El Brexit anima a m¨¢s brit¨¢nicos a querer ser espa?oles

Solo 166 brit¨¢nicos solicitaron la nacionalidad espa?ola en los diez primeros meses de este a?o, seg¨²n datos de la Direcci¨®n General del Registro y el Notariado. Es una cifra escasa, si se compara con los 10.067 marroqu¨ªes o los 2.001 venezolanos, pero m¨¢s que triplica los 50 solicitantes de 2015, el a?o anterior al refer¨¦ndum del Brexit, y convierte a los brit¨¢nicos en los cuartos ciudadanos comunitarios, tras rumanos, italianos y b¨²lgaros, que m¨¢s quieren ser espa?oles.

Las solicitudes para adquirir la nacionalidad espa?ola por residencia (lo que implica llevar una d¨¦cada viviendo legalmente en Espa?a) han ca¨ªdo dr¨¢sticamente entre los ciudadanos comunitarios. Si en 2015 fueron 4.948, en 2017 se redujeron a solo 1.687, menos de la mitad. Especialmente acusada ha sido la reducci¨®n de las solicitudes entre los nacionales de los pa¨ªses del Este que se incorporaron a la Uni¨®n Europea en la pasada d¨¦cada: Ruman¨ªa (2.340 a 973), Bulgaria (815 a 193) o Polonia (354 a 101).

Estos datos no son exhaustivos, advierte la Direcci¨®n General del Registro y el Notariado, ya que solo incluyen los expedientes iniciados con el antiguo procedimiento (antes de noviembre de 2015) y los presentados posteriormente por v¨ªa electr¨®nica, pero no las solicitudes presenciales. El Ministerio de Justicia reconoce que se arrastra un monumental retraso en la tramitaci¨®n de los expedientes de nacionalidad (m¨¢s de 400.000 pendientes) y prepara un plan de choque para ponerse al d¨ªa.

No obstante, los expertos consideran que estos datos, aunque parciales, marcan una tendencia. Y esta es inequ¨ªvoca: si en 2015 la brit¨¢nica era la s¨¦ptima nacionalidad en n¨²mero de solicitudes, empatada con la alemana, este a?o es la cuarta y la ¨²nica de la UE que crece respecto a hace tres a?os. Espa?a es el pa¨ªs de la Uni¨®n donde m¨¢s brit¨¢nicos residen, unos 250.000, aunque la cifra se ha reducido dr¨¢sticamente respecto a hace un lustro, cuando se contabilizaban casi 400.000. Tan espectacular reducci¨®n se atribuye tanto a la ca¨ªda del valor de la libra, que ha recortado el poder adquisitivo de los pensionistas residentes en Espa?a, como a la depuraci¨®n de las estad¨ªsticas.

A¨²n as¨ª, la incertidumbre pesa sobre el futuro de la colonia brit¨¢nica en Espa?a, sobre todo si el acuerdo de salida de la UE entre el Gobierno de Theresa May y la UE no es ratificado por el Parlamento brit¨¢nico y el 30 de marzo del a?o pr¨®ximo se produce un Brexit sin anestesia.

La primera consecuencia del divorcio entre la UE y el Reino Unido es que los ciudadanos brit¨¢nicos perder¨¢n la condici¨®n de comunitarios y, en consecuencia, no podr¨¢n votar en las elecciones europeas y municipales del 26 de mayo de 2019. Ni votar ni ser elegidos. Por lo que no podr¨¢n presentarse los actuales 37 concejales que tienen nacionalidad brit¨¢nica (19 en la Comunidad Valenciana, ocho en Andaluc¨ªa y el resto en Canarias, Baleares, Catalu?a, Castilla y Le¨®n, Castilla-La Mancha y Murcia). Representan el 43,5% de los extranjeros elegidos en las municipales de 2015, seg¨²n datos recopilados por Ciudadanos, que ha pedido la adopci¨®n de medidas urgentes para garantizar que no pierden sus derechos pol¨ªticos.

M¨¢s importancia tiene para los brit¨¢nicos conservar otros derechos, como los de residencia, trabajo o asistencia sanitaria. Aunque todos ellos est¨¢n protegidos en el acuerdo de retirada, siempre que este no acabe naufragando, la ¨²nica forma de garantizar por completo todos los derechos asociados a la ciudadan¨ªa europea es adquirir la nacionalidad de un pa¨ªs comunitario.

Espa?a admite la doble nacionalidad con los pa¨ªses latinoamericanos y con otros con especial vinculaci¨®n hist¨®rica, como Guinea Ecuatorial o Filipinas, adem¨¢s de Andorra y Portugal, pero no con el Reino Unido. En teor¨ªa, los brit¨¢nicos que adquieren la nacionalidad espa?ola deben renunciar a la suya. En la pr¨¢ctica, no se controla si alguien lleva dos pasaportes en el bolsillo.

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