Rajoy se resiste a tratar con el PSOE la derogaci¨®n de sus leyes estrella

¡°He le¨ªdo la resoluci¨®n (del PSOE), hay cosas que son buenas sobre las que se puede hablar en el futuro¡±. Esa es la frase clave de la medida intervenci¨®n de este lunes de Mariano Rajoy para valorar el giro determinante del PSOE en apenas dos semanas. En privado no para de ensalzar que ahora tiene un interlocutor fiable y serio al frente de los socialistas con el que se puede hablar. Pero el presidente en funciones se dispone a ser reelegido con la idea de negociar casi todas las demandas que plantee el PSOE menos ¡°la derogaci¨®n completa¡± de sus leyes estrella: la reforma laboral, la educativa y la de seguridad.

No hicieron falta preguntas, ni hubo la oportunidad. El PP le program¨® para este lunes a Rajoy, justo despu¨¦s del comit¨¦ federal socialista, una intervenci¨®n lo m¨¢s c¨®moda y controlada posible para presentar en un foro con mucha expectaci¨®n al l¨ªder actual del partido en Catalu?a, Xavier Garc¨ªa Albiol.

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Primero Rajoy pirope¨® a Albiol y sus ¨¦xitos electorales en Badalona (la tercera ciudad de Catalu?a donde gan¨® en dos ocasiones, aument¨® en votos y ediles pero tras los ¨²ltimos comicios no pudo gobernar) para destacar que su proyecto ¡°une y no divide¡± frente a las derivas independentistas. Luego se adentr¨® en el problema catal¨¢n para ratificar que con ¨¦l al frente de la Presidencia del Gobierno se debe estar tranquilo porque est¨¢ asegurado que velar¨¢ ¡°por la unidad de Espa?a, la soberan¨ªa nacional y la igualdad de todos los espa?oles¡± y acto seguido se ofreci¨® a ¡°hablar y acordar de todo lo dem¨¢s¡± si las aspiraciones que se plantean son legales.

Ese pre¨¢mbulo calculado le sirvi¨® para proclamar de nuevo que Espa?a es ¡°y va a seguir siendo un gran pa¨ªs, con un gran futuro por delante¡± y para confesar que hab¨ªa le¨ªdo con atenci¨®n la resoluci¨®n final aprobada el domingo por el m¨¢ximo ¨®rgano entre congresos del PSOE.

¡°Decisi¨®n muy razonable¡±

Fue as¨ª como despach¨® de una tacada todo lo que ten¨ªa previsto decir en p¨²blico sobre el cambio de posici¨®n socialista que le permitir¨¢ continuar en La Moncloa: ¡°Ayer (por el domingo) se tom¨® una decisi¨®n importante, no voy a entrar en los detalles, no me parece oportuno hacerlo en el d¨ªa de hoy y lo har¨¦ en el Parlamento. Solo decir que la decisi¨®n que se tom¨® en el d¨ªa de ayer fue una decisi¨®n, en mi opini¨®n, muy razonable. Me pongo en el lugar del otro, he le¨ªdo la resoluci¨®n, hay cosas que son buenas sobre las que se puede dialogar en el futuro y si hay voluntad pol¨ªtica podemos tener en Espa?a un gran futuro por delante¡±. No hubo m¨¢s.

El moderador del acto y hasta el propio Albiol intentaron m¨¢s tarde que algunas de las preguntas del auditorio sobre la complicada situaci¨®n pol¨ªtica del pa¨ªs las contestara Rajoy. No hubo lugar. Lo rechaz¨®. Sigue enfrascado en la estrategia de la prudencia, el respeto y la no interferencia en los debates de otros partidos, al menos por ahora. Es la orden que le dio hace ya m¨¢s de dos semanas a los miembros de su partido y que ha conseguido que se cumpliera sin excepciones. Ahora es a¨²n m¨¢s cauteloso, porque se llega a la fase decisiva y porque quiere ser escrupuloso con el manejo de los tiempos y los roles institucionales. Rajoy aceptar¨¢ esta tarde el encargo que prev¨¦ del rey Felipe VI para intentar su investidura, pero a¨²n no aportar¨¢ m¨¢s claves de su inminente mandato.

El ¨²nico mensaje que anticipan en su entorno destaca que ahora, ante esta delicada legislatura que comienza, s¨ª est¨¢ dispuesto a hablar y negociar.

Los dirigentes del PP aseguran que Rajoy permitir¨¢ as¨ª el di¨¢logo, por supuesto de nuevo con Ciudadanos pero sobre todo con el PSOE, de casi todas las iniciativas que ese partido demande pero con la condici¨®n de que se trate de cambiar algunos aspectos m¨¢s o menos cuestionados pero no leyes completas.

El PP defiende as¨ª que la reforma laboral adoptada en la anterior legislatura tuvo aspectos positivos, que han ayudado a la creaci¨®n de empleo, aunque admiten que en muchos casos de forma precaria y temporal. Rechazan que se tenga que derogar entera. Pero los populares aceptan que tendr¨¢n que acometer cambios en esa norma, tambi¨¦n en sinton¨ªa con los planteamientos sindicales.

El encaje de F¨¢tima B¨¢?ez

Uno de los problemas de encaje que Rajoy tendr¨¢ en cuenta en ese caso es el papel que deber¨¢ jugar en la siguiente legislatura la actual ministra de Empleo, F¨¢tima B¨¢?ez. Hay dirigentes populares que sostienen que para facilitar las cosas y la negociaci¨®n con el PSOE y otros partidos ser¨ªa bueno cambiar a la titular de esa cartera a otro Ministerio. Nadie duda en el PP sobre que B¨¢?ez continuar¨¢ en el Gabinete, por la valoraci¨®n que tiene del propio presidente y de la vicepresidenta, Soraya S¨¢enz de Santamar¨ªa. Rajoy la nomin¨® en agosto para formar parte central del equipo negociador en el acuerdo con Ciudadanos y miembros de ese partido han agradecido luego que el buen trato con la ministra les hab¨ªa permitido abrir una v¨ªa de comunicaci¨®n con el Gobierno que no ten¨ªan.

En ese mismo sentido, son mayor¨ªa los dirigentes del PP que comprenden la labor desagradable efectuada en el pasado mandato por el titular de Interior, Jorge Fern¨¢ndez, y no solo por los esc¨¢ndalos que se le imputan en la investigaci¨®n de otros partidos, sino tambi¨¦n por la puesta en marcha de la llamada ley mordaza. La oposici¨®n, incluido Ciudadanos, atribuye a Fern¨¢ndez la autor¨ªa intelectual de esa norma que facilita al m¨¢ximo los cacheos, limita el derecho de manifestaci¨®n, algunas protestas ciudadanas y aspectos de la libertad de informaci¨®n.

Pero ni el PP ni tampoco Ciudadanos suscribieron en su acuerdo del pasado verano que esas leyes tengan que ser borradas totalmente. Esa finalidad maximalista de la derogaci¨®n total de esas leyes fue una de las discusiones que tuvieron Ciudadanos y PSOE en su pacto para la fracasada investidura de Pedro S¨¢nchez en febrero y el t¨¦rmino se excluy¨®. Ahora sucede lo mismo. El PP argumenta que varios apartados de esa norma ya son dif¨ªcilmente reversibles.