El PP recupera el primer puesto a costa del descenso de Ciudadanos

Los dos partidos tradicionales se consolidan junto a los dos emergentes, Podemos y Ciudadanos, como las fuerzas pol¨ªticas de mayor entidad en Espa?a. La novedad est¨¢ en que, tras las elecciones locales y auton¨®micas del pasado 24 de mayo, el orden en la preeminencia se ha trastocado. El PP sube al primer puesto y desplaza a Podemos a la tercera posici¨®n, en tanto que el PSOE se coloca el segundo, en empate t¨¦cnico, seg¨²n el informe de Metroscopia de junio. Ciudadanos se descuelga de los anteriores al descender m¨¢s de seis puntos en dos meses. De su descenso se beneficia el PP, sobre todo, y algo el PSOE.

La l¨ªnea que naci¨® el mes de marzo de la que pend¨ªan cuatro fuerzas pol¨ªticas con id¨¦nticas posibilidades de ganar las elecciones generales se ha quebrado, probablemente a resultas de las elecciones municipales y auton¨®micas del pasado 24 de mayo. Entre los d¨ªas 28 de mayo y 2 de junio, la encuesta de Metroscopia constata que hoy ser¨ªan tres los partidos casi en empate t¨¦cnico: PP, PSOE y Podemos. Ciudadanos ha quedado descolgado al descender 6,5 puntos en intenci¨®n de voto para quedarse en un 13%; muy alejado del primero, el PP, que obtendr¨ªa, si hoy se celebraran las elecciones, el 24,5% de los apoyos, con una subida de casi cuatro puntos desde abril.

Si el PP tiene razones para estar satisfecho no menos lo debe estar el PSOE al situarse a punto y medio de los populares, mientras que Podemos baja seis d¨¦cimas. Este baile en la ordenaci¨®n de los cuatro partidos se alimenta de las actitudes percibidas por los ciudadanos durante la campa?a electoral y tambi¨¦n de la incierta configuraci¨®n de los Gobiernos municipales y auton¨®micos. Al PP, que ha perdido dos millones y medio de votos en las elecciones municipales, los ciudadanos le dar¨ªan una mayor¨ªa minoritaria aupado por el electorado que pierde Ciudadanos, sobre todo, en las grandes ciudades, que es, de momento, el sitio natural de apoyo del partido que lidera Albert Rivera.

La suma de apoyos que le viene al PP de Ciudadanos, m¨¢s la incondicionalidad de su voto tradicional, sobre todo en personas de m¨¢s de 65 a?os, configura el avance de los populares. Esta situaci¨®n ante las elecciones generales convive con la crisis que se fragua en este partido ante la certeza de que, en unos d¨ªas, perder¨¢ el grueso de su poder territorial.

Si el ¨¢nimo en las filas del PSOE se midiera por el resultado electoral del 24-M, deber¨ªa haber consternaci¨®n en el PSOE por la p¨¦rdida de 700.000 votos. No es as¨ª, por la paradoja de que estas elecciones propiciar¨¢n que recupere parte del poder auton¨®mico y municipal que perdi¨® en 1995 a favor del PP. Pero ahora el objetivo son las elecciones generales y los socialistas, y seg¨²n el estudio de Metroscopia est¨¢n en condiciones de disputar al PP la victoria electoral, en parte por un voto de nuevo cu?o. Por un lado, exvotantes del PP votar¨ªan al PSOE, despu¨¦s de descartar la opci¨®n de Ciudadanos y la abstenci¨®n.

¡°La estabilidad interna que el partido parece estar logrando en torno al liderazgo de Pedro S¨¢nchez puede estar contribuyendo de forma decisiva a esta gradual recuperaci¨®n¡±, se?ala Jos¨¦ Juan Toharia, presidente de Metroscopia. El PSOE ocupa ¡°la centralidad del espacio ideol¨®gico¡±, seg¨²n el autoposicionamiento que declaran sus votantes, explica el catedr¨¢tico de Sociolog¨ªa; este ser¨ªa otro de los objetivos perseguidos por el PSOE. A¨²n as¨ª, el estudio indica que la fidelidad de voto hacia el PSOE es muy d¨¦bil comparada con la del PP.

De la debilidad de las fidelidades empieza a ser consciente Ciudadanos, pero tambi¨¦n Podemos. El partido de Pablo Iglesias cae sin brusquedad pero lo suficiente como para pasar de primera a tercera fuerza; m¨¢s acorde con sus resultados de las elecciones auton¨®micas.