Imputar a un aforado y otros 20 deberes en P¨²nica para el sucesor del juez Velasco

Eloy Velasco ya ha abandonado el Juzgado Central de Instrucci¨®n 6, pero los sumarios que instru¨ªa siguen adelante. En el caso P¨²nica, el magistrado dict¨® el pasado 24 de mayo un auto en el que no s¨®lo resolv¨ªa algunos de los recursos presentados por las partes y prorrogaba la instrucci¨®n de la causa otros 18 meses, sino que indicaba pieza por pieza de las 16 en las que est¨¢ dividida la causa, qu¨¦ diligencias quedaban pendientes de practicar. Entre ellas, ¡°formalizar¡± ante el Tribunal Superior de Justicia de Madrid la petici¨®n de imputaci¨®n de un exalcalde, en referencia al que fuera primer edil de Alcal¨¢ de Henares, el popular Bartolom¨¦ Gonz¨¢lez, hoy aforado por ser diputado en la Asamblea de Madrid.

Con las tres primeras piezas ¨Clas referidas al chivatazo, a la Diputaci¨®n de Le¨®n y a la Regi¨®n de Murcia- ya concluidas, el juez Velasco recuerda a su sucesor que en la cuarta, sobre las supuestas irregularidades urban¨ªsticas destapadas en el Ayuntamiento de Valdemoro, los dos arquitectos de la Direcci¨®n General del Catastro y de Hacienda que han sido designados para colaborar en las pesquisas deben emitir informes periciales. Para ello, ¡°se hace necesario requerir¡± al consistorio en el que Francisco Granados fue alcalde ¡°informaci¨®n sobre el Planeamiento urban¨ªstico completo del municipio¡±. En la quinta pieza, dedicada a los ama?os en los ayuntamientos de Serranillos del Valle y Torrej¨®n de Velasco, el magistrado destaca que ¡°est¨¢ pendiente un profuso n¨²mero de declaraciones que no se han podido realizar todav¨ªa por la propia complejidad y dimensi¨®n de la instrucci¨®n¡±. Adem¨¢s, considera ¡°necesario¡± la elaboraci¨®n de informes periciales sobre las irregularidades en los contratos para poder ¡°concretar las ganancias il¨ªcitamente obtenidas¡±. Para ello, se?ala la urgencia de nombrar dos interventores del Estado.

En la investigaci¨®n sobre el ama?o en la adjudicaci¨®n de concursos de eficiencia energ¨¦tica a la empresa Cofely, la pieza separada n¨²mero 6, el juez Velasco anuncia al futuro titular del Juzgado que van a incorporarse al sumario en breve sendos informes sobre las irregularidades en los consistorios de Villalba (Madrid) y Almendralejo (Badajoz). Tras ello, apunta que habr¨¢ que tomar nuevas declaraciones. Entre ellas, se?ala la del diputado auton¨®mico del PP Bartolom¨¦ Gonz¨¢lez. En esta pieza, el magistrado considera que para calcular los perjuicios econ¨®micos causados por estos contratos fraudulentos ¡°es preciso adoptar los criterios que van a regular las indemnizaciones¡±.

En la pieza n¨²mero 7, dedicada a las adjudicaciones irregulares a la empresa de festejos Waiter Music, Velasco enumera hasta cuatro diligencias pendientes. En primer lugar, tomar declaraciones a los trabajadores de esta compa?¨ªa. En segundo, solicitar los expedientes de licitaci¨®n a los 47 consistorios de Madrid que la contrataron entre 2004 y 2014 por un importe total de 28 millones de euros. En tercero, pedir a siete constructoras y una UTE los detalles de la facturaci¨®n por 1,3 millones de euros que les dirigi¨® Waiter Music. Por ¨²ltimo, reclamar al PP ¡°la justificaci¨®n de los trabajos¡± que esta mercantil realiz¨® ¡°en el cap¨ªtulo de financiaci¨®n el PP y sus gastos electorales¡±.

En la parte de la investigaci¨®n denominada ¡°Granados y colaboradores¡±, el juez Velasco destaca que a¨²n est¨¢ pendiente ¡°otro profuso n¨²mero de declaraciones¡±. Adem¨¢s, considera que para apoyar las pesquisas de la Guardia Civil sobre los ¡°regalos y comisiones varias¡± recibidas por el pol¨ªtico a cambio de adjudicar parcelas, ¡°es necesario el informe de los dos funcionarios arquitectos de la Agencia Tributaria nombrados recientemente en auxilio judicial¡±. En esta pieza tambi¨¦n se investiga el supuesto regalo de un autom¨®vil Mercedes Benz a una colaboradora de Granados. Tras el reciente informe entregado por la UCO, el juez Velasco recomienda que tome declaraciones y practique nuevas diligencias ¡°dirigidas a probar los indicios recabados hasta ese momento¡±.

En la pieza n¨²mero 9, centrada en la trama internacional de blanqueo, el magistrado recuerda que a¨²n est¨¢ pendiente que Suiza env¨ªe a Espa?a las obras de arte intervenidas al constructor David Marjaliza en un almac¨¦n de Ginebra, y que las autoridades de Panam¨¢ respondan a la comisi¨®n rogatoria remitida en su d¨ªa. En la n¨²mero 10, referida a los trabajos de reputaci¨®n online realizados por el experto inform¨¢tico Alejandro de Pedro para diferentes cargos p¨²blicos, apunta que ¡°est¨¢ en tr¨¢mite¡± la toma de declaraci¨®n a los supuestos implicados en el ayuntamiento de Gand¨ªa. En este parte de la investigaci¨®n tambi¨¦n queda por recibir los informes de la Guardia Civil sobre ¡°autoridades de la Comunidad de Madrid y Ayuntamiento de Madrid¡± que ¡°derivaron supuestamente los costes de su propaganda e imagen a los presupuestos p¨²blicos¡±.

Sobre la parte de la trama que supuestamente ama?¨® la concesi¨®n de conciertos para colegios gestionados por cooperativas, Velasco recuerda que a¨²n est¨¢ pendiente de analizar la documentaci¨®n remitida por la Comunidad de Madrid y que llegue al juzgado otra nueva solicitada a los ayuntamientos donde se levantaban los centros educativos. Tambi¨¦n propone que se elabore un informe pericial con todo esa documentaci¨®n y que en otro se cuantifiquen ¡°todas las prestaciones, servicios y obras que han sido objeto de doble facturaci¨®n a los cooperativistas¡± por Afedel, la empresa supuestamente utilizada por la trama para dichas irregularidades. Finalmente, en la pieza n¨²mero 14, la de la supuesta caja b del PP de Madrid, el juez recuerda que en marzo la Guardia Civil intervino ¡°copiosa informaci¨®n¡± en varios registros que hay a¨²n que analizar, junto a la requerida a la C¨¢mara de Cuentas de Madrid. Velasco se?ala que tambi¨¦n falta tomar declaraci¨®n a los responsables de las empresas de publicidad y eventos implicadas, y realizar ¡°cruces de datos y an¨¢lisis con sus declaraciones fiscales, sus recursos y trabajadores¡±.