Seis meses de legislatura sin proyectos de ley
El PP asegura que todas las normas son negociables salvo las econ¨®micas
Seis meses despu¨¦s de ser investido presidente del Gobierno, Mariano Rajoy no ha llevado al Congreso de los Diputados ning¨²n proyecto de ley, salvo el reciente de Presupuestos Generales del Estado para 2017, que a¨²n no tienen garantizada siquiera su admisi¨®n a tr¨¢mite. En este tiempo, La Moncloa solo ha mandado cinco proyectos, pero que sirven para trasponer directivas europeas, es decir, que son de obligada aprobaci¨®n y que estaban pendientes de la etapa de Gobierno en funciones.
Esta m¨ªnima producci¨®n legislativa es la menor en los primeros seis meses de cualquier otra legislatura, teniendo en cuenta no solo los proyectos de ley, sino tambi¨¦n los informes previos que deben pasar por el Consejo de Ministros antes de su trayecto definitivo hacia las Cortes.
Uno de los proyectos, el de "resoluci¨®n alternativa de litigios en materia de consumo" es de una directiva de noviembre de 2013. Los otros proyectos de ley remitidos al Congreso son directivas de 2014: el de restituci¨®n de bienes culturales que hayan salido de forma ilegal del territorio espa?ol o de otro Estado miembro de la Uni¨®n Europea, el de precursores de explosivos y el de procedimientos de contrataci¨®n en los sectores del agua, la energ¨ªa, los transportes y los servicios postales.
Ah¨ª termina la producci¨®n legislativa del actual Gobierno y, por tanto, el riesgo de perder votaciones o que sus proyectos sean derrotados. Todos ellos son ajenos a la voluntad legislativa y pol¨ªtica del Gobierno.
La gesti¨®n parlamentaria el Gobierno ha estado centrada en estos seis meses en mitigar en lo posible los efectos de la minor¨ªa parlamentaria, fundamentalmente, para evitar que se aprueben normas que deroguen las normas de la etapa de la mayor¨ªa absoluta. Fuentes del PP en el Congreso explican que la consigna de Mariano Rajoy es evitar tal revisi¨®n legislativa, especialmente, de las que el presidente del Gobierno considera innegociables: la reforma laboral y la de estabilidad presupuestaria. Es decir, las que seg¨²n La Moncloa han permitido la recuperaci¨®n econ¨®mica.
Esas fuentes explican que a partir de este momento ser¨¢ inevitable entrar en la negociaci¨®n de proposiciones de ley que ya han sido admitidas a tr¨¢mite en el pleno, que est¨¢n a la espera del debate de enmiendas parciales. Por ejemplo, la proposici¨®n de ley que reforma la ley de seguridad ciudadana, conocida como ley mordaza; la del Tribunal Constitucional que elimina el mecanismo para que este ¨®rgano ejecute sus resoluciones y la de cuidados paliativos, entre otras. A?aden que su baza negociadora hasta ahora ha sido la de la ausencia de liderazgo en el PSOE y, m¨¢s adelante, la de la dificultad para que partidos tan antag¨®nicos como Podemos y Ciudadanos pacten articulados concretos de normas, aunque hayan coincidido en debates de totalidad.
Su previsi¨®n es que no salga de las Cortes ninguna proposici¨®n camino del Bolet¨ªn Oficial del Estado antes del ¨²ltimo trimestre de este a?o. Por ejemplo, la citada proposici¨®n de ley de reforma del Tribunal Constitucional fue presentada por el PNV y, pese a ser una modificaci¨®n t¨¦cnicamente sencilla, lleva ya ocho ampliaciones de plazos de enmiendas. Fue admitida a tr¨¢mite en diciembre y a¨²n no ha empezado el proceso en comisi¨®n. El PP no espera que los socialistas acepten tramitar esta proposici¨®n de ley antes de verano, especialmente, porque en estos pr¨®ximos meses se mantendr¨¢ o incrementar¨¢ el proceso independentista en Catalu?a que el Gobierno, con el apoyo del PSOE, intenta frenar en el Constitucional.
La tramitaci¨®n de las enmiendas de la reforma o derogaci¨®n de la ley mordaza no est¨¢ prevista antes de verano. En ese momento, el Gobierno entrar¨¢ a negociar los detalles y, por el momento, no desvela qu¨¦ est¨¢ dispuesto a aceptar. Fuentes del PP y del Gobierno responden gen¨¦ricamente que se estudiar¨¢n los puntos recurridos al Tribunal Constitucional y las disfunciones que se hayan producido en su aplicaci¨®n.
En esta situaci¨®n, la direcci¨®n del PP en el Congreso argumenta que ha frenado los acuerdos con el PSOE hasta que no se resuelva su liderazgo a mediados de junio. Por ejemplo, era probable un acuerdo entre Gobierno y PSOE para la reforma procesal y que el fiscal pudiera asumir la instrucci¨®n penal, dado que las propuestas est¨¢n muy cerca o, en algunos puntos, son muy coincidentes. Sin embargo, el Gobierno ha optado por diferirlo en una subcomisi¨®n de modernizaci¨®n de la Justicia de donde saldr¨¢ un informe con propuestas concretas para esa futura reforma. Es decir, el Ejecutivo acepta renunciar o frenar su competencia legislativa.
Una excepci¨®n al ritmo legislativo lento es la de la reforma de RTVE. El PSOE conf¨ªa en que est¨¦ ya en el BOE la proposici¨®n de art¨ªculo ¨²nico antes de verano, porque ser¨¢ tramitada de forma urgente y por lectura ¨²nica. Otra cosa ser¨¢ cuando a partir de ese momento sea necesario el consenso de diferentes partidos para alcanzar los dos tercios del Congreso que se precisar¨¢n para nombrar a los futuros responsables de la radio y televisi¨®n p¨²blica.
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