La descontaminaci¨®n radioactiva de Palomares costar¨¢ 640 millones

El secretario de Estado de EE UU, John Kerry, y su hom¨®logo espa?ol, Jos¨¦ Manuel Garc¨ªa-Margallo, firmaron ayer en Madrid la declaraci¨®n de intenciones para limpiar Palomares (Almer¨ªa) de la radiactividad dejada por el accidente nuclear de hace casi medio siglo. Esa firma es el primer paso de un proceso que ser¨¢ largo y costoso: trasladar a EE UU hasta 50.000 metros c¨²bicos de tierra contaminada costar¨¢ unos 640 millones de euros y exigir¨¢ un tratado internacional que deber¨¢n ratificar las Cortes salidas de las elecciones del 20-D.

Seg¨²n fuentes conocedoras de la negociaci¨®n que han mantenido en los ¨²ltimos meses representantes de ambos gobiernos, la mayor parte del coste, unos 500 millones, corresponder¨¢ al almacenamiento en EE UU de las tierras contaminadas, mientras que el tratamiento de los residuos, su compactaci¨®n, empaquetamiento y transporte llevar¨¢ otros 140 millones.

Para darse una idea de la complejidad de la operaci¨®n, baste decir que est¨¢ previsto construir una carretera especial para trasladar en camiones entre 40.000 y 50.000 metros c¨²bicos de tierra contaminada desde la pedan¨ªa almeriense al puerto de Cartagena, a unos 100 kil¨®metros, para su embarque. Y habr¨¢ que suscribir seguros de responsabilidad civil frente a posibles percances durante el traslado.

El dep¨®sito de los residuos en Nevada costar¨¢ 500 millones y su saneamiento y traslado otros 140

Las dos partes admiten que la operaci¨®n se financiar¨¢ conjuntamente, aunque no se ha determinado qu¨¦ carga asumir¨¢ cada una. Lo l¨®gico, seg¨²n las fuentes consultadas, es que el almacenamiento corra por cuenta de EE UU, ya que es el responsable exclusivo de la contaminaci¨®n, mientras que la preparaci¨®n y traslado de los residuos la asumir¨ªan entre ambas.

Aunque en la declaraci¨®n firmada ayer no se especifica el destino de las tierras contaminadas y solo se dice que se depositar¨¢n ¡°en un emplazamiento adecuado de Estados Unidos¡±, un informe de enero pasado del Departamento de Energ¨ªa de dicho pa¨ªs apuntaba al Sitio de Seguridad Nacional de Nevada, en una zona des¨¦rtica a 100 kil¨®metros al noroeste de Las Vegas.

La ejecuci¨®n del acuerdo podr¨ªa a prolongarse entre 12 y 24 meses, dependiendo de la complejidad de los trabajos previos y de si el traslado hasta un puerto estadounidense del Pac¨ªfico se hace en uno o varios fletes.

Antes, sin embargo, habr¨¢ que cerrar un ¡°acuerdo vinculante¡±, previsto en la declaraci¨®n de ayer, cuya negociaci¨®n se iniciar¨¢ de inmediato. Margallo asegur¨® que su contenido est¨¢ ya ¡°muy avanzado¡±, pero no quiso revelar ning¨²n detalle.

Las fuentes consultas indicaron que, seg¨²n la legislaci¨®n espa?ola, este acuerdo tendr¨¢ rango de tratado internacional y deber¨¢ ser ratificado por las Cortes salidas de las elecciones del pr¨®ximo 20 de diciembre, lo que retrasar¨¢ unos meses su entrada en vigor.

Los dos responsables ministros subrayaron que el acuerdo refleja la excelente relaci¨®n bilateral. Kerry a?adi¨® que su pa¨ªs ¡°asumir¨¢ su responsabilidad¡±, mientras que Margallo indic¨® que se trata de ¡°reparar el error que se cometi¨® hace 50 a?os¡± y ¡°hacerlo ya¡± para que, ¡°cuanto antes, Palomares vuelva a la normalidad que ten¨ªa antes de 1966¡±.

El 17 de enero de aquel a?o, un bombardero B-52 y un avi¨®n KC-130 colisionaron durante una operaci¨®n de repostaje en vuelo, cayendo cuatro bombas termonucleares. Dos fueron recuperadas intactas, pero otras dos liberaron su carga radioactiva. El Ej¨¦rcito estadounidense se llev¨® 5.000 bidones de tierra contaminada y durante a?os el asunto qued¨® olvidado, pero a finales de los noventa el Centro de Investigaciones Energ¨¦ticas, Mediambientales y Tecnol¨®gicas (Ciemat) alert¨® de la presencia en la zona de niveles anormalmente altos de americio (producto de la descomposici¨®n de plutonio).

El acuerdo tendr¨¢ rango de tratado y deber¨¢n aprobarlo las Cortes salidas de las elecciones del 20-D

Seg¨²n el texto firmado ayer, el nivel de americio en tres zonas que suman casi 20 hect¨¢reas deber¨¢ reducirse a un becquerelio por gramo tras la limpieza; mientras que en otra zona, que abarca 21,2 hect¨¢reas, se rebajar¨ªa a cuatro. La diferencia estriba en que las primeras eran ¨¢reas de uso agr¨ªcola y ganadero hasta 1966 ¡ªy podr¨ªan ser recalificadas como edificables¡ª, mientras que la ¨²ltima era una zona de monte sin explotar cuando se produjo el siniestro.

El saneamiento deber¨¢ ser muy profundo, ya que los niveles de americio oscilan actualmente entre 5 y 25 becquerelios por gramo de suelo.