Las aventuras de Don Pedro

El Partido Popular ha abierto expediente al diputado Pedro G¨®mez de la Serna y al ex diputado y embajador en la India, Gustavo Aristegui, por el cobro de comisiones millonarias. El Ministerio de Hacienda ha abierto a su vez otro a Aristegui.

Los hechos se acercan a la categor¨ªa de lo que en las campa?as presidenciales de Estados Unidos se llaman october surprise. La sorpresa de octubre. Esc¨¢ndalos que saltan a los medios de comunicaci¨®n durante el mes de octubre muy cerca de las elecciones presidenciales de primeros de noviembre, cada cuatro a?os.

Pedro G¨®mez de la Serna, abogado de profesi¨®n, es diputado a Cortes por Segovia y portavoz de la Comisi¨®n Constitucional del Congreso de los Diputados en la X Legislatura, iniciada con la constituci¨®n del Parlamento el 13 de diciembre de 2011.

Su actividad en los gobiernos del Partido Popular de Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar ha sido intensa. Ha trabajado con el ministro del Interior, Jaime Mayor Oreja, en el puesto de director de gabinete. Y m¨¢s tarde, cuando Mariano Rajoy es designado ministro del Interior, G¨®mez de la Serna pasa al puesto de presidente ejecutivo de la Sociedad Estatal de Infraestructuras y Equipamientos Penitenciarios. Termina la fase de su actividad gubernamental como director de gabinete de la vicepresidencia segunda que ejerce Javier Arenas hasta abril de 2004 y se convierte en su asesor en las elecciones auton¨®micas de Andaluc¨ªa del 2008.

Cuando en julio de 2009 el abogado y ex diputado Jorge Tr¨ªas Sagnier empieza a mantener reuniones personales con el juez Antonio Pedreira, informa a Mariano Rajoy en su despacho de la planta s¨¦ptima de G¨¦nova 13, en Madrid. Tr¨ªas se interesa por la marcha del caso G¨¹rtel que instruye Pedreira, juez de la sala civil y penal del Tribunal Superior de Justicia de Madrid. Pedreira, acosado por la estrategia de ataque de Federico Trillo, que asesora la defensa de los cargos del PP, ve en Tr¨ªas una presunta v¨ªa para apaciguar o bajar la intensidad de la ofensiva entonces vigente. "No es una trama del PP sino una trama contra el PP", en palabras de Mariano Rajoy el 11 de febrero de 2011.

Tr¨ªas y G¨®mez de la Serna ten¨ªan, desde antes, contactos de car¨¢cter profesional. Pero cuando el PP se toma m¨¢s en serio la alternativa que parece suponer para Pedreira la gesti¨®n de Tr¨ªas -la zanahoria frente al palo de Trillo-, Javier Arenas decide controlar la relaci¨®n con el juez.

El 20 de octubre de 2009, Arenas, procedente de Sevilla, cita a Tr¨ªas y a G¨®mez de la Serna en su despacho del Senado. Analizan la situaci¨®n. Y Arenas sugiere que en adelante, G¨®mez de la Serna acuda a todas las reuniones que tendr¨¢ Tr¨ªas con el juez Pedreira. Arenas designa, pues, a un propio. Quiere informaci¨®n directa.

Durante m¨¢s de un a?o tienen lugar encuentros, comidas y contactos con Pedreira.

Pedro G¨®mez de la Serna recibe en su despacho de la calle Fernando el Santo de Madrid informaci¨®n directa de la instrucci¨®n sumarial. Un ayudante de Pedreira, contratado sin concurso por la Comunidad de Madrid, se la traslada. Rafael N¨²?ez Gallego, abogado y manitas con la inform¨¢tica, aporta datos. El PP tiene cumplidas referencias, fidedignas, de lo que hace o deja de hacer Pedreira.

El juez termina por exculpar primero a Rosal¨ªa Iglesias por los presuntos delitos fiscales. Y el 29 de julio de 2011 finalmente dicta el auto en el que archiva los delitos por los que se acusa al extesorero Luis B¨¢rcenas. Mantiene la resoluci¨®n en secreto. Y la hace p¨²blica el 1 de septiembre de 2011. Trillo exhibe la decisi¨®n como la prueba de que todo el caso es un montaje de Alfredo P¨¦rez Rubalcaba y pide la cabeza de las entonces fiscales del caso, Concha Sabadell y Miriam Segura. Unos d¨ªas m¨¢s tarde, el juez Pedreira, en la boda de su hijo, se desvanece y entra en coma, del cual nunca se va recobrar. Fallece en agosto pasado despu¨¦s de permanecer treinta y seis meses hospitalizado.

La sala de lo Penal, secci¨®n cuarta, de la Audiencia Nacional revoca el auto de Pedreira. Porque, sencillamente, no pod¨ªa dictarlo. El TSJ y ¨¦l mismo hab¨ªan declinado la competencia. La juez Teresa Palacios, ponente, es piadosa. Y viene a decir que el juez Pedreira quiz¨¢ no se dio cuenta de que ya no pod¨ªa dictar resoluciones.

Toda esta historia no forma parte de ninguna october surprise. He investigado estos hechos. Los he publicado en dos libros: primero en mayo de 2013 (El caso B¨¢rcenas) y ahora, a mediados de septiembre de 2015 (Quer¨ªamos tanto a Luis).