Detenida por atacar a su expareja con pipas de calabaza, a las que es al¨¦rgico
La mujer, de 24 a?os, est¨¢ en libertad, a la espera de un juicio por lesiones
Una mujer de 24 a?os ha sido detenida en Castell¨®n por arrojar a la cara de su expareja y padre de su hija de 14 meses pipas de calabaza, a las que es al¨¦rgico. El joven, de 23 a?os, abandon¨® corriendo su puesto de pescadero en el Mercado Central para acudir un centro de salud por miedo a sufrir una reacci¨®n que le impidera respirar. La arrestada, acusada de un presunto delito de lesiones, ha quedado en libertad hasta que salga la fecha del juicio.
El supuesto ataque se produjo el martes 21 de noviembre en el Mercado Central de la ciudad. ¡°Vino a la pescader¨ªa y me amenaz¨®. Me tir¨® en la cara parte de una bolsa de pipas de calabaza, a las que soy al¨¦rgico", rememora para EL PA?S Brian Barber¨¢, vecino del Grao de Castell¨®n. "Ella lo sab¨ªa. Me lo detectaron hace un tiempo, tras hacerme unas pruebas en el hospital¡±, a?ade. Tras el incidente, Brian asegura que volvi¨® nervioso a su puesto de trabajo. ¡°Le ped¨ª un cigarro a mi compa?ero y cuando sal¨ª a fumar ella me sigui¨® y me ech¨® de nuevo la bolsa de pipas de calabaza que llevaba en la mano. Empezaron a picarme los ojos, se me hinch¨® la cara¡ Le ped¨ª al vigilante que la echara de all¨ª y me fui corriendo al m¨¦dico¡±.
Brian fue atendido en el centro sanitario de especialidades Jaume I de Castell¨®n, el m¨¢s pr¨®ximo al Mercado, a apenas cinco minutos andando. ¡°Me pusieron una inyecci¨®n y me lavaron los ojos. Mi suerte fue que no respir¨¦ ni abr¨ª la boca cuando me ech¨® las pipas. Menos mal. Me habr¨ªa ahogado¡±, a?ade. El joven mantiene que con s¨®lo ingerir uno de estos frutos secos empieza a escocerle la boca, se le hincha la garganta y tiene problemas para respirar.
Juan, otro trabajador del mercado y vecino de puesto de Brian, tambi¨¦n fue testigo de los hechos. ¡°Su expareja vino aqu¨ª grit¨¢ndole ¡®Hijo de puta, te vas a cagar¡¯, y le tir¨® una bolsa de algo, luego supe que eran pipas de calabaza y que ¨¦l era al¨¦rgico. Ten¨ªa los ojos hinchados y hasta se quit¨® la ropa porque empez¨® a picarle todo¡±. Las c¨¢maras de vigilancia del Mercado Central, una de ellas situada justo encima del puesto donde trabaja Brian, ¡°lo grabaron todo¡±, a?ade este testigo.
Seg¨²n relata Brian, tras recibir asistencia sanitaria regres¨® a la pescader¨ªa hasta que concluy¨® la jornada laboral. Cuando sali¨® se fue a la comisar¨ªa de la Polic¨ªa Nacional para interponer denuncia contra su expareja, que fue detenida ese mismo d¨ªa. La joven ha sido puesta en libertad a la espera de juicio, seg¨²n fuentes policiales.
Brian tiene una orden de alejamiento de su expareja fruto de una denuncia de la joven por un supuesto delito de malos tratos, seg¨²n asegura ¨¦l mismo y confirma la Polic¨ªa. El joven mantiene que las agresiones por las fue denunciado "son completamente mentira¡± y a?ade que fue esto lo que le llev¨® a dejar la relaci¨®n sentimental que ambos manten¨ªan.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.