente con m¨¢s de 90 a?os, narr¨® en su d¨ªa como las religiosas golpeaban con un cuchar¨®n.
La artista Natxa Pomar (Palma, 1988) fue invitada por la directora de Es Baluard, Nekane Aramburu, a efectuar este trabajo sobre la prisi¨®n. Pomar estudi¨® comunicaci¨®n audiovisual y se especializ¨® en sociolog¨ªa y fotograf¨ªa en Londres.
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