Maza, Marchena y el Fern¨¢ndezGate
El Gobierno, por propuesta consensuada del ministro de Justicia, Rafael Catal¨¢, y el presidente, Mariano Rajoy, ha optado por el nombramiento de un magistrado de la Sala Segunda del Tribunal Supremo, Jos¨¦ Manuel Maza, (en la imagen) para el puesto de fiscal general del Estado, decisi¨®n que supone dar marcha atr¨¢s en el respaldo a la candidatura de Consuelo Madrigal.
Fuentes judiciales se?alan que el presidente de la Sala Segunda, Manuel Marchena, fue consultado sobre ello y aconsej¨® cambiar el enfoque. Es decir: nombrar un magistrado de su sala. Maza es un hombre de confianza de Marchena, quien a su vez mantiene una sinton¨ªa personal, y discreta, con la vicepresidenta, Soraya S¨¢enz de Santamar¨ªa.
Algo cambi¨® entre el lunes 7 de noviembre, d¨ªa de la toma de posesi¨®n de Catal¨¢, y el mi¨¦rcoles 9, el d¨ªa despu¨¦s de una reuni¨®n que mantuvo Catal¨¢ en La Moncloa con Rajoy. Semanas antes de la investidura de Rajoy, Catal¨¢ convoc¨® a Madrigal para saber si manten¨ªa su deseo de ser nombrada por cuatro a?os, tras cumplir menos de dos en el puesto, al sustituir a Eduardo Torres-Dulce a mediados de diciembre de 2014.
Y el lunes 7, adem¨¢s, Catal¨¢ vino a insinuar que Madrigal ser¨ªa su candidata. La fiscal general, a su vez, hizo saber a algunas personas pr¨®ximas que seguir¨ªa.
Pero despu¨¦s del martes, la operaci¨®n relevo de Madrigal, como la llaman algunos magistrados y fiscales, ya estaba en marcha. La iron¨ªa: se estaba relevando a alguien que era m¨¢s que una fiscal in pectore porque Catal¨¢ hab¨ªa dado a entender que ella era su candidata.
Con la decisi¨®n de nombrar a Maza se encomend¨® la b¨²squeda de un equipo para el que ser¨¢ nuevo fiscal general del Estado.
El que fuera teniente fiscal de la Audiencia Nacional, Jes¨²s Santos, que ahora trabaja como abogado en el bufete Baker & McKenzie -es letrado defensor del Partido Popular en casos como G¨¹rtel y destrucci¨®n del disco duro del ordenador del ex tesorero del PP Luis B¨¢rcenas- hizo entre jueves y viernes varios contactos entre fiscales para proponer nombres. Y Santos, seg¨²n fuentes jur¨ªdicas, no fue el ¨²nico al que se encarg¨® ese trabajo.
La opci¨®n por Madrigal primero y por Maza definitivamente ha supuesto el naufragio de las aspiraciones del presidente de la sala de lo Penal de la Audiencia Nacional y vocal del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Fernando Grande-Marlaska, quien apel¨® a los buenos oficios de Carlos Lesmes, presidente del Tribunal Supremo y del CGPJ, para lograr el puesto.
En el mes de septembre, Maza integr¨® la sala de admisi¨®n de la Sala Segunda del Supremo a cargo de la querella criminal presentada por Xavier Tr¨ªas, ex alcalde de Barcelona, y Convergencia Democr¨¢tica de Catalu?a (CDC), contra el ahora ex ministro del Interior, Jorge Fern¨¢ndez D¨ªaz, y el ex director de la Oficina AntiFraude, Daniel de Alfonso, a ra¨ªz de las conversaciones grabadas en el ministerio del Interior el 2 y 16 de octubre de 2014.
En ellas, ambos se explayan sobre la posibilidad de difundir en los medios de comunicaci¨®n informaciones que afectaban presuntamente a dirigentes soberanistas de Catalu?a, una trama que se denomin¨® Operaci¨®n Catalu?a seg¨²n ha denunciado en sede judicial el comisario, ahora jubilado, Jos¨¦ Villarejo.
Una de esas maniobras en grado de tentativa fue analizada entre el ministro y su interlocutor el 16 de octubre -la atribuci¨®n de una cuenta en suiza al entonces alcalde de Barcelona Xavier Tr¨ªas- y se consum¨® trav¨¦s de la filtraci¨®n de los datos a un medio de comunicaci¨®n los d¨ªas 27 y 28 de octubre. Tr¨ªas acredit¨® a trav¨¦s de una comunicaci¨®n de la Union de Banques Suisses (UBS) que ni era titular de dicha cuenta ni se trataba de la numeraci¨®n de dicha entidad bancaria.
La sala de admisi¨®n del Supremo solicit¨® informe al fiscal jefe, Antol¨ªn Herrero, quien en un breve dictamen se?al¨® que no se apreciaban los delitos de prevaricaci¨®n, revelaci¨®n de secretos y malversaci¨®n.
Herrero dec¨ªa que las conversaciones -difundidas en la recta final de la campa?a electoral del 26-J por el diario P¨²blico - entraban dentro de las competencias del ministro y del intercambio de informaci¨®n previsto por el estatuto de la Oficina Antifraude y que tampoco se hablaba de montante de dinero para destinar a la operaci¨®n, lo cual descartar¨ªa el delito de malversaci¨®n de fondos p¨²blicos.
Tanto el informe del fiscal jefe como la composici¨®n de la sala de admisi¨®n fueron objeto de cierto secretismo por parte de la Sala Segunda del Supremo. El 18 de octubre, a preguntas de este cronista, el Supremo confirm¨® que la sala estaba formada por Marchena, que como presidente de la sala, la presid¨ªa; Maza, Ana Ferrer, Miguel Colmenero y Andr¨¦s Palomo. Tambi¨¦n inform¨® que Marchena era el magistrado ponente. As¨ª lo reflejamos en esta cr¨®nica y en una segunda informaci¨®n.
Sin embargo, el 26 de octubre, una semana m¨¢s tarde, el Supremo se puso en contacto con este cronista para corregir lo que hab¨ªa informado con anterioridad. La ponencia, dec¨ªa, hab¨ªa reca¨ªdo en Maza el 9 de septiembre. No en Marchena, como se hab¨ªa dicho.
Bien.
Dos meses largos despu¨¦s de presentada la querella, el pasado 1 de septiembre, tras la designaci¨®n de ponente el 9 de septiembre y del informe del fiscal unas semanas m¨¢s tarde, las preguntas son: ?ha propuesto el ponente Maza archivar la querella criminal en l¨ªnea con lo que propon¨ªa Antol¨ªn Herrero? ?la sala de admisi¨®n ha apoyado por unanimidad caso de que se produjera el archivo? ?por qu¨¦ tanto retraso?.
Y last but not least, ?por qu¨¦ tanto secretismo?
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