El ¨²ltimo control de S¨¢nchez ¡®el descontrolado¡¯
El presidente de RTVE comparece antes de su pr¨®ximo relevo al frente de la entidad en una comisi¨®n tormentosa entre TV3 y Mortadelo
Si alguien ca¨ªdo del cielo esta ma?ana en el Senado ¡ªun ciudadano de visita, un corresponsal extranjero, un marciano¡ª se hubiera asomado a ver al compareciente de la comisi¨®n de las diez y media de la ma?ana quiz¨¢ habr¨ªa dicho: ?pero de d¨®nde han sacado a este t¨ªo? Era el presidente de RTVE, Jos¨¦ Antonio S¨¢nchez, respondiendo a las preguntas de los partidos en la sesi¨®n de control mixta, de diputados y senadores, sobre su trabajo. Vale que le hac¨ªan preguntas dif¨ªciles o a mala leche, para eso est¨¢n, pero qued¨® claro que a ¨¦l eso no le gusta demasiado. No es que fuera lo m¨¢s alejado de la figura de un servidor p¨²blico que responde a un control parlamentario, sino que replicaba con sarcasmo y chuler¨ªa como si estuviera en el bar. Y aun as¨ª seguramente est¨¦ a a?os luz del bar de la BBC. Adem¨¢s pronunciaba RTVE as¨ª: ¡°Erretuvee¡±. Esperabas a ver si lo dec¨ªa bien a la pr¨®xima, y nada. Y eso que es su empresa, de hecho lo dijo as¨ª, que era su tele.
La tele de todos, a la tercera pregunta, ya era suya. Respondi¨® as¨ª a las cr¨ªticas del senador de ERC Bernat Picornell sobre la falta de pluralidad de los informativos de TVE y c¨®mo se prepara para la campa?a electoral catalana: ¡°Le voy a decir lo que no haremos. Lo que no se va a hacer es disparar a la imagen del rey de Espa?a, ning¨²n presentador va a llamar mangantes sarnosos de mierda y cabrones a los espa?oles. Eso en la m¨ªa no. Ni tampoco en los programas infantiles se va a explicar que se encarcela independentistas o se quema la Constituci¨®n. Eso pasa en la suya, en la m¨ªa no¡±. Es enternecedor ver pelearse a TVE y TV3 a ver qui¨¦n manipula m¨¢s, se podr¨ªa hacer un MasterChef.
Este fue el nivel, y no se esperaba menos siendo quiz¨¢ la ¨²ltima comparecencia de S¨¢nchez -se supone que en febrero se acabar¨¢ el tinglado RTVE tal como lo conocemos- y con el mal ambiente acumulado en sus tres a?os en el cargo. En esta comisi¨®n ya se conocen de darse muchas tortas. Por eso debe de ser todo tan coloquial en las argumentaciones de S¨¢nchez, que se deshilachaban en coletillas como "en fin", "y tal", "y esas cosas", "y no s¨¦ qu¨¦", y mu en vez de muy. Tampoco dej¨® un participio sano. Esto impidi¨® disfrutar completamente de una sesi¨®n que por otra parte fue muy entretenida. Salieron enseguida las escuchas del caso Lezo de Ignacio Gonz¨¢lez y Eduardo Zaplana que hablan de que un tal Jos¨¦ Antonio S¨¢nchez actu¨® como ¡°intermediario en asuntos oscuros¡±, con un encuentro con el exfiscal jefe Anticorrupci¨®n, Manuel Moix, seg¨²n le acus¨® el diputado de Podemos Miguel Vila. ¡°Yo soy periodista. He comido con reyes, con pr¨ªncipes de la Iglesia, presidentes de Gobierno, papas y hasta con terroristas. Me ampara el secreto profesional. No tengo por qu¨¦ hacer p¨²blica mi agenda privada¡±, respondi¨® S¨¢nchez. No desminti¨® nada, aunque s¨ª recurri¨® a esa s¨®lida costumbre parlamentaria espa?ola de no contestar sino con otra acusaci¨®n: ech¨® en cara al diputado la cena de Pablo Iglesias con el empresario catal¨¢n Jaume Roures. Luego, m¨¢s tarde, s¨ª aclar¨®: ¡°Con quien como pertenece a mi intimidad. Pero jam¨¢s en mi vida he comido con el se?or Moix, no s¨¦ qui¨¦n es. ?Juro solemnemente que si entra por aqu¨ª no s¨¦ qui¨¦n es!¡±. Habr¨ªa estado bien que hubiera entrado, aunque es verdad que ya nadie se acuerda de ¨¦l.
S¨¢nchez miraba al suelo en las preguntas, con gesto tenso: un m¨¦dico habr¨ªa diagnosticado alergia al control. Le fastidiaba que le mentaran a Salvador Sostres, invitado al programa de Carlos Herrera ¨Cle pareci¨® ¡°oportuno¡± como se trat¨® la violencia machista el d¨ªa que le invitaron-; que le recordaran que TVE apenas inform¨® de la manifestaci¨®n del 18 de noviembre en Valencia ¨Cporque se muri¨® el fiscal Maza y no cab¨ªa, dijo-; y hasta se pic¨® con Mortadelo y Filem¨®n. Jos¨¦ Zaragoza, del PSC, le pregunt¨® por qu¨¦ en su d¨ªa el Telediario no sac¨® el tebeo de Ib¨¢?ez sobre B¨¢rcenas y en cambio s¨ª ahora uno de Trump. ¡°En mi televisi¨®n no hay censura, as¨ª que no se ha censurado¡±, contest¨® S¨¢nchez, y fue al contraataque con todo, en donde m¨¢s duele: acus¨® al PSOE de que TVE no inform¨®, cuando estaban ellos, de los inolvidables episodios de los agentes de la TIA sobre Juanito Batallas, una referencia al hermano de Alfonso Guerra, y Corrupci¨®n a mogoll¨®n con un tal Rulfi¨¢n, trasunto de Rold¨¢n. Cuando se ponen a sacar trapos sucios son terribles, salen hasta los Mortadelos.
Solo en el tramo final lleg¨® para S¨¢nchez el b¨¢lsamo tranquilizador de las intervenciones del PP. La mayor cr¨ªtica, contundente, argumentada, de este partido fue la siguiente: S¨¢nchez, cuidado con ¡°caer en la autocomplacencia¡± despu¨¦s del ¨¦xito y el excelente trabajo que est¨¢ haciendo. Si la tele de todos es de S¨¢nchez, el PP le defend¨ªa a ¨¦l como uno de los suyos -de hecho lo es, por confesi¨®n propia-. Es una cadena amiga de favores. La senadora Riolobos elogi¨®, en concreto, los ¨²ltimos programas de Informe Semanal, aunque en una licencia l¨ªrica le pusieron la m¨²sica de El exorcista a Puigdemont. ¡°Gracias se?ora Riolobos, tiene usted raz¨®n¡±, contest¨® S¨¢nchez con humildad. La senadora tambi¨¦n critic¨® los ¡°berrinches eternos¡± de los trabajadores de RTVE, que ya sufri¨® UCD en 1977 y luego solo el PP, ¡°nunca el PSOE¡±. Pero record¨® que los Telediarios son l¨ªderes desde hace 13 meses. ¡°Algo tendr¨¢ el agua cuando la bendicen¡±, resumi¨®.
Esta ajetreada pero tristemente previsible comisi¨®n es un patente ejemplo del sectarismo y los tics end¨¦micos de la pol¨ªtica espa?ola: solo eran bofetadas o peloteo, no hab¨ªa t¨¦rmino medio. Ni siquiera deber¨ªa ser normal que el PP no haga preguntas cr¨ªticas a este presidente, pero parece estar escrito en alg¨²n sitio que no. Todo es profundamente an¨®malo, pero aceptado como normal. Pone en evidencia el pecado original de la gesti¨®n de RTVE tal como se concibe con el PP, desde que en 2012 cambi¨® la ley de Rodr¨ªguez Zapatero y se volvi¨® al acaparamiento del ente desde el Gobierno. Para que esta comisi¨®n de control del presidente sea medio normal lo ideal ser¨ªa que nadie considere suyo a este se?or, y que tampoco nadie lo considere de otro. En principio, la ley aprobada en septiembre, cuando parec¨ªa que PSOE y Podemos har¨ªan grandes cosas juntos, lo har¨¢ posible. Prev¨¦ el cambio de la c¨²pula de RTVE, aunque posiblemente no ser¨¢ por concurso p¨²blico, la novedad introducida con Ciudadanos. Para eso deber¨ªa realizarse antes del 31 de diciembre y lo m¨¢s probable es que esta vez no dar¨¢ tiempo -s¨ª para la pr¨®xima renovaci¨®n de medio consejo dentro de tres a?os-, pero al menos a partir de febrero el Congreso estar¨¢ obligado a elegir nuevo presidente y consejo por mayor¨ªa absoluta con un m¨ªnimo de cuatro partidos. Las comisiones de control deber¨ªan empezar a ser bastante m¨¢s aburridas, un poquito menos descontroladas.
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