Merkel, Juncker y...?Guindos?

Juncker coge por el cuello a Luis de Guindos el 12 de marzo de 2012 por bajar unilateralmente el objetivo del d¨¦fict, anuncio que quedar¨¢ anulado tras el "estrangulamiento". 

Angela Merkel ha subido el pulgar.

"Ahora yo estoy orientando todas las discusiones precisamente en el esp¨ªritu de que Jean-Claude Juncker debe ser presidente de la Comisi¨®n Europea".

Despu¨¦s de sembrar la incertidumbre en los ¨²ltimos d¨ªas, la canciller alemana se ha decantado.

Los jefes de Estado y de Gobierno de la Uni¨®n Europea ya lo saben.

Aunque el Partido Popular Europeo ha sufrido un fuerte castigo en las elecciones europeas ( ha pasado de 265 esca?os en 2009 a 214 en 2014, 51 menos), ha llegado primero por encima de los socialistas que han subido 7 esca?os (de 184 en 2009 a 191 en 2014).

La apuesta de Angela Merkel por Juncker, suponiendo que salga airosa en el Consejo Europeo y en el Parlamento Europeo, ?nos da alguna pista sobre la futura composici¨®n de la Comisi¨®n Europea?. M¨¢s precisamente, ?qu¨¦ nos dice sobre Espa?a?

Fuentes europeas sostienen que el compromiso de Angela Merkel, por as¨ª llamarlo, con Mariano Rajoy, por su respaldo in extremis a la candidatura de Juncker frente a la del franc¨¦s Michel Barnier, se limitaba a garantizar para Espa?a un comisario europeo.

De ah¨ª la candidatura de Miguel Arias Ca?ete.

Despu¨¦s de ser eurodiputado durante once a?os, ministro de Agricultura entre 2000 y 2004 y secretario de Econom¨ªa del PP entre 2004 y 2008, Arias Ca?ete no deseaba ser ministro de Agricultura. Rajoy consigui¨® que aceptara el puesto en 2011, pero a cambio pactaron que despu¨¦s de las elecciones europeas se ir¨ªa de comisario a Bruselas.

Ahora habr¨¢ que ver c¨®mo se cumplen los pactos en Europa. El castigo que ha sufrido en las urnas el PP debilita su presencia en el PPE, pero no al punto de hacerle perder el comisario. La cuarta econom¨ªa de la Eurozona ten¨ªa un comisario con rango de vicepresidente y seg¨²n fuentes comunitarias lo seguir¨¢ teniendo en la futura Comisi¨®n.

Pero, ?y la otra aspiraci¨®n del Gobierno de Mariano Rajoy? La de situar a Luis de Guindos en el cargo de presidente del Eurogrupo, el organismo informal que coordina a los 17 pa¨ªses que integran el euro a trav¨¦s de sus reuniones?

El cargo debe, primero, ser creado. Hasta ahora la presidencia, que Juncker ejerci¨® durante gran parte de la Gran Recesi¨®n y la Crisis de la Deuda Soberana, era ocupada por un ministro de Finanzas, no era un cargo de dedicaci¨®n exclusiva. Actualmente, la funci¨®n est¨¢ en manos del ministro holand¨¦s, Jeroen Dijsselbloem, quien sustituy¨® precisamente a Juncker, quien abandon¨® esa presidencia en enero de 2013, despu¨¦s de ejercera durante ocho a?os.

Dijsselbloem es miembro del Partido Laborista holand¨¦s. Y formalmente equilibraba a un presidente de la Comisi¨®n Europea conservador, el portugu¨¦s Jos¨¦ Manuel Durao Barroso.

Por tanto, si Juncker es, como dice Merkel, consigue la presidencia, lo normal es que la presidencia del Eurogrupo, cuando el nuevo cargo con dedicaci¨®n exclusiva sea creado, tenga a la cabeza a una persona de tendencia diferente. Salvo en este breve periodo de Dijsselbloem, no siempre ha sido as¨ª. Porque Durao Barroso y Juncker fueron presidente de la Comisi¨®n y del Eurogrupo, respectivamente.

Pero fuentes comunitarios sostienen que ahantendr¨¢ la pol¨ªtica (formal) de equilibrio pol¨ªtico. 

Con todo, hay otro factor que ha entrado en escena.

Es el factor Moscovici.

Pierre Moscovici, ministro de Finanzas, Econom¨ªa y Comercio Exterior, dej¨® el Gobierno franc¨¦s en la crisis que llev¨® a Manuel Valls al puesto de primer ministro, a primeros de abril pasado.

Moscovici es una instituci¨®n en el socialismo franc¨¦s. Fiel a Fran?ois Hollande, ha sido eurodiputado y m¨¢s tarde ministro de Asuntos Europeos. 

Francia, seg¨²n las fuentes comunitarias consultadas, quiere un mayor peso y visibilidad en el d¨ªa a d¨ªa de la pol¨ªtica europea. La posibilidad de colocar a Moscovici en la presidencia del Eurogrupo compensar¨ªa la presidencia del conservador Juncker.

Por tanto, se abren unos meses de maniobras.

  Luis de Guindos nunca dio por hecho o consumado su nombramiento al frente del Eurogrupo, un puesto sobre el cual ha insistido que primero deber¨ªa crearse.

Pero entre sus colaboradores y asesores existe desde hace meses el deseo de colocarse en otros puestos. Y no pocos de ellos - m¨¢s de una docena- ya est¨¢n a la espera de asumir sus nuevos destinos. Todos en el extranjero...