La endogamia alcanza al 73% de los docentes

Ester P¨¦rez Lorences, de 55 a?os, catedr¨¢tica de Fisiolog¨ªa Vegetal de la Universidad de Valencia desde 2007, estaba a punto de comenzar el segundo ejercicio de una oposici¨®n en diciembre de 1998 cuando el tribunal solicit¨® su presencia a puerta cerrada. Tras marearla con que le faltaba un papel, le dijeron: ¡°Esta plaza no te toca; no te presentes¡±. P¨¦rez Lorences desisti¨®. Ese examen en Valencia era para ella poco m¨¢s que un ensayo. Lo que quer¨ªa, 10 a?os despu¨¦s, era volver a casa, y la Universidad de Le¨®n hab¨ªa convocado para dos meses m¨¢s tarde una plaza a la que ten¨ªa previsto presentarse. Cuando lleg¨®, no la esperaban. ¡°El presidente me dijo: ¡®?Qu¨¦ haces aqu¨ª?¡¯. No s¨¦ la raz¨®n pero el puesto estaba adjudicado¡±. Se lo dieron a su ¨²nico competidor, Jes¨²s Miguel ?lvarez Fern¨¢ndez, el candidato local.

El episodio a¨²n sigue vivo. El Tribunal Superior de Justicia de Castilla y Le¨®n anul¨® en 2012 el nombramiento de ?lvarez ¡ªque recurri¨® al Constitucional¡ª al considerar que la instituci¨®n no se hab¨ªa ajustado a los principios de igualdad, m¨¦rito y capacidad y oblig¨® a adjudicar el puesto a P¨¦rez Lorences. Hace dos semanas tom¨® posesi¨®n y pidi¨® una excedencia. ¡°Mi vida ha cambiado. No podr¨ªa volver a Le¨®n. No creo que el ambiente de trabajo fuera el id¨®neo. Adem¨¢s, mis hijas han empezado la universidad, mi marido trabaja en Valencia, donde soy catedr¨¢tica desde hace siete a?os...¡±.

¡°Yo no ten¨ªa padrino, solo ten¨ªa trabajos¡±, dice una catedr¨¢tica que fue rechazada

La historia est¨¢ salpicada de casos que ilustran que la universidad espa?ola se nutre de personas que ha formado evitando muchas veces la competencia que favorece elegir a los mejores, y no siempre con mecanismos limpios. Luis Sanz-Men¨¦ndez, investigador del CSIC, ha contabilizado 35 anulaciones de plazas por tribunales superiores de justicia en 20 a?os. Ocurre muchas m¨¢s veces de las que llegan a los juzgados, la buena noticia es que ocurre cada vez menos.

EL PA?S ha tenido acceso a las primeras cifras oficiales sobre el fen¨®meno de la endogamia. El Ministerio de Educaci¨®n, que ha declinado participar en este reportaje, calcula que el 73% del cuerpo docente de la universidad p¨²blica del curso 2013/14 estudi¨® en el centro en el que est¨¢ contratado. La estad¨ªstica provisional cruza el centro en el que trabaja un docente o investigador con aquella donde ha le¨ªdo la tesis. Lo que no refleja es si, entre un paso y el siguiente, ha hecho carrera en otro campus.

El comit¨¦ de expertos nombrado por el ministro de Educaci¨®n, Jos¨¦ Ignacio Wert, para la reforma universitaria, puso las consecuencias de esta pr¨¢ctica negro sobre blanco en un informe que duerme el sue?o de los justos desde febrero de 2013. ¡°Espa?a no ha tenido un premio Nobel cient¨ªfico desde hace m¨¢s de un siglo: el ¨²nico lo obtuvo Santiago Ram¨®n y Cajal en 1906 (...). En el polo opuesto se puede situar al Trinity College, con 32, pese a ser un college entre la treintena que tiene Cambridge (...). El sistema universitario p¨²blico espa?ol tuvo 401 patentes en 2010. (...) Como comparaci¨®n, un solo profesor del MIT, Robert Langer, tiene 811¡±.

Estados Unidos ataj¨® estas pr¨¢cticas hace m¨¢s de medio siglo?

Las clasificaciones internacionales son reflejo de esta realidad: solo una instituci¨®n espa?ola, la Universidad de Barcelona, ha logrado situarse entre las 200 primeras del mundo en el r¨¢nking de Shanghai. ¡°Si no nos exponemos a diferentes formas de pensar la ciencia, es dif¨ªcil que entren nuevas ideas¡±, dice Louise McNally, vicerrectora de profesorado de la Universidad Pompeu Fabra (UPF).

Charles W. Elliot, exrector de Harvard (EE UU), vio clara esta relaci¨®n entre endogamia y baja productividad antes incluso de que lo demostraran los estudios emp¨ªricos y en 1909 advirti¨® de que hab¨ªa que atajarla. Todas las universidades del pa¨ªs se sumaron al debate y decidieron no contratar a sus doctores hasta pasado el tiempo. No hizo falta ley alguna. Para mediados de siglo hab¨ªan resuelto el problema. La endogamia solo resist¨ªa, y muy suavizada, en facultades de leyes y en algunos Estados del sur.

Para el presidente de los rectores ¡°el problema es la falta de movilidad¡±

El talonario, claro, atrae m¨¢s f¨¢cilmente el talento, y el hecho de que las universidades espa?olas est¨¦n atadas de pies y manos para ofrecer sueldos individualizados ¡ªcoinciden los expertos¡ª es un lastre. Pero ese es solo uno de los problemas para atajar la endogamia de la Universidad espa?ola, muy alejada de Europa en inversi¨®n en I+D (casi un punto menos, con un 1,24% del PIB) y que ha visto mermar alrededor del 14% sus presupuestos desde 2010.

¡°En los sistemas de gobernanza, lo que cuenta hasta para ser jefe de departamento son las lealtades y los votos¡±, explica Sanz-Men¨¦ndez, doctor en Ciencias Pol¨ªticas y Sociolog¨ªa por la Complutense de Madrid. ¡°La universidad se parece a un juego pol¨ªtico, favorece la formaci¨®n de coaliciones espurias¡±. El rector se elige entre los miembros del campus para cuatro a?os mediante elecciones ¡ªcon voto ponderado¡ª dentro de la comunidad universitaria. ¡°Necesita los votos y busca lealtades. Ha habido intentos para cambiarlo, pero si la universidad dice que no, no hay Gobierno que se atreva¡±, a?ade.

El proceso de selecci¨®n del profesorado se descentraliz¨® en 1983. Hasta entonces, se convocaba una oposici¨®n ¨²nica por ¨¢rea de conocimiento a la que concurr¨ªa gente de toda Espa?a. Los que m¨¢s puntos sacaban, eleg¨ªan destino. La decisi¨®n de dejarlo en manos de las universidades favoreci¨® sonadas pol¨¦micas recogidas por revistas como Nature y Science. En 2001, la Ley Org¨¢nica de Universidades (LOU) volvi¨® a recentralizar el proceso, pero la presi¨®n de muchos campus, que boicotearon el sistema, hizo que decayera en 2007.

Mas- Colell: ¡°Se ha demostrado que el talento atrae dinero"

La prestigiosa revista Cronicle of Higher Education recog¨ªa ese a?o el caso de la profesora Victoria L¨®pez Rodas, que pese a tener 25 a?os de experiencia docente en destacadas facultades de Veterinaria, haber publicado 58 art¨ªculos y tener patentes a su nombre, hoy siete, qued¨® fuera de la c¨¢tedra de Gen¨¦tica en cuatro ocasiones. ¡°En los tribunales quien no tiene padrino no se bautiza y yo no ten¨ªa padrinos, simplemente ten¨ªa trabajos¡±, recuerda. ¡°En todo caso, dir¨¦ que todos los que lograron las plazas ten¨ªan m¨¦ritos suficientes. Eso s¨ª, quiz¨¢ yo ten¨ªa m¨¢s. Sent¨ª una doble injusticia porque muchas veces quienes te juzgan tienen menos curr¨ªculum que t¨²¡±.

Dice Victoria L¨®pez Rodas que, afortunadamente, todo ha ido a mejor. Sit¨²a el punto de inflexi¨®n en 2007. Desde entonces, quien acredita es la agencia nacional ANECA, muy cuestionada por los expertos de Wert, y una comisi¨®n de la propia universidad ¡ªformada por los miembros que fijen los estatutos de cada universidad¡ª decide a qui¨¦n otorgar las plazas.

Solo unos datos. Seg¨²n el estudio realizado por Sanz-Men¨¦ndez y su colega del CSIC Laura Cruz en 2006, en el 95% de los casos el docente que gan¨® una plaza ya trabajaba en el centro donde logr¨® un puesto fijo; el 70% no tuvo ning¨²n contrincante. Adem¨¢s, el 69% obtuvo la plaza en la autonom¨ªa donde naci¨®.

¡°El problema no se plantea bien si se habla de endogamia¡±, dice el presidente de los rectores espa?oles, Manuel L¨®pez. ¡°El problema es de falta de movilidad. No existen las condiciones que la favorezcan. Hay que buscar incentivos¡±. Salvador Barber¨¢, catedr¨¢tico de Econom¨ªa de la Universidad Aut¨®noma de Barcelona (UAB), coincide: ¡°La cuesti¨®n se ha agudizado tambi¨¦n con la creaci¨®n de tantas universidades ligadas a cada comunidad aut¨®noma¡±.

La Universidad de M¨¢laga (UMA) ha sido cuestionada en m¨¢s de una ocasi¨®n por endog¨¢mica, la ¨²ltima vez este oto?o tras conocerse que en agosto hab¨ªa convocado cinco plazas a las que se presentaron nueve aspirantes, siete de la propia instituci¨®n. Al concurso para impartir la asignatura de Audiovisual solo se present¨® una candidata, casualmente, la vicedecana de la facultad, que se ha hecho con el puesto. ¡°La convocatoria es p¨²blica como estipula la ley. Si no hay m¨¢s candidatos...¡±, justifica la vicerrectora de Ordenaci¨®n Acad¨¦mica, Mar¨ªa Jos¨¦ Blanca. A la plaza de Fisiolog¨ªa Vegetal se present¨® tambi¨¦n una ¨²nica persona, empleada ya en la Universidad... ¡°Me parecen exageradas las cr¨ªticas sobre endogamia¡±, se?ala. ¡°Para poder concurrir a estas plazas uno tiene que tener la acreditaci¨®n de la ANECA, es decir, que son personas con un perfil adecuado para docencia e investigaci¨®n¡±.

Los expertos recomiendan a Wert que impida que las universidades contraten a un doctor propio salvo que haya estado en el exterior al menos tres a?os. Es un asunto pol¨¦mico. ?Por qu¨¦ no hacerlo si es excelente? ¡°Este sistema de no contratar al personal que est¨¢s formando y que ya est¨¢ en ciertas l¨ªneas de investigaci¨®n consolidadas no me parece adecuado¡±, dice la vicerrectora de la UMA. ¡°E incluso me parece que va contra el principio de igualdad de acceso a la funci¨®n p¨²blica¡±. Jordi Caball¨¦, catedr¨¢tico de Econom¨ªa de la UAB, matiza: ¡°Un jurista podr¨ªa decir que es inconstitucional. Pero en EE UU, por ejemplo, no est¨¢ prohibido por ley pero hay un consenso. ?Qu¨¦ ocurre aqu¨ª? Que muchas veces prefieren el sistema feudal, se encuentran m¨¢s c¨®modos porque les exigen menos. Hay que conseguir que cada vez el sistema de provisi¨®n de fondos de los departamentos est¨¦ condicionado a la productividad. Se dar¨¢n cuenta de que este sistema no lleva a tener investigadores competentes¡±.

La propuesta ya ha empezado a calar. Las facultades de Econ¨®micas de la UAB y las universidades Pompeu Fabra, Carlos III y Alicante adoptaron hace ya a?os esta pol¨ªtica, convencidos de que la forma de caminar hacia una universidad de excelencia es un sistema de reclutamiento de profesores similar al que emplean en pa¨ªses como EE UU: el tenure track. ¡°El momento clave deber¨ªa ser la entrada en la universidad y la aceptaci¨®n social de que siete a?os m¨¢s tarde, si no has rendido cient¨ªficamente, te tienes que ir¡±, dice Barber¨¢. Lo que hacen estas facultades es lanzar a sus doctores a competir en los mercados de economistas del mundo y reclutar doctores de fuera para sus departamentos.

Algunas iniciativas aisladas han tratado en los ¨²ltimos a?os de poner coto al problema de la endogamia. El consejero catal¨¢n de Econom¨ªa y Conocimiento, Andreu Mas-Colell, impuls¨® en 2001, cuando era titular de Universidades, la Instituci¨® Catalana de Recerca i Estudis AvanCats (ICREA) que lo que hace b¨¢sicamente es buscar talento a trav¨¦s de una convocatoria internacional, atraerlo con dinero p¨²blico ¡ªla Generalitat paga sus sueldos individualizados hasta que se jubilan¡ª y empotrarlo en las universidades y centros de investigaci¨®n. ¡°La falta de participaci¨®n externa ha sido una fuente de limitaci¨®n de la competitividad y nos planteamos qu¨¦ se pod¨ªa hacer. Hab¨ªa que inyectar talento en el sistema. Es imposible una universidad de primera si no tiene talento de primera. Adem¨¢s, se ha demostrado cierto que el talento atrae mucho dinero¡±. ICREA, con un presupuesto anual de alrededor de 23 millones de euros, ha contratado a 307 investigadores de muy diversas especialidades. La Generalitat maneja el c¨¢lculo de que por cada mill¨®n de euros gastados en ICREA, los investigadores han reportado tres millones.

Pero ICREA, igual que Ikerbasque, la iniciativa hermana promovida por el Gobierno Vasco en 2007, no deja de ser un parche cuya existencia no tendr¨ªa raz¨®n de ser en un sistema universitario m¨¢s ¨¢gil y flexible. ¡°La universidad ha cambiado y mejorado much¨ªsimo en treinta a?os¡±, dice Mas-Colell. ¡°Pero si la miras en el contexto europeo, nos lastran vicios hist¨®ricos y una estructura funcionarial. Las reformas solo necesitan un poco de voluntad pol¨ªtica. No hace falta una revoluci¨®n dr¨¢stica que lo revuelva todo, basta con cambios, sobre todo en la gobernanza, que hagan que las universidades pasen de ser instituciones muy r¨ªgidas a instituciones ¨¢giles. Solo eso ayudar¨ªa mucho¡±.

El Ministerio de Educaci¨®n no sabe, no contesta.