Ellas deciden d¨®nde para el bus
Vigo es pionera en un servicio que permite a las mujeres solicitar en qu¨¦ punto bajan del transporte p¨²blico
A pesar de ser viernes, la lluvia que no ha cesado de caer durante el d¨ªa deja en Vigo calles solitarias y centelleantes. Son las once y media de la noche, aunque la sensaci¨®n es de madrugada. El autob¨²s nocturno comienza su ruta casi vac¨ªo. En el asiento m¨¢s cercano al conductor se acomoda una veinte?era menuda que va escuchando m¨²sica. Ana Blanco va a bailar a Samil, una zona de la ciudad repleta de paseantes durante el d¨ªa y despoblada de noche. Es una de las primeras j¨®venes que el viernes estren¨® el servicio nocturno de autob¨²s que permite a las mujeres solicitar que este se detenga fuera de la parada. Vigo es pionera en Espa?a implantando esta iniciativa que pretende aumentar la seguridad de las mujeres y que ya estudian otras urbes.
¡°Vigo es una ciudad segura, pero todas las medidas que podamos tomar para hacerla m¨¢s segura, las vamos a tomar¡±, argument¨® el alcalde de la ciudad, Abel Caballero, en la presentaci¨®n del servicio. A partir de las diez y media de la noche y en todas las l¨ªneas urbanas, las usuarias pueden indicar al conductor d¨®nde quieren parar dentro de la ruta establecida. Cuando llegan al destino tienen que descender por la puerta delantera para que el ch¨®fer garantice que no hay ning¨²n riesgo para su seguridad, ni de agresi¨®n, ni vial, pues podr¨ªan no ser vistas por otros veh¨ªculos.
Unas mil personas
Blanco as¨ª lo hace, informa al conductor de que se bajar¨¢ un poco antes de su parada para apearse m¨¢s cerca de la discoteca a la que acude a bailar. Lo hace todos los viernes y confiesa que, especialmente cuando vuelve a su domicilio, muchas veces tiene miedo, as¨ª que la iniciativa le parece muy positiva: ¡°Ahora s¨¦ que puedo parar m¨¢s cerca de mi casa¡±, apunta.
El n¨²mero de personas que se desplaza en Vigo en los servicios nocturnos durante el fin de semana ronda las 1.000. La ciudad cuenta con zonas poco habitadas y otras de baja iluminaci¨®n, aunque el Concello no ha delimitado tramos m¨¢s o menos peligrosos en las rutas. Se trata de proporcionar una ¡°seguridad adicional¡± a las mujeres, de ah¨ª que se haya implantado en todas las l¨ªneas, aunque se haga efectivo especialmente en los llamados b¨²hos, ya que estos son los ¨²nicos que circulan toda la noche. Calculan que el retraso que se puede ocasionar en el servicio con estas paradas es m¨ªnimo.
Aunque a trazo grueso parece una medida positiva, el Concello de Vigo reconoce que tendr¨¢ que ir ¡°aprendiendo con la experiencia¡±, pues pueden presentarse situaciones que ampl¨ªen el objetivo del servicio, como que los hombres de avanzada edad tambi¨¦n puedan beneficiarse de ¨¦l. El Concello informa de que lo que s¨ª est¨¢ descartado ¡°es que pueda aplicarse a personas en sillas de ruedas ya que las paradas no cumplen con las medidas de seguridad necesarias¡±.
Ana Gonz¨¢lez, otra usuaria de las l¨ªneas nocturnas, cuenta que esta es una de las dudas que se han escuchado en las conversaciones de autob¨²s durante la semana previa al arranque: ¡°La gente se preguntaba c¨®mo iba a funcionar y si solo pod¨ªan usarlo chicas¡±. Sostiene que el servicio ha sido bien acogido a juzgar por los comentarios que ha escuchado.
Ella, despu¨¦s de trabajar, se queda muchos viernes en el centro de la ciudad tomando algo antes de volver a su domicilio. El pasado viernes as¨ª lo hizo y no dud¨® en usar el servicio para caminar lo menos posible desde donde se baja del autob¨²s hasta su casa. Recalca que le proporciona seguridad y considera que resulta bueno como medida disuasoria.
Las plataformas feministas no se muestran del todo conformes porque, aunque valoran la intenci¨®n de los Ayuntamientos, reiteran que el foco debe ponerse en los agresores y no en las v¨ªctimas. De esta forma reclaman que haya m¨¢s presencia policial en las calles, mejor alumbramiento p¨²blico, campa?as de sensibilizaci¨®n y, sobre todo, educaci¨®n en el respeto y la igualdad.
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