Marina pide condicionar el sueldo de los docentes a la evaluaci¨®n del centro

El fil¨®sofo y pedagogo Jos¨¦ Antonio Marina, al que el ministro de Educaci¨®n, ??igo M¨¦ndez de Vigo, ha encargado el Libro blanco de la funci¨®n docente, considera que una parte de la retribuci¨®n del profesorado "podr¨ªa estar relacionada con la evaluaci¨®n del centro entero, de manera que se fomente la implicaci¨®n de todos los profesores en un proyecto educativo". "Ha de evaluarse a los alumnos, pero tambi¨¦n a los profesores y a los centros", defiende Marina.

"Los buenos profesores no pueden cobrar lo mismo que los malos", indica este experto en su reciente libro Despertad al diplodocus. Una conspiraci¨®n educativa para transformar la escuela.. Y todo lo dem¨¢s. Marina reclama la formaci¨®n del docente (y de toda la sociedad) a lo largo de la vida. "Nos parecer¨ªa criminal que los m¨¦dicos no actualizaran sus conocimientos, pero somos m¨¢s condescendientes con los docentes que no lo hacen", escribe en el libro, en el que propone distintas medidas para mejorar el sistema educativo espa?ol en un plazo de cinco a?os. "Hay que evaluar tambi¨¦n al profesorado (vi¨¦ndole actuar dentro del aula), a los directores, a los inspectores, y tambi¨¦n a los responsables de la administraci¨®n que deben comprometerse con objetivos educativos o dimitir", apunta el autor.

Los profesores espa?oles son los docentes que pasan menos controles externos, junto con los italianos, seg¨²n un informe de la OCDE sobre la funci¨®n docente, el informe Talis publicado en 2014. Un 36% nunca ha sido sometido a una evaluaci¨®n docente formal y externa de su labor.

Los inspectores "no son polic¨ªas"

Marina reclama cambiar la selecci¨®n y formaci¨®n de los inspectores, para que sean un cuerpo de "¨¦lite", compuesto por profesionales con gran experiencia. Su papel "no es fiscalizar" porque "no son polic¨ªas educativos". A su juicio, la tarea de estos profesionales tiene que ir encaminada a "ayudar a los profesores espa?oles a mejorar sus competencias".

Este pedagogo indica que le corresponde tambi¨¦n al Gobierno fijar el curr¨ªculo, con la ayuda "imprescindible" de expertos, y advierte de que los curr¨ªculos espa?oles, en general, han sido siempre demasiado extensos.

Como ejemplo, Finlandia. Seg¨²n Marina, el pa¨ªs n¨®rdico, tras sufrir una crisis educativa hace cuarenta a?os, cre¨® un curr¨ªculo muy variado que incluye artes, ciencias, humanidades, idiomas, matem¨¢ticas y educaci¨®n f¨ªsica; dio mucha libertad a las escuelas y distritos para hacerlo; prioriz¨® los estudios profesionales y pr¨¢cticos; valor¨® la creatividad; anim¨® a profesores y directores a colaborar; y abri¨® las escuelas a la comunidad y a las familias de los alumnos.

Los ministros deben saber de educaci¨®n

Asimismo, se?ala que el Ejecutivo tiene que fijar los criterios de evaluaci¨®n, aunque reconoce que ¨¦ste es el tema "m¨¢s complejo y dif¨ªcil", pues el sistema educativo espa?ol "carece de una cultura de la evaluaci¨®n" y cuando ha querido implantarla, la ha "confundido" con el aumento de ex¨¢menes.

Para el autor del libro, todos los ministros deber¨ªan tener nociones b¨¢sicas acerca de la educaci¨®n y del papel que ¨¦sta va a jugar en el futuro, independientemente de la cartera que ostenten. "Enviar¨¦ este libro a los ministros del gobierno que salga despu¨¦s de las elecciones", asegura. El actual titular de la cartera, M¨¦ndez de Vigo, admiti¨® en una entrevista con este diario que no sab¨ªa lo suficiente de educaci¨®n. "Estudio por las noches. Tengo un equipo de colaboradores que se lo saben bien", se?al¨® el ministro.

Marina tambi¨¦n hace menci¨®n en este libro al 'pacto de Estado por la educaci¨®n' y advierte de que "seguir¨¢ siendo meramente pol¨ªtico" y no tendr¨¢ "repercusiones reales" si se ci?e a los partidos pol¨ªticos y no tiene en cuenta a los grupos sociales "cada vez m¨¢s amplios". A su entender, el acuerdo deber¨ªa contemplar presupuesto, objetivos, marco b¨¢sico de organizaci¨®n escolar, tratamiento del profesorado y acuerdo b¨¢sico sobre el curr¨ªculo.