?Y ahora qu¨¦ hacemos con este pabell¨®n de 60 millones?
Navarra tiene casi terminado desde hace 20 meses un moderno recinto multiusos para acontecimientos deportivos y culturales pero no lo inaugura porque no lo ve viable
Cada ma?ana personal del Gobierno de Navarra acude de forma rutinaria al pabell¨®n Reyno de Navarra Arena de Pamplona como el que va a su vieja casa familiar ya deshabitada para comprobar que todo sigue en orden y que nada ha dejado de funcionar por la falta de uso. Encienden y apagan todas las luces, recorren los enormes pasillos y pasan un rato en alguna de sus salas. A la espera de deportistas, ellos y los vigilantes de seguridad son los ¨²nicos ocupantes de un imponente recinto multiusos que aguarda a oscuras desde hace casi dos a?os su inauguraci¨®n. Despu¨¦s de 58 millones gastados, la Administraci¨®n foral no sabe qu¨¦ hacer con ¨¦l.
El proyecto, v¨ªctima ahora de la crisis, se aprob¨® en 2008 como una respuesta a las primeras dificultades econ¨®micas. ¡°El viejo y anhelado deseo¡±, como lo defini¨® la actual presidenta navarra de UPN Yolanda Barcina, entonces alcaldesa de Pamplona, se incluy¨® en un potente plan de obra p¨²blica de 4.500 millones para la Comunidad, siguiendo el modelo nacional del Plan E de Zapatero. Ning¨²n grupo pol¨ªtico se opuso a ¨¦l en el Parlamento (solo la formaci¨®n nacionalista NaBai e IU se abstuvieron) y aquella fue la ocasi¨®n para desempolvar la idea de un gran pabell¨®n, aunque corregido y aumentado.
Un a?o antes el Ejecutivo foral hab¨ªa anunciado un recinto para unas 6.500 personas dirigido, principalmente, al San Antonio, que se hab¨ªa colado en la elite europea del balonmano bajo el patrocinio de cementos Portland en los a?os locos de la construcci¨®n. Pero a la Administraci¨®n esa nueva infraestructura no le pareci¨® suficiente y pocos meses despu¨¦s dobl¨® su apuesta con m¨¢s aforo (hasta 12.000), una pista auxiliar con front¨®n incorporado y palcos vips, con la intenci¨®n de acoger tambi¨¦n espect¨¢culos culturales. "En todos los pabellones que visitamos en Espa?a y en Europa para coger ideas nos recomendaron que no nos qued¨¢ramos cortos, que esto era para 50 a?os", explica Nacho Arbeloa, m¨¢ximo responsable de infraestructuras deportivas de Navarra. En total, 60 millones de presupuesto, de los que se han gastado 54 en levantar el edificio m¨¢s cuatro en urbanizar la zona.
"Visitamos otros pabellones y nos recomendaron que no nos qued¨¢ramos cortos", aseguran desde el Gobierno de Navarra
Sin embargo, el San Antonio desapareci¨® por el camino. Pinch¨® la burbuja inmobiliaria, se qued¨® sin sponsor y muri¨® en 2013 ahogado por las deudas, con la obra casi terminada. Su declive transcurri¨® en paralelo a la construcci¨®n del Reyno de Navarra Arena. El resto de clubes de la ciudad, lejos de la elite, no atraen a sus encuentros a m¨¢s de 2.000 personas de media y los eventos culturales, el otro eje, tampoco ofrecen de momento garant¨ªas suficientes para impulsar su apertura.
¡°Queda por ejecutar el 10%, aunque hay partes a las que hemos renunciado. Creo que con 1,5 millones m¨¢s lo podr¨ªamos abrir¡±, detalla Arbeloa. Pero no se abre y no hay se?ales de que eso vaya a ocurrir a corto plazo, sobre todo con las elecciones auton¨®micas de primavera en el horizonte. En septiembre de 2009 se puso la primera piedra y en mayo de 2013, con dos a?os de retraso, la obra qued¨® acabada al 90%. Desde entonces el recinto aguarda cerrado y vallado el ¨²ltimo empuj¨®n. La vigilancia y mantenimiento cuestan 250.000 euros anuales.
El plan de gesti¨®n, entregado en 2009, ha quedado "obsoleto" y "arrollado" por las circunstancias econ¨®micas, reconoce IDOM, la empresa que lo realiz¨®. ?Cuando pase la crisis volver¨ªa a ser viable? "No lo s¨¦, habr¨ªa que repetir el estudio. Hoy, por ejemplo, ya no existe el San Antonio, y las demandas y costumbres de la gente tambi¨¦n han podido cambiar", responde ?ngel V¨¢zquez, responsable de todo el proyecto de asesor¨ªa.
¡°Es una patata caliente y hay que tener valent¨ªa para abrirlo. Desde el punto de vista de la cuenta de explotaci¨®n, no creo que sea viable, y si vamos a los gastos de amortizaci¨®n, mucho menos, pero una infraestructura p¨²blica tambi¨¦n genera empleos indirectos en la hosteler¨ªa y en otros sectores¡±, apunta Roberto Jim¨¦nez, parlamentario del PSN, grupo que dio su voto favorable al edificio. ¡°Si pudi¨¦ramos volver a 2008, nadie tomar¨ªa esa decisi¨®n, pens¨¢bamos que la crisis tendr¨ªa un recorrido menor¡±.
El plan de gesti¨®n ha quedado "obsoleto" y "arrollado" por la crisis, reconoce la empresa que realiz¨® el estudio
Lo que s¨ª parece claro es que el Ejecutivo ha descartado la gesti¨®n p¨²blica, que era la idea original, y explora ahora la opci¨®n p¨²blico-privada. ¡°Hemos hablado con empresas y les parece un recinto interesante, pero tendr¨ªan que ver las condiciones exactas del concurso que saquemos¡±, cuenta Nacho Arbeloa. Un concurso que de momento no tiene fecha. ?Era esta la m¨¢xima prioridad en infraestructuras deportivas en Navarra para gastarse 60 millones? "Bueno... [sonr¨ªe] Nuestro mapa de instalaciones es muy completo, aunque empieza a tener carencias de mantenimiento", responde sin querer entrar en m¨¢s detalles. EL PA?S se ha puesto en contacto con el consejero de Pol¨ªticas Sociales, ??igo Alli, encargado de encontrar una salida para el pabell¨®n, pero ha rechazado hacer declaraciones.
Situado junto al estadio de Osasuna, su fachada blanca compuesta por 933 cubos que se iluminan destaca sobre el resto en una zona con poca vida en las calles m¨¢s all¨¢ de los domingos de f¨²tbol. Dentro, una pista central para 10.000 personas y otra auxiliar para 3.000 m¨¢s un avanzado sistema de gradas, hoy cubiertas con pl¨¢sticos negros, que se extienden, se repliegan, se giran y hasta se esconden bajo el suelo dan la opci¨®n de celebrar casi cualquier deporte bajo techo. [ver v¨ªdeo de abajo]
Ahora, los principales clubes de la ciudad disputan sus partidos en el Anaitasuna, un vetusto pabell¨®n con unos 3.500 asientos que encaja en sus necesidades reales. Su propietario, el balonmano Anaitasuna, de la liga Asobal, descarta en cualquier caso irse de casa. "Nuestros socios no lo entender¨ªan. Adem¨¢s, siempre nos pareci¨® excesivo el Navarra Arena. Ni en el mejor momento del San Antonio hubo una demanda tan grande de aforo", asegura ?ngel Azcona, su gerente.
El Planasa de baloncesto y el Xota de f¨²tbol sala s¨ª dan por hecho su traslado cuando llegue el momento. ¡°La mayor¨ªa de clubes recibimos subvenci¨®n y entendemos que el Gobierno nos invitar¨¢ a jugar all¨ª¡±, opina Javier Sobrino, presidente del Planasa. El gerente del Xota, Carmelo Villamar¨ªn, se lamenta, sin embargo, de la "p¨¦rdida de ambiente" que sufrir¨¢n con la mudanza a una infraestructura que triplica a la actual.
En la pista auxiliar se construy¨® el front¨®n, que acoger¨ªa al a?o solo una de las tres grandes finales de la pelota vasca
En conciertos, la capacidad alcanza los 12.000 espectadores. "Es un edificio con buena ac¨²stica y bien preparado, pero deber¨¢ competir con Bilbao, San Sebasti¨¢n o Zaragoza. A los promotores nos surgen posibilidades y luego todo depende de qu¨¦ lugar nos ofrezca mejores condiciones y de las ayudas p¨²blicas", comenta Jokin Zamarbide, responsable de IN & OUT, la principal empresa organizadora de conciertos con base en Pamplona. La crisis, a?ade, ha dejado al sector en horas bajas y deja una cr¨ªtica sobre el pabell¨®n: "Antes hubiera cubierto la plaza de toros, donde cabe m¨¢s gente y solo se usa en Sanferm¨ªn".
Un buen ejemplo de esta obra hecha a lo grande es su front¨®n, ubicado en uno de los fondos. Solo est¨¢ previsto que se use un d¨ªa al a?o, en alguna de las tres finales importantes de la pelota vasca (Manomanista, por parejas y Cuatro y Medio) aprovechando su capacidad para 3.000 personas. Las dos empresas organizadoras de partidos, Aspe y Asegarce, se muestran encantadas, pero aclaran que "en ning¨²n caso sustituir¨ªa en los partidos de cada fin de semana al Labrit", una de las catedrales de este deporte y situado en el centro de Pamplona. Un front¨®n para una tarde y un pabell¨®n, de momento, para nadie.
Infraestructuras fracasadas
El pabell¨®n Reyno de Navarra Arena corre el peligro de seguir el ejemplo de otras infraestructuras hechas con dinero p¨²blico que han resultado un fiasco. Estos son algunos ejemplos.
Aeropuerto de Castell¨®n. Es el caso m¨¢s simb¨®lico de la Comunidad valenciana. El pasado enero, cuatro a?os despu¨¦s de su inauguraci¨®n, despeg¨® el primer avi¨®n del aer¨®dromo, en el que la Generalitat invirti¨® m¨¢s de 150 millones. Una empresa canadiense lo explotar¨¢ las dos pr¨®ximas d¨¦cadas, aunque el Gobierno aut¨®nomo tendr¨¢ que desembolsar para ello 25 millones los siguientes nueve a?os.
Pista de esqu¨ª seco en Valladolid. La Diputaci¨®n invirti¨® 12 millones en una pista de esqu¨ª seco en un pueblo de apenas 100 habitantes que qued¨® paralizada por orden del Tribunal Constitucional. Los ecologistas hab¨ªan denunciado que se estaba obrando sobre una zona quemada.
Ciudad de la Luz de Alicante. La Generalitat sac¨® la semana pasada a subasta estos estudios de cine obligada por la Comisi¨®n Europea. Bruselas consider¨® en 2012 que los 274 millones invertidos supon¨ªan una alteraci¨®n de la competencia en el sector. El Consell no conf¨ªa en recuperar el dinero gastado.
Aeropuerto de Ciudad Real. Detr¨¢s de esta infraestructura privada tambi¨¦n hubo mucho dinero p¨²blico. La Caja de Ahorros de Castilla La Mancha, intervenida, ten¨ªa el 35% de las acciones y prest¨® dinero a accionistas por valor de otro 25%. Cost¨® m¨¢s de 1.000 millones y entr¨® en concurso de acreedores en 2010 por una deuda de m¨¢s de 300. Ahora la justicia estudia una oferta de 80 millones.
Parque de la Historia y el Mar de San Fernando. El acuario de la localidad gaditana, terminado en 2007, nunca ha llegado a abrir, as¨ª que el Ayuntamiento busca nuevos usos para el edificio, que cost¨® 10 millones. Su mantenimiento supone un gasto de 150.000 euros al a?o.
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