Abu Mazen en Espa?a: una visita no de Estado

Dos semanas despu¨¦s de que el presidente de Israel, Reuven Rivlin, visitara Madrid, este lunes lo hace el de la Autoridad Nacional Palestina, Mahmud Abbas, conocido por su nombre de guerra como Abu Mazen. La proximidad entre ambas visitas no es casual: Espa?a siempre ha querido mantener un equilibrio entre las dos partes enfrentadas en el conflicto que envenena Oriente Pr¨®ximo. Aunque el tratamiento que el Rey dispensa a sus dos hu¨¦spedes parezca similar, las sutiles diferencias son abismales en t¨¦rminos diplom¨¢ticos.

El presidente palestino no ser¨¢ recibido con honores de jefe de Estado, porque formalmente no lo es o al menos Espa?a no lo reconoce. Don Felipe le ofrecer¨¢ una comida en el Palacio Real, con discursos y decenas de invitados, pero ser¨¢ un almuerzo y no una cena de gala, como la que tuvo Rivlin. Tampoco recibir¨¢ la Llave de Oro de la Villa, privilegio reservado a los jefes de Estado, ni pronunciar¨¢ un discurso ante las Cortes Generales, reunidas en sesi¨®n solemne en el antiguo sal¨®n de plenos de la C¨¢mara alta. S¨ª que ser¨¢ recibido por la presidenta del Congreso, Ana Pastor, y podr¨¢ dirigirse a los diputados de la Comisi¨®n de Exteriores de la C¨¢mara baja. Y se reunir¨¢ con los l¨ªderes del PSOE, Pedro S¨¢nchez; Podemos, Pablo Iglesias, y Ciudadanos, Albert Rivera.

Consciente de estas diferencias, Abbas pedir¨¢ a Rajoy que Espa?a reconozca al Estado palestino, como han hecho 136 pa¨ªses. El Congreso lo aprob¨® por ampl¨ªsima mayor¨ªa en noviembre de 2014, pero no puso fecha al reconocimiento. Y los tiempos son fundamentales en diplomacia.

El 30 de octubre pasado, tres d¨ªas despu¨¦s de que el Parlament proclamase unilateral e ilegalmente la independencia, el Ministerio palestino de Exteriores difundi¨® una declaraci¨®n de apoyo a ¡°una Espa?a fuerte y unida¡± y subray¨® que ¡°el compromiso con la Constituci¨®n espa?ola y el di¨¢logo son la ¨²nica v¨ªa para resolver todos los asuntos internos espa?oles¡±.

La declaraci¨®n israel¨ª lleg¨® el 1 de noviembre. Su Ministerio de Exteriores mostr¨® su confianza en que la crisis interna en Espa?a se resolviera "r¨¢pida y pac¨ªficamente, mediante un amplio consenso nacional¡±. En Madrid caus¨® estupor: ?ni una menci¨®n a la Constituci¨®n? ?qu¨¦ significaba ¡°pac¨ªficamente¡±? ?es que alguien se planteaba resolverla violentamente?

Con sus palabras en Madrid, donde dijo que Espa?a es para Israel ¡°una ¨²nica entidad estatal soberana¡±, Rivlin quiso zanjar el asunto, pero en medios israel¨ªes se asegur¨® que el presidente tuvo que arrancar esta declaraci¨®n a Netanyahu bajo amenaza de cancelar su viaje a Espa?a.

Abbas recordar¨¢ a sus anfitriones la distinta reacci¨®n de unos y otros y la usar¨¢ de argumento para pedir relaciones diplom¨¢ticas plenas. Rajoy no se las dar¨¢, pero deber¨¢ agradecerle que el no-Estado m¨¢s reconocido del mundo negase toda legitimidad a la nonata rep¨²blica catalana.