Las grietas del PSOE se ven mejor en provincias
El partido en Castilla y Le¨®n es un ejemplo del poco ¨¦xito de la labor de pacificaci¨®n de Pedro S¨¢nchez
El PSOE de Castilla y Le¨®n refleja las dos almas que conviven en el partido y que, en palabras de un miembro de la ejecutiva federal, se describen as¨ª: "Algunos creen que a¨²n estamos en guerra y que hay que imponer los resultados de la contienda", es decir, que el partido debe estar en manos de pedristas. Otros dirigentes, en cambio, creen que el ¨²nico modo de avanzar es integrar a quien se deje y sea necesario o aprovechable. El motivo para integrar es claro: a corto plazo quienes m¨¢s pierden son los marginados, pero a medio plazo un PSOE divivido tiene menos opciones de ganar elecciones.
El PSOE en Castilla y Le¨®n gan¨® por ¨²ltima vez unas elecciones aut¨®nomicas hace 35 a?os con Demetrio Madrid. Desde entonces el partido vive recogido en las provincias y mandando a sus mejores pol¨ªticos a Madrid. Uno de ellos fue el leon¨¦s Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero. Este a?o sin embargo ha surgido una oportunidad. El PP est¨¢ roto. El presidente Juan Vicente Herrera ha perdido las primarias, afloran los casos de corrupci¨®n y el PSOE parte con cierto repr¨ªs: tiene ya alcaldes en 6 de las 15 ciudades de m¨¢s de 20.000 habitantes.
El candidato socialista es Luis Tudanca, de 39 a?os, que empez¨® como secretario de Juventudes de Burgos en el 2000 y es apparatchik desde entonces. Ser¨¢n su segunda candidatura auton¨®mica despu¨¦s de 2015 y ve una oportunidad, pero sin optimismo: "No me gusta hacer expectativas irracionales, pero hay juego", dice. Las encuestas dejan al PP lejos de la mayor¨ªa absoluta, pero a¨²n muy por encima del PSOE. Todo quedar¨¢, admite Tudanca, en manos de Ciudadanos, cuya opci¨®n m¨¢s previsible ser¨¢ apoyar la lista m¨¢s votada. Es por tanto muy dif¨ªcil.
Castilla y Le¨®n es una federaci¨®n importante para Pedro S¨¢nchez. Gan¨® en las primarias en todas las provincias menos en ?vila. La presidenta del grupo del PSOE en Bruselas, Iratxe Garc¨ªa, el portavoz en el Senado, Ander Gil, y cinco miembros de la ejecutiva federal son castellanoleoneses. "El PSOE de Valladolid es el nuevo PSOE de Sevilla" lleg¨® a decir Tudanca tras las primarias. Deber¨ªa ser por tanto una comunidad ejemplar, unida y pac¨ªfica. Pero no lo es.
El error inicial
Los marginados acusan a la direcci¨®n de cometer un "error inicial": presentar candidatos afines a las secretarias provinciales en casi todas las provincias para amarrar todo el poder local. Pero el "efecto S¨¢nchez" no dur¨® y la jugada les sali¨® mal. Ahora el ambiente en cada provincia va desde la lealtad palanganera al desprecio. Las provincias m¨¢s fieles son solo tres: Burgos, Valladolid y Zamora. Otras dos -Le¨®n y Segovia- son amables en su ambig¨¹edad, mientras que Palencia, Salamanca, ?vila y Soria miran todo desde lejos. En estos 12 meses, la direcci¨®n apenas ha hecho gestos para atraerles. La mejor manera de definir su relaci¨®n es de constante sospecha mutua.
El secretario Tudanca define as¨ª esta tibieza provincial: "No tengo queja porque todos me est¨¢n ayudando a remar", dice, pero a?ade: "?Unos reman con m¨¢s ganas y otros con menos? Pues s¨ª. Pero es que esto es el PSOE, y el PSOE no es el Pa¨ªs de Oz". La excusa habitual es que el PSOE siempre ha sido as¨ª, por tanto ahora tambi¨¦n, aunque venga de la peor batalla y de los peores resultados electorales de su historia reciente y la necesidad de reconstruir sea urgente. "Pedro S¨¢nchez es hoy un l¨ªder bien preparado para la ¨²ltima guerra, pero no para la pr¨®xima", dice un ex dirigente cercano a Ferraz.
En Castilla y Le¨®n, la calma ha llegado por presi¨®n y miedo. La secretaria de Organizaci¨®n, Ana S¨¢nchez, vive con una leyenda negra que le precede y que se anima a cultivar. Llama "Suiza" a su secretario auton¨®mico, Tudanca, por su falta de posicionamientos org¨¢nicos. Pero no hay problema: ella se encarga de dejar las cosas claras. Su ¨¦xito est¨¢ ah¨ª: ni una primarias entre las 15 ciudades de m¨¢s 20.000 habitantes y la presidencia de la comunidad. Nadie se atreve a sacar la cabeza. El pasado 28 de octubre, tras ganar por los pelos el congreso provincial en Zamora, pidi¨® en Facebook "mano dura" contra la "gentuza", en referencia evidente a compa?eros de partido. Ana S¨¢nchez cerraba su mensaje con una frase de su amiga Adriana Lastra, vicesecretaria general del PSOE: "Ni olvido ni perd¨®n".
'Tudanca est¨¢ muerto'
El secretario auton¨®mico recoge as¨ª sus frutos: "Yo me he tenido que tragar todo el a?o en medios nacionales y auton¨®micos titulares de 'Tudanca est¨¢ muerto', 'no tiene apoyo'. Y luego candidato ¨²nico a secretario general y candidato ¨²nico a la presidencia de la junta", dice Tudanca. Pero esta gloria de candidato total oculta el problema real: su oportunidad para ser presidente pasa por una proeza. Sin las filas prietas y firmes, sin todos los remos disponibles, es casi imposible. La apuesta de S¨¢nchez de ser el partido m¨¢s votado en toda Espa?a en las municipales y auton¨®micas necesita adem¨¢s de cada voto.
Los cr¨ªticos se han retirado, pero no han desaparecido. La victoria clara de S¨¢nchez y la posterior falta de di¨¢logo les ha llevado al gallinero org¨¢nico. Solo una cierta conexi¨®n con la secretar¨ªa de Organizaci¨®n del partido ha frenado cismas mayores. Por ahora observan y traman. En palabras de un importante dirigente local cr¨ªtico: "Ah¨ª tienen todo el barbecho". Es decir, si se creen tan buenos, que compitan solos. Su silencio p¨²blico ante decisiones que creen err¨®neas significa que no quieren servir como excusa ante posibles derrotas electorales. Si llega el fracaso, todos lo intuyen, los machetes saldr¨¢n de los cinturones. En un ambiente hostil quien m¨¢s tiene que perder es el candidato a las siguientes elecciones, las generales de 2020.
La importancia de estos detalles internos es min¨²scula para el ciudadano, pero el partido se resiente. Hay un lema hist¨®rico en el PSOE: cuando estamos demasiados preocupados por cuestiones internas, perdemos. La falta de entusiasmo moment¨¢neo por el PSOE en toda la sociedad refleja la falta de vigor en sus filas y cuadros. Desde la direcci¨®n piden algo m¨¢s de tiempo, a pesar de que ha pasado un a?o: "El PSOE nunca hab¨ªa vivido algo as¨ª", dice un miembro de la ejecutiva federal.
Tantas primarias para nada
La falta de primarias en Castilla y Le¨®n dice tambi¨¦n poco a favor del nuevo PSOE donde todo lo deb¨ªan decidir los militantes. Despu¨¦s del verano, vendr¨¢n las primarias para los n¨²meros uno y el resto de miembros de la lista en cada provincia. Las provincias cr¨ªticas pueden intentar que sus militantes voten en contra de los nombres que preferir¨ªa la ejecutiva auton¨®mica. Por ahora, Castilla y Le¨®n vive en el sobrentendido de que nadie tocar¨¢ las listas que salgan de cada provincia. Pero no hay ninguna garant¨ªa si no se respetan los acuerdos no escritos de poner a candidatos de todas las facciones. La ¨²ltima palabra la tienen en Ferraz. "Si tenemos primarias, tiene que ser como algo normal. Si cada vez que hay primarias, supone un trauma, es que este partido es muy masoquista", dice un miembro de la ejecutiva.
Tras la realizaci¨®n de todas las entrevistas para este reportaje, Pedro S¨¢nchez estuvo en Soria. El alcalde, Carlos Mart¨ªnez, no est¨¢ alineado con la direcci¨®n actual. S¨¢nchez iba all¨ª en "visita privada" que al final se convirti¨® en un paseo p¨²blico y unas sorprendentes declaraciones "de respaldo" al alcalde. S¨¢nchez quiso incluso presumir de uni¨®n de todas las facciones -afines y cr¨ªticos- y le qued¨® una frase enigm¨¢tica: "Representan el nuevo PSOE, un PSOE que recoge lo mejor del PSOE de siempre, el tradicional pero en las nuevas generaciones que ellos representan demuestran el compromiso con su tierra", dijo S¨¢nchez en una frase dif¨ªcil de entender y quiz¨¢ algo improvisada.
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