La fiscal¨ªa rectifica y reconoce como menor a una ni?a que convirti¨® en adulta

La fiscal¨ªa ha rectificado un decreto con el que convirti¨® en adulta a una ni?a marroqu¨ª de 16 a?os. La decisi¨®n, tomada a finales de octubre, dej¨® a la ni?a en la calle. En el momento en el que se le comunic¨® su mayor¨ªa de edad, la Comunidad de Madrid la sac¨® del centro de menores donde estaba acogida. ¡°Un educador me dio un abono de metro con tres viajes y la direcci¨®n de un albergue [de personas sin hogar]¡±, cont¨® la ni?a a EL PA?S el pasado 1 de noviembre.

La rectificaci¨®n, con fecha de 3 diciembre, deja sin efecto el decreto anterior y reconoce ahora que Samira, el nombre ficticio que eligi¨® para contar su historia, tiene, efectivamente, 16 a?os y medio. Es la edad que ella defendi¨® que ten¨ªa desde que desembarc¨® de una patera en C¨¢diz el pasado mes de julio. Es tambi¨¦n la edad que atestiguan su partida de nacimiento y una copia del libro de familia que la madre le envi¨® despu¨¦s desde Marruecos.

El nuevo escrito del ministerio fiscal, que tiene en cuenta ahora sus documentos, tambi¨¦n recoge las dudas que arrojan las pruebas a las que se someti¨® a la menor para decretar su mayor¨ªa de edad, una exploraci¨®n f¨ªsica, una radiogaf¨ªa de la mu?eca y otra del maxilar.

El fiscal convoc¨® al m¨¦dico forense que elabor¨® el informe en el que afirm¨® que la ni?a ten¨ªa 19 a?os, con un margen de error de 12 meses hacia arriba o hacia abajo. El m¨¦dico present¨® ante el fiscal una nueva evaluaci¨®n que concluy¨® que la radiograf¨ªa del maxilar realizada no puede usarse en este caso para ¡°valorar una edad de maduraci¨®n superior a los 18 a?os¡±. El nuevo informe tambi¨¦n mantiene que la prueba radiol¨®gica de la mu?eca, aunque ¡°permite establecer una edad superior a los 18 a?os¡±, arroja un margen de error de 18 meses y no de 12.

Estos ex¨¢menes m¨¦dicos llevan a?os siendo criticados porque a pesar de su amplio margen de error continuan siendo el principal instrumento para determinar el futuro de los j¨®venes migrantes que llegan a Espa?a. Si el ni?o es menor ser¨¢ protegido hasta que cumpla los 18 a?os, pero si se le considera adulto se enfrentar¨¢ a la irregularidad y a la posibilidad de ser expulsado a su pa¨ªs.

La rectificaci¨®n poco com¨²n de la fiscal¨ªa la provoc¨® Fundaci¨®n Ra¨ªces, dedicada a la defensa de ni?os y j¨®venes en riesgo de exclusi¨®n. La noche del 1 de noviembre, cuando supo que la ni?a no ten¨ªa donde dormir, la organizaci¨®n llev¨® el caso a un juzgado de guardia que oblig¨® a la Comunidad de Madrid a reingresarla inmediatamente en el centro de acogida hasta que se aclarase definitivamente su edad. ¡°El caso de Samira es un claro ejemplo de c¨®mo el sistema de protecci¨®n a la infancia desprotege a los ni?os y ni?as que nos llegan solos al convertirles en mayores de edad, en el marco de un procedimiento sin garant¨ªas¡±, denuncia Lourdes Reyz¨¢bal, presidenta de Ra¨ªces.

Samira, que aquella noche en el juzgado lloraba nerviosa sin saber qu¨¦ pasar¨ªa con ella, dice estar ¡°muy contenta¡± con que hayan reconocido que dec¨ªa la verdad. La ni?a, sin embargo, pide que la saquen ya del centro de primera acogida de Hortaleza, donde est¨¢ desde este verano conviviendo con decenas de ni?os que duermen en los suelos de los pasillos. ¡°Quiero irme a otro lugar, hay much¨ªsimos problemas all¨ª. Somos tantos que nadie se ocupa de m¨ª¡±, se queja. La Comunidad de Madrid, que, tras volver a ser declarada menor de edad, solicit¨® oficialmente la tutela de Samira el 9 de enero, asegura que ya est¨¢ buscando ¡°un recurso apropiado¡± para la ni?a.

El joven maroqu¨ª que traduce las palabras de Samira pas¨® por una situaci¨®n parecida el a?o pasado. ¡°Me dejaron en la calle despu¨¦s del decreto del fiscal que dec¨ªa que era mayor de edad cuando yo ten¨ªa 16 a?os. Si no llego a saber moverme por la ciudad no s¨¦ qu¨¦ habr¨ªa sido de mi. Ahora un juez ha vuelto a decir que soy menor¡±, explica el chico. ¡°No puede ser que dependan de una organizaci¨®n como la nuestra para que se defiendan sus derechos¡±, alerta Reyz¨¢bal que tambi¨¦n llev¨® a los tribunales el caso de este joven.

A pesar de las dudas que levanta el protocolo para establecer entre los migrantes qui¨¦n es y qui¨¦n no un ni?o, las fiscal¨ªas territoriales abrieron 5.600 expedientes de determinaci¨®n de edad en Espa?a a lo largo de 2017, casi el doble que el a?o anterior. Un 40% de los interesados fueron declarados adultos y, en consecuencia, se les dej¨® fuera del sistema de protecci¨®n.