Una acusaci¨®n de terrorismo basada en productos de limpieza y una pintada
En 2015 fue arrestado un comando anarquista y uno de sus miembros lleva m¨¢s de un a?o en prisi¨®n, pero todo se apoya en la pol¨¦mica formulaci¨®n del delito y en pruebas dudosas
Una nota de prensa del Cuerpo Nacional de Polic¨ªa inform¨® el 5 de noviembre de 2015 de la Operaci¨®n Ice, el arresto en Madrid de seis j¨®venes acusados de formar un peculiar grupo terrorista anarquista y vegano, que rechazaba las drogas y el alcohol, llamado Straight Edge. Su siglas, SXE. Dec¨ªa que hab¨ªan atacado sucursales bancarias y que ten¨ªan material para fabricar explosivos. El caso luego cay¨® en el olvido y la situaci¨®n hoy es la siguiente: uno de ellos, Juan Manuel Bustamante, alias Nahuel, 26 a?os, sigue en prisi¨®n en el r¨¦gimen m¨¢s duro, como presunto terrorista; se le aplica la dispersi¨®n, ha pasado ya por cinco centros penitenciarios y ha sido denegada su libertad cuatro veces; est¨¢n todos a la espera de juicio y de petici¨®n fiscal, que con cuatro graves delitos asociados al terrorismo pueden llegar a sumar penas m¨ªnimas de 35 a?os. Pero, sobre todo, la lectura del sumario siembra muchas dudas acerca de la base de las acusaciones, los ataques a bancos.
Que surjan nuevos y misteriosos grupos terroristas en Espa?a es algo relevante, pero analizar en qu¨¦ consiste exactamente esta nueva amenaza resulta muy desconcertante: vuelve a cuestionar lo que se engloba dentro del delito de terrorismo. Este debate ha surgido ya con el caso de la paliza a dos guardias civiles y sus parejas en Alsasua, pero este asunto es a¨²n m¨¢s llamativo y ha pasado muy inadvertido. La juez que ha instruido el caso es la misma, Carmen Lamela.
Caldo de lombarda y botellines vac¨ªos
La defensa de los acusados ha lamentado ante el juez el ¡°car¨¢cter torticero y poco riguroso¡± de los informes policiales que acusan a los seis detenidos en la operaci¨®n Ice. Todas las sustancias sospechosas que se encontraron en los registros resultaron ser lo que parec¨ªan. Az¨²car, vinagre, bicarbonato... En un bote que conten¨ªa un l¨ªquido extra?o pon¨ªa que era lombarda. El an¨¢lisis concluy¨® lo siguiente: ¡°Tras su estudio se desprende que se trata de un preparado de naturaleza acuosa, que por sus propiedades organol¨¦pticas y por su comportamiento frente a las variaciones del Ph podr¨ªa ser un caldo de cocci¨®n de col lombarda¡±.
Pese a tal rigor, tambi¨¦n se dan saltos l¨®gicos tan intr¨¦pidos como el siguiente, tras el hallazgo de un botell¨ªn de cerveza vac¨ªo en el domicilio de uno de los arrestados: ¡°No tendr¨ªa relevancia de no ser por el hecho de que el colectivo se caracteriza por su rechazo al alcohol y las drogas, por lo que cabe pensar que el objetivo de tener ese botell¨ªn es con el ¨²nico fin de realizar c¨®cteles molotov¡±. Tambi¨¦n el hecho de que este detenido guardara una caja de madera y una de metal con s¨ªmbolos del grupo ¡°lleva a pensar que es el encargado de la financiaci¨®n de la organizaci¨®n¡±. En el material incautado tambi¨¦n se destaca "letras de canciones del grupo proetarra Piperrak en contra la Guardia Civil". Otras deducciones requieren cierta disposici¨®n. Entre las pintadas atribuidas al grupo en los alrededores del banco atacado hab¨ªa tambi¨¦n algunas de car¨¢cter feminista, ¡°induciendo a pensar que entre los autores se encuentra al menos una mujer¡±.
El hecho violento que se atribuye a los detenidos es la quema de dos sucursales bancarias en 2013 y 2015 en Madrid, aunque en el sumario no hay ni una sola prueba de su participaci¨®n directa. El hecho de que apareciera en el lugar una pintada del grupo dos semanas antes, que colgaran en las redes sociales fotos de bancos con llamamientos a sabotearlos y que uno de los detenidos viva cerca de all¨ª, llev¨® a los agentes a ¡°la convicci¨®n¡± de que hab¨ªan sido ellos. Eso se ha unido en la argumentaci¨®n a que su ideolog¨ªa, sus proclamas en Twitter y Facebook contra la autoridad y los bancos, as¨ª como varios v¨ªdeos que publicaron en YouTube, pretenden ¡°subvertir el orden constitucional¡±. La uni¨®n de estos dos elementos, con la ley actual en la mano y una interpretaci¨®n muy amplia, ya permite hablar de un acto terrorista, seg¨²n el juez que lo interprete.
El material para explosivos hallado en los registros se compone de botes de humo, bengalas y petardos, ¡°productos industriales de libre comercializaci¨®n¡±, seg¨²n concluye el informe policial. Si? bien se?ala que la p¨®lvora que contiene, ¡°confinada en el recipiente adecuado tiene comportamiento explosivo¡± en un artefacto de fabricaci¨®n casera. En todo caso no se atribuye a este grupo la colocaci¨®n de ninguno. Las sustancias confiscadas resultaron ser de cocina y limpieza, y ¡°no son id¨®neas por s¨ª solas para la elaboraci¨®n de artefactos explosivos o incendiarios¡±, aunque los peritos se?alan que podr¨ªan ser manipuladas para fabricar ¡°bombas de humo¡±.
En contra de los acusados, y sobre todo del que contin¨²a en prisi¨®n, han pesado tambi¨¦n argumentos como que simpatizan con el movimiento okupa y que han participado en manifestaciones como Rodea el Congreso y Marcha por la Dignidad. Bustamante hab¨ªa sido detenido en tres ocasiones, acusado de participar en altercados en estas movilizaciones.
Straight Edge, algo as¨ª como camino recto, es una tendencia que nace en Estados Unidos en los setenta y toma nombre de una canci¨®n con ese t¨ªtulo de un grupo de hardcore punk de los ochenta llamado Minor Threat. Nace en los c¨ªrculos punks y anarquistas como respuesta al abuso de alcohol y drogas predominantes en ese mundo. ¡°La libertad no se fuma, no se bebe, ni se esnifa; la libertad se conquista¡±, dice la web del colectivo SXE en Madrid, un puritanismo que en realidad entronca con la tradici¨®n original anarquista, que ve en el alcohol una forma m¨¢s de dominio de las voluntades del capitalismo. A ello unen la dieta vegana, el respeto por los animales y el antiespecismo, es decir, la negaci¨®n de que haya una especie, la humana, superior a otras. Los miembros del grupo de Madrid, que tienen ahora entre 20 y 26 a?os, se conocieron en torno a las movilizaciones del 15-M, pero se fueron alejando por sus ideas, m¨¢s radicales. Quieren hacer frente al ¡°sistema¡± y a ¡°una realidad mediocre¡±. Se consideran antifascistas y libertarios. La juez considera que con su propaganda en redes sociales "tratan siempre de erosionar el prestigio y la credibilidad del Estado y en particular, de sus Fuerzas de Seguridad" y llaman a usar la violencia. El hecho de que funcionen como grupo, fundado en abril de 2013 seg¨²n el auto de procesamiento, se traduce para la magistrada en que constituyen una organizaci¨®n. En ese esquema, Bustamante ser¨ªa el l¨ªder.
Las familias de los procesados organizan protestas peri¨®dicas, se concentran una vez a la semana en la Puerta del Sol para pedir la libertad de Nahuel y consideran lo ocurrido una grave injusticia. "Cuando lo cuento la gente me mira con escepticismo, pensando que algo habr¨¢n hecho, si les acusan de ser terroristas, y qu¨¦ otra cosa voy a decir yo, que soy su madre, pero cuando les paso el sumario no se lo creen. Es un disparate, no hay absolutamente nada, ninguna prueba, solo por lo que dicen en las redes sociales. Yo cre¨ªa en la polic¨ªa y en los jueces, estudi¨¦ derecho, he sido abogada, pero con esto se me ha ca¨ªdo una venda de los ojos", se sincera Natalia Bosch, madre de Candela Betancor, que est¨¢ entre los detenidos.
Tres juristas expertos en delitos de terrorismo han analizado el auto de procesamiento y coinciden en su perplejidad. ¡°Tengo la impresi¨®n de que es un caso m¨¢s de banalizaci¨®n del concepto de terrorismo, donde se aplica todo el dispositivo pensado para Daesh o ETA a grupos que pueden causar disturbios, da?os, pero sin que aparezca la violencia contra las personas. La reforma del a?o pasado hace posible esto y mucho m¨¢s, ha desdibujado por completo el concepto de terrorismo¡±, afirma Manuel Cancio, catedr¨¢tico de Derecho Penal de la Universidad Aut¨®noma de Madrid. Sostiene que el nuevo art¨ªculo 573 da cabida a m¨²ltiples supuestos que ¡°con la jurisprudencia, la regulaci¨®n anterior y el sentido com¨²n no ser¨ªa posible identificar como terrorismo¡±. Opina que en el auto de procesamiento "se habla de ideolog¨ªa, de tuits, de libros, y muy poco de lo que deber¨ªa ser protagonista: qu¨¦ explosivos ten¨ªan, qu¨¦ delitos hab¨ªan realizado y cu¨¢les estaban planificando, no veo por ning¨²n lado delitos graves aptos para ser calificados de terrorismo, que conlleven penas de al menos cinco a?os¡±.
Jos¨¦ Luis D¨ªez-Ripoll¨¦s, catedr¨¢tico de Derecho Penal de la Universidad de M¨¢laga, confirma que los ¨²ltimos cambios legales "est¨¢n permitiendo considerar grupo criminal a meras actuaciones de codelincuencia". "Es cierto que, con conceptos tan amplios, podemos estar ante un grupo, o incluso organizaci¨®n criminal, incluso terrorista si se aceptara que tienen uno de los fines tradicionales, el de subvertir la paz p¨²blica, pero el relato de indicios alude a actuaciones muy inconcretas, que, no por casualidad, se centran casi en exclusiva en acciones en las redes sociales". "Lo que consta m¨¢s bien -concluye- es un colectivo dedicado en las redes sociales a propagar la ideolog¨ªa anarquista, sin que conste suficientemente que haya pasado de eso".
Para Carmen Lamarca, catedr¨¢tica de Derecho Penal de la Universidad Carlos III de Madrid, el auto ¡°es una aut¨¦ntica locura¡±. ¡°Puede ser un grupo antisistema que preconice cosas que la libertad de expresi¨®n ampara sobradamente, otra cosa es probar que cometa delitos y use la violencia, y aqu¨ª me parece muy discutible¡±.
Este nuevo y resbaladizo escenario legal se debe a la reforma del C¨®digo Penal de marzo de 2015, en un pacto de PP y PSOE contra el yihadismo, que modific¨® la definici¨®n de terrorismo. Ya no se piensa en combatir organizaciones al estilo cl¨¢sico, sino en individuos o grupos peque?os, y ahora lo relevante es el objetivo que persigan con cualquier acto violento, al margen de su entidad. Es decir, si pretenden subvertir el orden constitucional, alterar la paz p¨²blica o causar terror en la poblaci¨®n. En esencia, en el caso de Straight Edge Madrid, al margen de las pruebas reales del acto violento, se teoriza que intentan subvertir ese orden constitucional a base de quemar cajeros y bancos. ¡°El atentado del que se les acusa, adem¨¢s, es de escasa entidad, sin da?os personales, y no se puede decir que haya alterado la paz p¨²blica porque ni sali¨® en la prensa¡±, apunta Daniel Amelang, uno de los abogados de los detenidos. "Es el llamado derecho penal del enemigo, se te acusa m¨¢s por lo que eres que por el hecho en s¨ª", corrobora Eduardo G¨®mez, otro de los letrados.
Tras el fin de ETA, est¨¢ en pie desde hace tres a?os una ofensiva policial contra el llamado mundo "anarquista insurrecionalista", en la que se est¨¢ utilizando la nueva formulaci¨®n de terrorismo, y la de Madrid fue la ¨²ltima de cinco grandes operaciones. En total, han llevado al arresto de 46 personas acusadas de terrorismo. La alarma salt¨® con las dos bombas caseras colocadas en 2013 en la catedral de La Almudena, en Madrid, que no lleg¨® a explotar, y en la bas¨ªlica del Pilar de Zaragoza, que caus¨® da?os materiales y secuelas en el t¨ªmpano a una mujer. El director general de la Polic¨ªa, Ignacio Cosid¨®, entonces fue tajante: declar¨® que la lucha contra el anarquismo era ¡°una prioridad¡±. Los arrestados de las sucesivas operaciones han sido acusados de terrorismo y se ha establecido una relaci¨®n gen¨¦rica con los responsables del atentado de Zaragoza, bajo el aglutinador de las siglas GAC (Grupos Anarquistas Coordinados). En el caso de Straight Edge Madrid, los detenidos simplemente ten¨ªan unos folletos de esta agrupaci¨®n.
Sin embargo, los acusados de la bomba del Pilar, arrestados en noviembre de 2013 en la primera operaci¨®n, bautizada Columna, acabaron condenados a 12 a?os de c¨¢rcel el pasado mes de marzo, pero la sentencia no admiti¨® que formaran parte de una organizaci¨®n terrorista. Y este viernes el Tribunal Supremo ha rebajado la pena a cuatro a?os y medio. Si este es el list¨®n judicial, con una bomba y una clara identificaci¨®n de los autores, habr¨¢ que ver en qu¨¦ queda todo lo que ha venido despu¨¦s. "Para los t¨¦cnicos de Derecho es obvio que es una aberraci¨®n", opina Cancio sobre la interpretaci¨®n que se est¨¢ haciendo del delito de terrorismo, "no existe nada similar en los pa¨ªses de nuestro entorno¡±.
En octubre de 2015, una semana antes de la operaci¨®n desplegada en Madrid, otra llamada Pandora 2 termin¨® con nueve detenidos en Barcelona, pero ha sido archivada este verano con un rapapolvo a los Mossos d¡¯Esquadra por la falta de indicios en registros y escuchas: "El ¨²nico resultado obtenido por los investigadores es la comprobaci¨®n de que los investigados se relacionan con personas del colectivo anarquista¡±. Las otras dos operaciones a la espera de juicio en la Audiencia Nacional son la Pandora 1, de diciembre de 2014, y la Pi?ata, de marzo de 2015.
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