Trillo acusa de mentir al exdirector del CNI: ?qui¨¦n dice la verdad?

El exministro de Defensa y actual embajador del Reino de Espa?a en Londres, Fedrico Trillo, ha remitido una carta a EL PA?S en la que acusa de mentir al exdirector del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) Jorge Dezcallar sobre el 11-M o la identificaci¨®n de los cad¨¢veres de los siete agentes del servicio secreto asesinados en Irak. ¡°En lo relativo a los agentes [del CNI] asesinados en Irak [en noviembre de 2003], lo narrado por el Sr [Jorge] Dezcallar [director del centro en aquella ¨¦poca] es falso de principio a fin¡±, sostiene Trillo, ya que ¡°en ning¨²n caso se plante¨® ning¨²n problema [de identificaci¨®n de los cad¨¢veres] semejante al del Yak-42, puesto que los cuerpos de los agentes asesinados en Irak eran claramente identificables¡±.

Asegura, adem¨¢s, que no recibi¨® ¡°en ning¨²n momento durante la crisis del 11-M ninguna otra versi¨®n del Sr Dezcallar ni de viva voz ni por escrito que lo que aparece en los informes escritos que se desclasificaron luego por el Consejo de Ministros¡±, en los que se apuntaba a la autor¨ªa de ETA. Y expresa, finalmente, su sorpresa de que Dezcallar revele ahora que present¨® su dimisi¨®n tras la desclasificaci¨®n parcial y selectiva de informes del CNI sobre los atentados de Madrid "porque, como ministro de Defensa, tendr¨ªa que hab¨¦rmelo comunicado y el director del servicio secreto sigui¨® en el cargo hasta que fue relevado por Zapatero".

Consultado por EL PA?S, Dezcallar no ha querido entrar en pol¨¦mica con Trillo, pero ha recordado que, como director del CNI, depend¨ªa funcionalmente de Aznar (que fue quien le propuso para el cargo y presidi¨® su toma de posesi¨®n) y solo a efectos org¨¢nicos (es decir, administrativos), del ministro de Defensa, por lo que fue al presidente del Gobierno a quien le present¨® su dimisi¨®n, que finalmente retir¨®.

En cuanto a la autor¨ªa del 11-M, las autoridades con las que Dezcallar despach¨® este asunto -y a las que traslad¨® sus sospechas sobre la autor¨ªa yihadista- fueron, como era l¨®gico, adem¨¢s del propio Aznar, el ministro del Interior, ?ngel Acebes, y el secretario de Estado de Seguridad, Ignacio Astarloa, pero no el ministro de Defensa.

Respecto a la identificaci¨®n de los agentes asesinados en Irak, el exdirector del CNI se remite a su autobiograf¨ªa Vali¨® la pena (Pen¨ªnsula), y recuerda que los m¨¦dicos del hospital G¨®mez Ulla fueron testigos de la tensa discusi¨®n que mantuvo con Trillo, quien alegaba que ten¨ªa ¨®rdenes de Aznar para que el funeral se celebrara al d¨ªa siguiente, aunque los cuerpos a¨²n no estaban plenamente identificados. Dezcallar se plant¨® y el funeral se celebr¨® cuatro d¨ªas despu¨¦s de las muertes de los agentes. En el caso del Yak-42 solo pasaron 48 horas desde el accidente a¨¦reo hasta el funeral.

En la versi¨®n de Trillo hay dos aspectos que resultan sorprendentes. El primero es que reconozca, impl¨ªcitamente, que existi¨® un problema de identificaci¨®n con los cad¨¢veres del Yak-42. En su momento, el entonces ministro de Defensa asegur¨® que los cuerpos de los 62 militares muertos en el accidente a¨¦reo eran reconocibles y que por eso no fue necesario hacer pruebas de ADN. El segundo es que sostenga que los cad¨¢veres de los agentes del CNI asesinados en Irak eran "claramente identificables". La cadena de televisi¨®n Sky News difundi¨® unas im¨¢genes, rodadas poco despu¨¦s del ataque, en las que se ve¨ªa como una turba pisoteaba los cuerpos de los agentes secretos espa?oles, que hab¨ªan sido tiroteados y quemados. En ese caso, s¨ª que se hicieron pruebas de ADN. Treinta de los 62 cad¨¢veres de las v¨ªctimas del Yak-42 fueron entregados a sus familias con identidad falsa. Pero eso no se sab¨ªa a¨²n entonces.