Los inspectores educativos reclaman m¨¢s independencia del poder pol¨ªtico para trabajar
"Nos instrumentalizan como si fu¨¦semos la guardia pretoriana de la Administraci¨®n¡±, denuncia la asociaci¨®n mayoritaria
Son 1.500 funcionarios, aproximadamente uno por cada 400 profesores. Su labor como inspectores incluye evaluar el sistema educativo, asesorar o garantizar que se est¨¢n cumpliendo las leyes en los colegios e institutos y tambi¨¦n en las Administraciones. Pero no cuentan con la independencia suficiente del poder pol¨ªtico para hacerlo. As¨ª lo denuncia Carlos Utrera, presidente de la federaci¨®n Adide, a la que pertenecen el 60% de este grupo educativo. ¡°Con frecuencia se tiende a instrumentalizar la inspecci¨®n educativa como si fuese la guardia pretoriana de la Administraci¨®n¡±, ha denunciado.
Utrera ha intervenido en la comisi¨®n del Congreso de los Diputados que busca un pacto de Estado por la educaci¨®n in¨¦dito en Espa?a y en la que los partidos est¨¢n llamando a representantes de distintos sectores desde el pasado febrero. Ante sus se?or¨ªas, el presidente de Adide ha asegurado que la capacidad de intervenci¨®n de la inspecci¨®n frente a la Administraci¨®n es ¡°limitada¡± y ha pedido ¡°abrir un debate a nivel de Estado¡± para que este cuerpo de funcionarios dependa del Parlamento, en lugar de ser un grupo ligado al Ministerio de Educaci¨®n y a las comunidades aut¨®nomas. Reclama adem¨¢s que los inspectores rindan cuentas en el Congreso y en los parlamentos auton¨®micos, como ocurre en Alemania o Reino Unido, para ¡°promover su independencia, garantizar el desarrollo de sus planes y cumplir realmente con la misi¨®n constitucional de inspeccionar y homologar el sistema educativo para garantizar el cumplimiento de las leyes¡±.
Hasta el 70% de interinidad
"La Alta Inspecci¨®n no es una leyenda urbana"
Los diputados han preguntado ampliamente a Carlos Utrera por el papel de la inspecci¨®n y la denuncia que ha hecho de su falta de independencia. Entre otros, la diputada Marta Mart¨ªn, de Ciudadanos, que ha hecho referencia a un cuerpo muy espec¨ªfico, la Alta Inspecci¨®n. ¡°?Ha visto alguna vez un alto inspector educativo? He llegado a creer que son secretos, como la f¨®rmula de la Coca Cola?¡±, ha se?alado en la comisi¨®n. Utrera ha explicado que son 17 funcionarios ¨Cuno por cada comunidad aut¨®noma- que elige directamente el Gobierno, que cambian cuando hay cambio de Ejecutivo, que trabajan en paralelo a los inspectores educativos y no necesariamente son inspectores por oposici¨®n. A la Alta Inspecci¨®n de Catalu?a, por ejemplo, es a quien el Ministerio de Educaci¨®n ha encargado un informe sobre los libros de texto de historia de esa comunidad tras la denuncia de un sindicato de profesores que se?alaba que hay ¡°manipulaci¨®n¡± en esos manuales. ¡°La Alta Inspecci¨®n no es una leyenda urbana, existe¡±, ha se?alado el responsable de Adide. ¡°Pero desde nuestra asociaci¨®n pensamos que es un grupo que deber¨ªa ser ocupado por inspectores del cuerpo, que tienen un conocimiento m¨¢s exacto a nivel administrativo y de gesti¨®n¡±. ¡°Tienen un trabajo muy dif¨ªcil¡±, ha ahondado, ¡°porque a veces el Gobierno estatal coincide ideol¨®gicamente con el de esa comunidad, pero en ocasiones no y es cuando saltan chispas¡±. Seg¨²n su valoraci¨®n, ¡°hay problemas porque el Estado se toma la Alta Inspecci¨®n como un elemento disuasorio para que el otro no saque los pies del tiesto¡±.
Entre los aspectos que ¡°limitan¡± su trabajo, ha se?alado la figura de los inspectores accidentales, equivalente a los profesores interinos sin plaza fija en la Administraci¨®n. Son funcionarios que, sin haber pasado un proceso de oposiciones, son seleccionados en comisi¨®n de servicio renovable cada a?o para cubrir el puesto de inspector. Su n¨²mero var¨ªa ostensiblemente por comunidades aut¨®nomas. Utrera ha citado, entre otras, que en Galicia hay un 0% de accidentales ¡°porque no renuevan a los que se jubilan¡±, en Andaluc¨ªa son el 15%, el 30% en Madrid o hasta el 70% en el caso de Catalu?a ¡°donde hace a?os que no se han convocado oposiciones porque quieren desarrollar un cuerpo propio de inspectores¡±. Utrera ha explicado que un inspector accidental que tenga que elaborar un informe ¡°que diga lo contrario de lo que el consejero est¨¢ diciendo¡± se lo piensa dos veces. ¡°Es una situaci¨®n insostenible¡±, ha a?adido.
¡°La experiencia y capacidad de las personas que acceden a realizar funciones de Inspecci¨®n Educativa est¨¢ minusvalorada y desaprovechada¡±, seg¨²n el presidente de la federaci¨®n. Asegura que, en algunos landers alemanes, los inspectores eval¨²an los centros con informes p¨²blicos en los que incluyen recomendaciones y cambios necesarios. ¡°La subvenci¨®n de esos centros depende del informe de la inspecci¨®n, por lo que se los toman muy en serio¡±, ha explicado tras su intervenci¨®n a EL PA?S.
Adem¨¢s de reclamar un papel m¨¢s independiente para su colectivo, el responsable de la asociaci¨®n de inspectores ha solicitado otros cambios. Entre ellos, un incremento del presupuesto educativo que sit¨²e a Espa?a al l nivel de la media de la OCDE ¨C actualmente destina el 4,3% del PIB frente a un 5,2% de media de los pa¨ªses industrializados-. Con un incremento anual del 0,2% para situarse en el grupo del 25% de pa¨ªses que m¨¢s dinero dedican.
¡°Eligen Religi¨®n para subir la nota media¡±
Su asociaci¨®n solicita, adem¨¢s, que en Bachillerato no pesen igual todas las materias a la hora de calcular la nota media. Como ejemplo ha se?alado la asignatura de Religi¨®n, que volvi¨® a ser evaluable y cuenta para la media desde la aprobaci¨®n de la reforma educativa del PP, la LOMCE. ¡°Es cierto que alumnos que antes no optaban por ella, ahora la eligen porque les resulta m¨¢s f¨¢cil que otras y porque pueden subir la nota media m¨¢s f¨¢cilmente que con otras¡±.
Ha pedido reducir la tasa de repetici¨®n de curso o un cambio en el curr¨ªculo ¡°excesivamente cargado¡± sobre todo en educaci¨®n primaria, una etapa en la que, a su juicio, habr¨ªa que centrarse en ¡°la consolidaci¨®n de objetivos b¨¢sicos referidos al dominio de la lectura y la escritura, la expresi¨®n oral, la comprensi¨®n lectora¡±, entre otros.
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