Jordi S¨¤nchez y la Fiscal¨ªa chocan por el delito de rebeli¨®n

El exl¨ªder de la ANC Jordi S¨¤nchez ha admitido este jueves en el juicio del proc¨¦s que durante la concentraci¨®n ante la sede de la Consejer¨ªa de Econom¨ªa el 20 de septiembre de 2017 hubo actos de ¡°violencia¡±, en concreto, da?os diversos a seis veh¨ªculos de la Guardia Civil, pero ha rechazado que fueran fruto de ¡°un intento continuado de asalto¡± para impedir la labor de los agentes. Ese episodio es el pilar fundamental en el que la Fiscal¨ªa sostiene la acusaci¨®n de rebeli¨®n contra los dos l¨ªderes de las asociaciones civiles que se sientan en el banquillo (S¨¤nchez y el presidente de ?mnium Cultural, Jordi Cuixart). El que fuera presidente de la ANC en aquella fecha consigui¨® con su comparecencia sembrar dudas sobre el alcance de la violencia registrada ese d¨ªa y la responsabilidad que pudieran tener en ella los promotores de la concentraci¨®n.

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El interrogatorio de la Fiscal¨ªa este jueves al expresidente de la Assemblea Nacional Catalana ha sido la m¨¢xima expresi¨®n que se ha visto hasta ahora en el juicio a los dirigentes independentistas de la diferencia de relatos de los cap¨ªtulos ¨¢lgidos del proc¨¦s. El careo se centr¨® en la concentraci¨®n del 20 de septiembre ante la sede de la Consejer¨ªa de Econom¨ªa, donde se estaba produciendo un registro por orden del juez que investigaba los preparativos del refer¨¦ndum. Lo que para la Fiscal¨ªa fue una movilizaci¨®n promovida ¡°para impedir¡± la labor de la Guardia Civil, y en la que los manifestantes no dudaron en emplear violencia para lograr su objetivo, para S¨¤nchez fue una concentraci¨®n ¡°en protesta¡± por la operaci¨®n judicial que tuvo m¨¢s ¨¦xito del esperado y a los convocantes se les fue de las manos.

Los matices entre ambos relatos son muy importantes porque son los que determinar¨¢n si hubo o no delito de rebeli¨®n, de sedici¨®n o cualquier otro. S¨¤nchez ha admitido que se registraron ¡°momentos de tensi¨®n, algunos abucheos a la polic¨ªa¡±, pero que el ambiente mayoritario era ¡°pac¨ªfico, festivo¡±. Seg¨²n su relato, la concentraci¨®n empez¨® a primera hora de la ma?ana cuando los medios de comunicaci¨®n comenzaron a difundir la operaci¨®n judicial y, tras su llamamiento a trav¨¦s de redes sociales y entrevistas en radios, la movilizaci¨®n fue en aumento. Lleg¨® a haber alrededor de 50.000 personas. ¡°Ni nosotros lo esper¨¢bamos. Cuando decidimos convocar pedimos autorizaci¨®n para una movilizaci¨®n de 2.000 personas¡±, explic¨®.

El relato de S¨¤nchez incluye varias conversaciones con el teniente de la Guardia Civil que estaba a cargo del dispositivo de seguridad, el exconseller de Interior Joaquim Forn (tambi¨¦n acusado de rebeli¨®n) y los jefes de los Mossos. Seg¨²n su versi¨®n, las fuerzas policiales le pidieron ayuda para realizar un pasillo por el que pudiera entrar y salir la comitiva judicial. Y se hizo. Ante la dimensi¨®n que estaba tomando la concentraci¨®n, S¨¤nchez fue requerido para que los manifestantes se desplazaran unos 100 metros y dejaran libres los aleda?os de la Consejer¨ªa. ¡°Les dije que no me ve¨ªa capaz. Que eso era una cuesti¨®n de orden p¨²blico, que no era mi responsabilidad¡±, ha explicado. Tras ese intento, la ¡°protesta¡± sigui¨® desarroll¨¢ndose en el mismo sitio hasta la madrugada.

El relato del fiscal pone el acento en los ¡°graves da?os¡± que sufrieron siete coches (S¨¤nchez dice que fueron seis) de la Guardia Civil que estaban aparcados ante la Consejer¨ªa. En esos destrozos de los veh¨ªculos policiales se apoya gran parte de la acusaci¨®n contra S¨¤nchez y Cuixart. Las im¨¢genes exhibidas muestran unos veh¨ªculos con los logotipos del cuerpo despegados, ruedas pinchadas, cristales rotos y abolladuras. S¨¤nchez admiti¨® esos da?os. ¡°Los conden¨¦ en su d¨ªa y los conden¨® hoy de nuevo¡±, dijo, pero los consider¨® hechos ¡°puntuales¡± que no describen la situaci¨®n que se vivi¨®. ¡°No hubo riesgo f¨ªsico para la integridad de ninguna persona ni se impidi¨® la labor de la comitiva judicial¡±, sostuvo. ¡°Se ha intentado generar un relato de que hubo un intento continuado de asalto y es falso¡±, a?adi¨® S¨¤nchez, que recuerda que la concentraci¨®n del 20 de septiembre de 2017 se convoc¨® bajo el lema ¡°Defendamos las instituciones¡±, al que se sumaron los sindicatos UGT y CC OO, todas las universidades p¨²blicas catalanas y los colegios de abogados, entre otros.

Durante el interrogatorio, el abogado de S¨¤nchez expuso im¨¢genes en las que se ve ese pasillo que los voluntarios de la ANC organizaron a petici¨®n de los Mossos y la Guardia Civil. Tambi¨¦n, a propuesta del abogada de Cuixart, se reprodujo un v¨ªdeo en el que se ve a S¨¤nchez hablando con el teniente de la Guardia Civil a las 20.53 dentro del edificio. Seg¨²n su versi¨®n, el agente le llam¨® para que le ¡°ilustrara¡± de c¨®mo estaba discurriendo la manifestaci¨®n porque ¨¦l no hab¨ªa estado fuera en todo el d¨ªa. ¡°Esas im¨¢genes demuestran la cordialidad y normalidad¡±, dijo el acusado.

El fiscal le reproch¨® que no desconvocara la concentraci¨®n cuando se percat¨® hab¨ªa superado sus previsiones o cuando se enter¨® de los da?os en los veh¨ªculos, pero S¨¤nchez sostuvo que no vio razones porque la comitiva judicial segu¨ªa haciendo su trabajo. Tal y como hab¨ªan acordado con las autoridades, ¨¦l y Cuixart pidieron a los manifestantes que se marcharan pasadas las 0.00 de la noche. Lo hicieron subidos a un coche de la Guardia Civil. El presidente de la ANC, seg¨²n cont¨®, hab¨ªa anunciado al teniente responsable que lo har¨ªa as¨ª. ¡°Suba, suba¡±, le invit¨® aquel. Una versi¨®n que tendr¨¢ que verificar el agente, que est¨¢ citado como testigo.