?Me financias mi beb¨¦?
El precio de los tratamientos privados de fertilidad lleva a algunos afectados a organizar campa?as de 'crowdfunding' para pedir dinero por las redes sociales
Luisa De Vilches, 39 a?os, y su marido, Francisco Mart¨ªnez, de 43, necesitaban someterse a un sexto tratamiento de fertilidad, pero ya no ten¨ªan dinero para financiarlo. ¡°En el ¨²ltimo tratamiento nos gastamos 13.000 euros. Entre las pruebas, los viajes en tren, pues somos de Ja¨¦n y nuestra cl¨ªnica estaba en Madrid, la medicaci¨®n...¡±, empieza De Vilches. ¡°Tuvimos que pedir dinero prestado al banco. Pero cuando est¨¢s en la b¨²squeda de tu hijo, lo que quieres es lo que quieres. As¨ª que escrib¨ª un textito contando nuestra historia y dos de las mujeres en mi misma situaci¨®n que hab¨ªa conocido a trav¨¦s de Twitter compartieron mi caso en sus blogs. La verdad es que se lo agradec¨ª much¨ªsimo. En un mes nos hab¨ªa ayudado bastante gente y ten¨ªamos m¨¢s de mil euros en la cuenta¡±.
Es habitual que las parejas que se someten a tratamiento de fertilidad pidan o reciban ayuda a familiares, pero no lo es tanto que se animen a pedir dinero a desconocidos. Sin embargo, la angustia y el ahogo econ¨®mico lleva a algunos a hacerlo. ¡°Nadie dijo que el camino de la reproducci¨®n asistida fuera f¨¢cil, pero si me conoces aunque solo sea un poco sabr¨¢s que a cabezoner¨ªa no me gana nadie¡±, empieza el texto de De Vilches. ¡°No dejaremos de luchar hasta conseguir a nuestro bebe. Ahora he de comenzar de cero, pero debemos reunir una importante suma de dinero y el tiempo corre en nuestra contra. Por eso me atrevo a pediros que me ayud¨¦is econ¨®micamente, por peque?a que sea la aportaci¨®n, estar¨¦is haciendo m¨¢s corto este camino. Con un solo euro, estar¨ªais haciendo mucho por nosotros. Ay¨²danos a conseguir nuestro sue?o¡±.
Muchas parejas acuden primero al sistema p¨²blico, para lo cual hay que tener menos de 40 a?os. El tiempo de espera ronda el a?o y medio y tienen un m¨¢ximo de dos intentos. Despu¨¦s, la seguridad social deja de hacerse cargo de ellos. Por lo privado el precio medio de cada in vitro es muy elevado (unos 5.000 euros) y cuando ha habido m¨¢s de un fracaso, no es raro que no se disponga de dinero para un nuevo tratamiento.
Comparte la angustia con #Infertilpandy
Hace dos a?os, Luisa De Vilches, de Ja¨¦n, encontr¨® en Twitter lo que buscaba: una forma de compartir su angustia tras ocho a?os encadenando tratamientos de fertilidad: la #Infertilpandy. Con este nombre, fruto de la uni¨®n de las palabras inf¨¦rtil y pandilla, se comunican alredeor de 300 personas, la mayor¨ªa mujeres. Algunas de ellas, como De Vilches, dan su nombre real. La mayor¨ªa lo hace ocultando su identidad.
¡°Poniendo la etiqueta #infertilpandy nos contamos nuestras penas, informamos de cada paso de nuestros tratamientos¡±, cuenta De Vilches. ¡°Ah¨ª se acepta todo. Hay chicas a las que les duele ver ecograf¨ªas de mujeres que han logrado el embarazo y se retiran¡±, contin¨²a la jienense. Ella es actualmente la encargada de publicar diariamente las citas que tienen al d¨ªa siguiente cada una de las participantes en esta particular pandilla: las punciones para extraer ¨®vulos, las transferencias de embiones o las pruebas de embarazo.
En Espa?a, s¨®lo hay una ONG que ayude a mujeres a someterse a un tratamiento, Baby Beatles, reci¨¦n creada por Teresa Ferreiro, que subvenciona a mujeres a las que, habiendo sufrido un c¨¢ncer de mama, su fertilidad haya quedado comprometida tras el tratamiento. ¡°Yo sufr¨ª c¨¢ncer de pecho, pero tuve medios para quedarme embarazada¡±, dice Ferreiro. ¡°Pens¨¦ mucho en otras mujeres en mi situaci¨®n. Me dec¨ªa 'tengo que ayudar a que vengan m¨¢s Pol (el nombre de su hijo) al mundo¡±. La ONG empez¨® a funcionar el pasado mes de septiembre. Han recibido 25 solicitudes de las que solo cinco cumplen los requisitos. Las mujeres se someter¨¢n a tratamientos en los centros que, a trav¨¦s de la Sociedad Espa?ola de Fertilidad, tengan convenio de colaboraci¨®n con Baby Beatles.?
De Vilches y Mart¨ªnez se empezaron a someter a tratamientos cuando ella ten¨ªa 28 a?os. Ahora tiene 39 y siguen luchando por lograr el objetivo de ser padres. Ambos tienen problemas de fertilidad, pero, seg¨²n les dicen los m¨¦dicos, nada indica que no puedan lograrlo. Primero acudieron a la seguridad social, donde tuvieron que esperar unos dos a?os a su turno. Los dos primeros tratamientos fueron fallidos, en uno de los casos por un problema hormonal, en el otro por hiperestimulaci¨®n ov¨¢rica. Los dos siguientes siguieron adelante, pero no prosper¨® ninguno de los embriones que le transfirieron. As¨ª que decidieron coger el tren y hacerse el siguiente tratamiento en Madrid en una cl¨ªnica reconocida cuyo precio era bastante elevado. Pidieron un pr¨¦stamo al banco. Y se quedaron embarazados al segundo intento, pero De Vilches abort¨® poco despu¨¦s.
La jienense se decidi¨® a pedir dinero porque antes supo de una mujer que hab¨ªa hecho lo mismo, Ainoa (no da su apellido), una valenciana de 40 a?os que cuenta su caso en un blog. ¡°No tengo pareja y corro con todos los gastos¡±, empieza. ¡°Hice cinco inseminaciones artificiales y una in vitro gracias a un pr¨¦stamo. Ya no pod¨ªa pagar m¨¢s y decid¨ª por un lado renunciar a mi carga gen¨¦tica e ir directamente a una adopci¨®n de embriones, que es m¨¢s barato, y pedir ayuda. Recib¨ª unos 400 euros, pero me empec¨¦ a sentir mal y borr¨¦ el texto que hab¨ªa escrito. Agradezco mucho a las personas que me ayudaron a conseguir mi objetivo¡±. Ainoa est¨¢ embarazada de 13 semanas.
Eva Bernal, asesora de mujeres y parejas que inician la senda de los tratamientos para ser padres, dice que a quienes no tienen dinero les recomienda buscar una donaci¨®n de embriones, que es bastante m¨¢s barata. ¡°Con 5.000 euros te puedes hacer dos o tres tratamientos, pero depende de la importancia que le de la gente a su carga gen¨¦tica¡±.
En estos d¨ªas De Vilches est¨¢ empezando su sexto tratamiento, pagado en parte con lo recibido. Ella ha querido ayudar tambi¨¦n a otra mujer que ha conocido por Twitter, @anita_ruisan. ¡°Ahora es a ella a la que tenemos que ayudar¡±, escribe en este nuevo texto. ¡°Da igual si las aportaciones son peque?as porque granito a granito se har¨¢ monta?a¡±.
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