El Congreso podr¨¢ investigar el pasado econ¨®mico y curricular de los diputados
La Mesa de la C¨¢mara baja deja aprobadas para la XIII legislatura unas normas y un C¨®digo de Conducta m¨¢s duro y exigente con las actividades de los parlamentarios
El nuevo Congreso que salga tras las elecciones del 28-A podr¨¢ investigar y verificar las actividades que hayan desarrollado en el pasado los electos diputados y que les hayan proporcionado ingresos econ¨®micos. De oficio o por motivo de una denuncia, incluso an¨®nima. Y sus sociedades patrimoniales. La ampliada declaraci¨®n de intereses econ¨®micos afectar¨¢ tambi¨¦n a posibles regalos u obsequios. Son algunas de las novedades del C¨®digo de Conducta aprobado en la ¨²ltima Mesa del Congreso por impulso de la actual presidenta, Ana Pastor.
El Grupo de Estados contra la Corrupci¨®n (Greco) es un ¨®rgano del Consejo de Europa creado en 1999 para mejorar la lucha contra la corrupci¨®n de sus actuales 47 estados miembros. Su primer informe, ya con Espa?a dentro, data de 2013 y en el mismo ya incluy¨® una serie de recomendaciones sobre las carencias que evidenci¨® en el Parlamento espa?ol. Luego repiti¨® esos toques de atenci¨®n en 2016 y 2017.
En esas conclusiones el Greco ya fij¨® que las c¨¢maras espa?olas deber¨ªan de tener un C¨®digo de Conducta para sus representantes de m¨¢s f¨¢cil acceso, que incluyera asesoramiento sobre prevenci¨®n de conflictos de intereses, regalos y otras ventajas y actividades complementarias como intereses financieros o requisitos de publicidad. Los parlamentarios espa?oles ya efect¨²an ahora una declaraci¨®n de intereses econ¨®micos, pero muy gen¨¦rica. El formulario tiene una casilla para ¡°otros intereses a declarar¡± y en la mayor¨ªa de los casos no declaran nada. Las c¨¢maras, adem¨¢s, no tienen medios ni instrumentos para supervisar la veracidad de lo confesado. Y se han observado en el pasado carencias y falsedades (hasta en los curr¨ªculums, t¨ªtulos y biograf¨ªas entregados por sus se?or¨ªas) que no han tenido consecuencias. Ahora se podr¨¢n reclamar las titulaciones oficiales.
El 28 de febrero pasado la presidenta del Congreso actual, la popular Ana Pastor, llev¨® de manera personal a una cita de la Mesa que rige la c¨¢mara la aprobaci¨®n de un nuevo C¨®digo de Conducta vinculante y la creaci¨®n de una Oficina de Conflicto de Intereses para resolver las dudas, aplicar normas m¨¢s duras y vigilar que se formalicen. No hubo consultas previas ni mucho debate, seg¨²n fuentes parlamentarias consultadas. Ten¨ªa prisa por dejar el asunto aprobado. Lo complicado ahora ser¨¢ su ejecuci¨®n. Un cometido que fuentes del Congreso admiten que no ser¨¢ nada f¨¢cil.
En el Parlamento espa?ol de la XIII legislatura habr¨¢ bastantes novedades, muchas reglas ser¨¢n diferentes y los instrumentos para exigir su cumplimiento siguen siendo por ahora los mismos.
Los parlamentarios electos ya tienen que rellenar ahora una Declaraci¨®n de Actividades e Intereses, pero lo hacen con escasa precisi¨®n y sin consecuencias si aportan datos e informaci¨®n falsa. Se pide que se indiquen los ingresos actuales, sin a?adir mucho m¨¢s. Los nuevos diputados deber¨¢n aportar las ganancias del pasado, precisando ¡°el nombre del empleador y el sector de la actividad¡±, como destaca en su valoraci¨®n de las innovaciones Miguel ?ngel Gonzalo, secretario de la Comisi¨®n de Acceso a la Informaci¨®n P¨²blica del Congreso. Y deber¨¢n facilitar si tienen o han tenido sociedades patrimoniales, algo que ahora no se les exig¨ªa.
Los parlamentarios se estrenar¨¢n confesando as¨ª por escrito si obtuvieron antes de ser elegidos ¡°donaciones u obsequios y beneficios no remunerados de cualquier naturaleza que sea relevante por su valor u otra causa¡±. El registro de intereses ser¨¢ publicado v¨ªa electr¨®nica y en el Bolet¨ªn de las Cortes. Sobre los regalos se precisa que deber¨¢n abstenenerse de recibirlos si se considera ¡°razonablemente¡± que puedan pretender influir en su conducta. Si los obsequios se recogen en viajes oficiales y superan ¡°cierto valor¡± deber¨¢n ser entregados a la Secretar¨ªa General de la C¨¢mara, que los inventariar¨¢ y publicar¨¢ en el Portal de Transparencia.
Otra aportaci¨®n obligada ser¨¢ que los diputados tendr¨¢n que hacer p¨²blica su agenda institucional en ese Portal, incluyendo especialmente las reuniones con representantes de entidades o grupos de inter¨¦s, es decir lobbies.
Las normas aprobadas, que heredar¨¢ y tendr¨¢ que articular la siguiente Mesa que saldr¨¢ de las elecciones del 28-A, ser¨¢n de obligado cumplimiento hasta que en el futuro se aborde la eternamente pendiente revisi¨®n del vigente Reglamento del Congreso. En ese texto se quiere establecer qu¨¦ se considera en Espa?a por lobby o grupo de inter¨¦s. El C¨®digo retocado ahora los retratra como ¡°aquellas personas f¨ªsicas o jur¨ªdicas o entidades sin personalidad jur¨ªdica que se comuniquen de forma directa o indirecta con titulares de cargos p¨²blicos o electos o personal a su cargo en favor de intereses privados, p¨²blicos o colectivos, intentando modificar o influir sobre cuestiones relacionadas¡± con iniciativas legislativas.
Las competencias de la nueva Oficina de Intereses
-Uno de los grandes enigmas a resolver sobre el futuro funcionamiento del nuevo C¨®digo de Conducta de los futuros diputados tiene que ver con c¨®mo se vigilar¨¢ que cumplan sus obligaciones. Ese cometido le corresponder¨¢ a la por estrenar Oficina de Conflicto de Intereses, cuyos instrumentos, medios y cometidos tendr¨¢ que dotar la Mesa por constituir.
-La Oficina har¨¢ un informe anual con un balancde de la situaci¨®n, la presidir¨¢ el letrado de la Comisi¨®n del Estatuto del Diputado y la compondr¨¢n personal de las Cortes.
-El presidente de la C¨¢mara, de oficio o petici¨®n externa, puede solicitar la apertura de un expediente para averiguar sobre una posible infracci¨®n.
-La Comisi¨®n del Diputado oir¨¢ al diputado afectado, podr¨ªa pedir un informe a la Oficina de Conflicto de Interese y fijar una posible sanci¨®n, que ser¨¢ p¨²blica.
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