Los polic¨ªas de la ¡®brigada pol¨ªtica¡¯ se acusan unos a otros del ¡®pendrive fantasma¡¯ del caso Pujol

El juez Juan Javier P¨¦rez tom¨® ayer declaraci¨®n como testigos a los comisarios jubilados Jos¨¦ Villarejo y Marcelino Mart¨ªn-Blas, as¨ª como a los antiguos jefes de la UDEF, los tambi¨¦n comisarios Manuel V¨¢zquez y Jos¨¦ Manuel Garc¨ªa Catal¨¢n, para conocer su versi¨®n sobre el origen del pendrive con datos financieros de Jordi Pujol Ferrusola que fue rechazado por el magistrado de la Audiencia Nacional, Jos¨¦ de la Mata, para evitar que contaminase su investigaci¨®n sobre el clan del expresidente de la Generalitat. Los cuatro agentes mantuvieron las versiones contradictorias entre si, que tres de ellos ya hab¨ªan dado en su d¨ªa en la Audiencia Nacional.

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El interrogatorio a todos ellos gir¨® en torno a las declaraciones que hizo el pasado 13 de septiembre el que fuera n¨²mero 2 de la Polic¨ªa, el comisario jubilado Eugenio Pino, imputado en la causa por prevaricaci¨®n, fraude procesal y falso testimonio. Este ccomisario asegur¨® entonces que fue el jefe de la Unidad de Asuntos Internos, Mart¨ªn Blas quien le facilit¨® el pendrive con una informaci¨®n que le dijo que proven¨ªa de la agencia de detectives M¨¦todo-3, aunque sin aclararle si era fruto de un registro judicial o facilitada por confidentes. El antiguo director adjunto Operativo (DAO) de la Polic¨ªa, se?alado como el presunto responsable de la llamada ¡®brigada pol¨ªtica¡¯, recalc¨® que este l¨¢piz de memoria estuvo en sus manos poco tiempo y que nunca lo abri¨® ni supo qu¨¦ datos concretos conten¨ªa sobre la familia del expresidente de la Generalitat. Tambi¨¦n declar¨® que Villarejo le ofreci¨® el mismo archivo a cambio de pagar a un confidente 500.000 euros.

Una versi¨®n que ayer desminti¨® rotundamente Mart¨ªn Blas y que, sin embargo, fue respaldada en gran parte por el comisario Villarejo, ambos se?alados tambi¨¦n como supuestos integrante de la pol¨ªtica patri¨®tica. El primero en declarar fue el exjefe de Asuntos Internos, quien respondi¨® durante 40 minutos a las preguntas de juez, fiscal y los abogados de las defensas y la acusaci¨®n. Seg¨²n coinciden en se?alar las fuentes jur¨ªdicas consultadas, Mart¨ªn Blas asegur¨® que no tuvo conocimiento de la existencia del pol¨¦mico ¡®pendrive¡¯ hasta que fue informado de su existencia una vez estallado el esc¨¢ndalo por el que fuera Comisario General de Polic¨ªa Judicial, Jos¨¦ S¨¢nchez Aparicio, y que ya entonces rechaz¨® ser el origen del mismo o de su contenido. El exjefe de Asuntos Internos neg¨® tambi¨¦n que hubiera mantenido una reuni¨®n con los comisarios Pino y Villarejo para hablar sobre la memoria inform¨¢tica, ¡°porque si no, hubiera levantado acta de la misma¡±, recalc¨® al juez. Ya en febrero pasado, Mart¨ªn Blas defendi¨® dicha versi¨®n en la Audiencia Nacional ante el juez De la Mata, donde tambi¨¦n declar¨® como testigo.

Su testimonio entr¨® en abierta contradicci¨®n con el que poco despu¨¦s dio el comisario Villarejo, quien respaldo ante el juez buena parte de lo que hab¨ªa declarado el director adjunto Operativo. As¨ª, insisti¨® en que la reuni¨®n con su superior y su compa?ero para hablar del pendrive existi¨®, aunque a?adi¨® que en la misma Mart¨ªn Blas le tendi¨® ¡°una trampa¡± para ridiculizarle ante el jefe de ambos. Villarejo admiti¨® que acudi¨® a dicho encuentro para comentar la posibilidad de conseguir informaci¨®n sobre la familia Pujol de un confidente a cambio de una cantidad de dinero. Asegur¨® que dicha cifra era 50.000 euros y no el medio mill¨®n que manifest¨® en septiembre el que fuera n¨²mero 2 de la Polic¨ªa. ¡°Eugenio [Pino] tiene muy mala memoria con los n¨²meros¡±, dijo para justificar la discrepancia. Seg¨²n el relato que hizo ayer, el ofrecimiento de dicha informaci¨®n se la hab¨ªan hecho un tal ¡°Robin¡± y un expolic¨ªa que trabajaba para la agencia de detectives M¨¦todo-3 y que, supuestamente, era confidente de Mart¨ªn Blas.

Los otros dos polic¨ªas que declararon ayer ante el juez Juan Javier P¨¦rez tampoco cambiaron el testimonio que ya hab¨ªan prestado anteriormente en la Audiencia Nacional por los mismos hechos. As¨ª, el comisario Manuel V¨¢zquez, que era el jefe de la Unidad de Delincuencia Econ¨®mica y Fiscal (UDEF) de la Polic¨ªa cuando se intent¨® incorporar la memoria inform¨¢tica al sumario de los Pujol, insisti¨® en que esta lleg¨® a sus manos a trav¨¦s del inspector jefe Bonificacio D¨ªez Sevillano, el otro polic¨ªa imputado en la causa, quien recientemente neg¨® dicho extremo. V¨¢zquez recalc¨® ante el juez que el consider¨® desde el primer momento el contenido del pendrive como ¡°material para investigar¡± y que la decisi¨®n de incorporarlo a la causa no fue inducida por el comisario Pino, sino que fue una decisi¨®n de los agentes de su unidad que estaban al frente de las pesquisas.

Por su parte, Garc¨ªa Catal¨¢n, quien tras la marcha del comisario V¨¢zquez se hizo cargo de forma interina de la UDEF, volvi¨® a asegurar que una segunda copia del pendrive apareci¨® en un caj¨®n de la unidad al hacer limpieza y que lo traslad¨® al juzgado, aunque no detall¨® por qu¨¦ lo hizo. Finalmente, tambi¨¦n compareci¨® la funcionaria que fue la secretaria del comisario Pino cuando ¨¦ste fue el n¨²mero 2 de la Polic¨ªa. Esta asegur¨® que no sab¨ªa nada de esa memoria inform¨¢tica en concreto y que durante el tiempo en que estuvo a las ¨®rdenes del DAO ella copiaba archivos inform¨¢ticos ¡°como un aut¨®mata¡±. Tambi¨¦n afirm¨® que no recordaba ninguna reuni¨®n concreta de su jefe con Mart¨ªn Blas y Villarejo.