La misteriosa ¡®reencarnaci¨®n¡¯ de un pazo en Galicia
La Xunta investiga el hallazgo de supuestos restos de una casa se?orial protegida del siglo XVI en una mansi¨®n de nueva construcci¨®n
Un flamante pazo a medio construir que se ofrece por Internet, un sospechoso escudo de armas y unas ruinas protegidas de las que nadie ha vuelto a saber nada. Estos son los ingredientes del misterio que estos d¨ªas intentan esclarecer los responsables de Patrimonio de la Xunta de Galicia, alertados de que los restos de un pazo levantado en el siglo XVI en el ayuntamiento de Negreira (A Coru?a) han aparecido supuestamente reencarnados en una moderna mansi¨®n ubicada en Abegondo (A Coru?a), a unos 75 kil¨®metros de distancia, y puesta a la venta por 750.000 euros. ¡°Esto tiene nombre y se llama expolio¡±, sentencia el arquitecto Carlos Henrique Fern¨¢ndez Coto, portavoz de la Asociaci¨®n para a Defensa do Patrimonio Cultural de Galicia (Apatrigal) que destap¨® la intriga.
Fue un seguidor de esta agrupaci¨®n de apasionados del patrimonio quien hace dos meses se top¨® en la Red con el anuncio en el que una inmobiliaria ofrec¨ªa un pazo ¡°tra¨ªdo desde Negreira y vuelto a construir aqu¨ª¡±, relata Fern¨¢ndez Coto. El reclamo inclu¨ªa una imagen de un escudo que Apatrigal identifica con el que luc¨ªa la casona de Reib¨®, una coincidencia que para esta asociaci¨®n significa el certificado de muerte del pazo, por lo que propondr¨¢ su inclusi¨®n en la denominada Lista Negra que confecciona la organizaci¨®n estatal Hispania Nostra con los ¡°bienes imposibles de recuperar¡±.
La Conseller¨ªa de Cultura de la Xunta ha abierto un expediente para averiguar si es cierto que las ruinas de Reib¨®, recogidas tanto en el Inventario General del Patrimonio Cultural de Galicia como en el cat¨¢logo de protecci¨®n del plan urban¨ªstico de Negreira, han sido movidas de su emplazamiento original. La Ley de Patrimonio Cultural de Galicia, en su art¨ªculo 65, exige para ¡°cualquier intervenci¨®n¡± en bienes catalogados una autorizaci¨®n administrativa, explican fuentes de este departamento. Y de momento no est¨¢ claro si ese permiso se emiti¨®.
Del pazo de Reib¨® que se alzaba en la parroquia de Li?aio de Negreira, a 20 kil¨®metros de Santiago, se ha sabido poco o nada en los ¨²ltimos 20 a?os. Hay que bucear en la hemeroteca y en los libros de historia para descubrir que fue fundada por el noble Gonzalo Mu?iz en el siglo XVI y que a mediados de los ochenta sus vestigios de esplendor sufr¨ªan un completo abandono, con sus muros medio derruidos cubiertos de zarzas y los escudos de armas postrados en el suelo, tal y como denunciaba el historiador Amancio Li?ares Giraut en La Voz de Galicia en 1985. Poco despu¨¦s, cuenta hoy Li?ares, las piedras y los blasones ¡°desaparecieron¡± de la casa se?orial que, asegura, a¨²n estaba habitada en los a?os cincuenta.
Las nobles ruinas de Reib¨® s¨ª siguieron en pie hasta hace solo unos d¨ªas en el cat¨¢logo de bienes protegidos del Ayuntamiento de Negreira y en la gu¨ªas patrimoniales y tur¨ªsticas de Galicia. Tras la denuncia de la asociaci¨®n en defensa del patrimonio, la Xunta ha retirado de su p¨¢gina web de Turismo las referencias al pazo fundado por Gonzalo Mu?iz y los anuncios en Internet sobre la mansi¨®n de Abengondo tambi¨¦n se han volatilizado.
El Servicio de Urbanismo del Ayuntamiento de Negreira, a petici¨®n de la Conseller¨ªa de Cultura, elabora ahora un informe sobre las huellas del desaparecido pazo de Reib¨® en los archivos municipales. Seg¨²n este departamento, los aviones estadounidenses que tras la Segunda Guerra Mundial recorrieron Espa?a para cartografiarla registraron en 1956 que esta casa se?orial ¡°ya estaba entonces en ruinas¡±, abandono que fue anotado en el plan urban¨ªstico de 1999. El t¨¦cnico Alfredo Varela deduce que de Reib¨® lo que se ha podido trasladar a la mansi¨®n de Abegondo son ¡°como mucho un par de piedras y alg¨²n elemento singular como sus dos escudos¡±, porque ni la configuraci¨®n ni la volumetr¨ªa de ambas construcciones tienen nada que ver.
El pazo en el que se presuntamente se han reencarnado las ruinas catalogadas se alza en un gran predio de la parroquia de Crendes, en Abegondo, a unos 20 kil¨®metros de A Coru?a y junto a la Fraga de Cecebre que el escritor Wenceslao Fern¨¢ndez Fl¨®rez universaliz¨® en El bosque animado. Los vecinos cuentan que lleva ¡°un mont¨®n de a?os¡± en construcci¨®n, ¡°quiz¨¢s veinte¡±, pero este peri¨®dico no ha logrado contactar directamente con su due?o para que ofrezca su versi¨®n de los hechos. Desde la Asociaci¨®n para a Defensa do Patrimonio Cultural de Galicia no entienden c¨®mo nadie ha dado la voz de alarma antes: ¡°?Los trasladaron de noche? ?Los vecinos no se enteraron? ?No se enter¨® Negreira de que se llevaron un pazo catalogado?¡±, se preguntan sus responsables.
Fe de errores. Una primera versi¨®n de este texto recog¨ªa por error que el segundo apellido del historiador Amancio Li?ares es Lista cuando lo correcto es Giraut.
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