Los inmigrantes del CIE de Madrid abandonan su mot¨ªn

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Casi doce horas de negociaciones. Una intensa lluvia. Y una principal condici¨®n pactada: "No habr¨¢ represalias" contra los participantes en la protesta. As¨ª ha acabado, a primera hora de la ma?ana de este mi¨¦rcoles, el mot¨ªn protagonizado por un grupo de 39 inmigrantes del Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE) de Aluche (Madrid), que han permanecido durante toda la noche subidos en la azotea del edificio pidiendo a gritos "libertad" y "dignidad". "Ya est¨¢n todos en sus habitaciones", han explicado fuentes policiales sobre las nueve y media de la ma?ana, despu¨¦s de que los extranjeros abandonaran la parte superior del complejo y empezaran a bajar a los pisos inferiores. En los CIE se ingresan, durante un m¨¢ximo de 60 d¨ªas, a extranjeros en situaci¨®n irregular en Espa?a como paso previo a su expulsi¨®n.

El mot¨ªn arranc¨® sobre las diez de la noche del martes. El portavoz de la Polic¨ªa Nacional, Antonio Nevado, ha dicho que los inmigrantes rompieron una puerta de seguridad y subieron por una escalera hasta la azotea. "Han tapado las c¨¢maras de seguridad para no poder ser controlados desde la sala de monitores. Han comenzado a romper mobiliario y a abrirse paso hasta que han llegado al tejado", aseguraron fuentes del centro. Aunque, seg¨²n fuentes policiales, antes de acceder a la parte superior del edificio, el grupo trat¨® de dirigirse a la calle, pero la presencia en ese momento de dos los agentes de dos turnos ¡ªel de tarde y noche, que iban a hacer el relevo¡ª evit¨® que escaparan.

La seguridad del CIE avis¨® entonces a la Polic¨ªa y los dos primeros equipos de la Unidad de Prevenci¨®n y Reacci¨®n (UPR) llegaron "en 10 minutos". Nevado ha precisado que 38 de los 39 inmigrantes son de nacionalidad argelina. Y, de hecho, una de las condiciones pactadas entre las partes para poner fin al mot¨ªn es que el c¨®nsul de Argelia los visite para analizar su situaci¨®n. El portavoz ha precisado que los inmigrantes no ten¨ªan armas y que no se han registrado heridos ni altercados. Adem¨¢s, ha negado que la revuelta comenzase debido a una menor presencia policial en el CIE por los disturbios en el entorno del estadio Santiago Bernab¨¦u, algo que s¨ª sostienen otras fuentes policiales consultadas por EL PA?S. Existe un informe previo, de la propia polic¨ªa, que alertaba de que se pod¨ªa producir un mot¨ªn, como el que ha ocurrido.

El PSOE ha registrado en el Congreso una solicitud de comparecencia urgente para que el director general de la Polic¨ªa, Ignacio Cosid¨®, explique lo ocurrido en el CIE. Este nuevo intento de fuga en el CIE de Aluche, sumado a los que se vienen produciendo en otros centros de internamiento de extranjeros de Espa?a, ha puesto en evidencia la situaci¨®n de vulnerabilidad de estos centros, tanto para los internos que acogen como para quienes los vigilan. Durante toda la noche, y despu¨¦s de que la propia alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, se ofreciese a la delegada del Gobierno, Concepci¨®n Dancausa, para mediar, varios concejales de Podemos han mantenido una guardia en la Avenida de los Poblados, donde se encuentra la instalaci¨®n.

Varios concejales y cargos de Ahora Madrid y de Podemos, que se han desplazado hasta las inmediaciones del centro, han denunciado que no les han dejado entrar en las instalaciones ni les est¨¢n ofreciendo ninguna informaci¨®n sobre c¨®mo se ha resuelto la situaci¨®n. "Se?alamos la opacidad en la gesti¨®n de esta situaci¨®n. Ninguna noticia desde los responsables del CIE", ha escrito en Twitter el delegado de Seguridad del Ayuntamiento de Madrid, Javier Barbero.

El secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, ha llamado a "solucionar" la situaci¨®n "respetando los derechos humanos y de forma pac¨ªfica" y "despu¨¦s, cerrarlo", ha escrito en su cuenta de Twitter. "Los CIE son una verg¨¹enza para nuestra sociedad y es nuestra obligaci¨®n cerrarlos. En democracia los derechos son de todas", ha se?alado en la misma red el secretario Pol¨ªtico de la formaci¨®n, ??igo Errej¨®n.

El pasado 24 de agosto, a plena luz del d¨ªa, 17 internos se fugaban del mismo CIE. Lograron salir por la ventana de uno de los ba?os situados cerca de una de las salas de ocio y del comedor "serrando los barrotes y saliendo por el hueco que abrieron", seg¨²n explicaron fuentes policiales. Nueve de ellos fueron detenidos casi de inmediato, y otro m¨¢s al d¨ªa siguiente, aunque siete de ellos lograron completar la fuga con ¨¦xito.

"Esto no es un centro, esto es una c¨¢rcel"

Las ONG han denunciado este mi¨¦rcoles la "vulneraci¨®n" de derechos que sufren los internos de los CIE. "Las condiciones son nefastas all¨ª dentro. No se trata de mejorarlos, la ¨²nica soluci¨®n es cerrarlos", ha expuesto Jos¨¦ Ariza, de SOS Racismo Madrid. "Existe un uso desproporcionado y un abuso del internamiento de personas migrantes. Aunque la ley establece que el internamiento debe ser una medida excepcional, una vez agotadas las medidas alternativas, este car¨¢cter excepcional no se est¨¢ aplicando", ha a?adido CEAR (Comisi¨®n Espa?ola de Ayuda al Refugiado).

"Esto no es un centro, esto es una c¨¢rcel", han gritado una decena de activistas concentrados este mi¨¦rcoles a las puertas de la instalaci¨®n. Mientras tanto, varios representantes de algunas ONG e Ione Belarra, diputada de Podemos, han podido acceder al interior de la instalaci¨®n ¡ªsolo al patio¡ª y han solicitado hablar con el jefe de seguridad del CIE. Sin ¨¦xito.

"Yo no hab¨ªa cometido ning¨²n delito, pero un d¨ªa llegaron a mi casa y me detuvieron. Entonces me llevaron hasta Madrid y me encerraron durante 60 d¨ªas en el CIE de Aluche", cuenta Carlos (un nombre ficticio porque no quiere dar su nombre por miedo a represalias), un latinoamericano que fue internado en esta instalaci¨®n en 2012. Entonces viv¨ªa con su familia en una ciudad de Castilla la Mancha, pero no ten¨ªa permiso de residencia. "Trabajaba en el campo, pero sin estar dado de alta", apostilla este hombre de 35 a?os e hijos. "Viv¨ªamos en unas condiciones penosas. Para empezar, ten¨ªas que tener horario para enfermarte", ironiza: "Entre las siete y ocho de la ma?ana ten¨ªas que anotarte en una lista. Si no lo hac¨ªas, no pod¨ªas ir al m¨¦dico hasta el d¨ªa siguiente, aunque te encontrases fatal".

Carlos cuenta que "todo estaba sucio", "que no siempre ten¨ªas agua caliente o calefacci¨®n". "Y viv¨ªas con la incertidumbre de que, en cualquier momento, pod¨ªan deportarte", apostilla el hombre, que volvi¨® a su ciudad tras dos meses "desactivado" de su vida. "A la misma hora que entre, sal¨ª 60 d¨ªas despu¨¦s", concluye.