Luz verde a la participaci¨®n de Espa?a en la defensa reforzada europea

El Consejo de Ministros autorizar¨¢ este viernes a los titulares de Defensa y Exteriores, Mar¨ªa Dolores de Cospedal y Alfonso Dastis, a comprometer la participaci¨®n de Espa?a en la cooperaci¨®n estructurada permanente (PESCO, por sus siglas en ing¨¦s) de la Uni¨®n Europea en materia de Defensa, seg¨²n ha confirmado la primera en Bruselas.

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Est¨¢ previsto que la adhesi¨®n de Espa?a a la cooperaci¨®n en defensa, con la que se quiere compensar el Brexit y demostrar que el proyecto de integraci¨®n europea sigue adelante, se firme el lunes y se apruebe formalmente por mayor¨ªa cualificada a mediados de diciembre. Finalmente, se incorporar¨¢n 21 pa¨ªses; incluidos todos los grandes de la UE, salvo el Reino Unido, por motivos obvios, y Polonia.

"Espa?a ha defendido desde el primer momento que el proyecto fuera inclusivo, que pudiera dar cabida a todos los pa¨ªses miembros, con independencia de sus capacidades militares. Pero eso no? nos puede hacer ser menos ambiciosos", ha explicado Cospedal al t¨¦rmino de la reuni¨®n de ministros de Defensa de la OTAN celebrada este jueves.

A diferencia de la entrada en el euro (condicionada a determinados par¨¢metros en materia de inflaci¨®n, deuda o d¨¦ficit p¨²blico), la participaci¨®n en el proyecto europeo de defensa no exigir¨¢ cumplir ning¨²n requisito, pero s¨ª asumir una veintena de compromisos cuya aplicaci¨®n evaluar¨¢ peri¨®dicamente la Alta Representante de la Pol¨ªtica Exterior y de Seguridad de la UE, Federica Mogherini. Los gobiernos de Berl¨ªn, Par¨ªs, Roma y Madrid, que han estado en el n¨²cleo duro de la negociaci¨®n, llegaron a la conclusi¨®n de que poner condiciones previas, como un determinado nivel de gasto militar, dejar¨ªa fuera a muchos pa¨ªses, incluida la propia Espa?a.

Los pa¨ªses que formen parte de la cooperaci¨®n estruturada en defensa se comprometer¨¢n a mejorar sus capacidades militares, a partir de proyectos multinacionales (con al menos tres empresas de dos o m¨¢s pa¨ªses) que podr¨¢n ser financiados con cargo al nuevo fondo europeo; a participar en las conferencias de generaci¨®n de fuerzas para las misiones militares de la UE, incluso las de alta intensidad (aunque no necesariamente a contribuir a las mismas); o a cumplir colectivamente, no de forma individual, el compromiso de la cumbre de la OTAN en Gales (2014) de destinar el 2% del PIB a los gastos militares y el 20% de los mismos a investigaci¨®n, desarrollo y adquisici¨®n de sistemas. Con esta f¨®rmula se ha buscado sortear la oposici¨®n de los pa¨ªses de la UE que no pertencen a la OTAN.

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