Alcaldes sin partido pol¨ªtico
Los regidores de Li¨¦rganes y Penagos, en Cantabria, llegaron a los Ayuntamientos con una agrupaci¨®n de electores, una f¨®rmula al margen de las candidaturas tradicionales
Cuando Manuela Carmena despej¨® la inc¨®gnita sobre si se presentar¨ªa a reelecci¨®n como alcaldesa de Madrid, expuso su intenci¨®n de hacerlo sin liderar ning¨²n partido pol¨ªtico, federaci¨®n o coalici¨®n. En Espa?a, la Ley Org¨¢nica del R¨¦gimen Electoral General ofrece una v¨ªa alternativa que han explorado en muchos Consistorios, la mayor¨ªa de peque?os municipios: las agrupaciones de electores. Se trata de una formaci¨®n que se constituye ¨²nica y exclusivamente para cada proceso electoral concreto, que no tiene que registrarse como asociaci¨®n, que no se puede convertir en partido pol¨ªtico y que necesita el aval de, al menos, el 1 % de los inscritos en el censo electoral de la circunscripci¨®n, aunque esto var¨ªa seg¨²n la poblaci¨®n.
La actual alcaldesa de Madrid finalmente descart¨® est¨¢ f¨®rmula. En una entrevista con EL PA?S, Carmena explic¨® que con la agrupaci¨®n pod¨ªa haber "dificultades pol¨ªticas importantes" y posteriormente opt¨® por un partido instrumental como M¨¢s Madrid. Sin embargo, otros muchos municipios de Espa?a est¨¢n gobernados por alcaldes que con esta modalidad presumen de no responder ante ning¨²n partido pol¨ªtico o estructura jer¨¢rquica superior. En Cantabria hay dos ejemplos que adem¨¢s comparten t¨¦rmino municipal: Li¨¦rganes, de 2.372 habitantes, y Penagos, de 2.060.
El alcalde del primero, Santiago Rego, que tambi¨¦n es periodista, reuni¨® a unos cuantos vecinos a tres meses de las ¨²ltimas elecciones, recolectaron 24 firmas, pusieron 200 euros por persona y crearon la Uni¨®n por Li¨¦rganes y P¨¢manes (ULP). Contra todo pron¨®stico, su formaci¨®n logr¨® los mismos concejales que el PP (cinco) y se hizo con el Ayuntamiento gracias al apoyo del PRC, desbancando del poder al PSOE, que gobernaba en coalici¨®n con los regionalistas. ¡°No tenemos nada en contra de los partidos tradicionales, pero pensamos que una agrupaci¨®n de electores podr¨ªa aportar cosas nuevas¡±, puntualiza Rego. ¡°No hay obediencia ni a Madrid ni a Cantabria, hay un compromiso con las personas que forman ese grupo¡±, a?ade.?
En esto coincide Jos¨¦ Carlos Lav¨ªn, alcalde de Penagos, municipio que est¨¢ gobernado por una agrupaci¨®n de electores desde 1995 tras un intento de coalici¨®n entre el PSOE y el PRC que fue negado por el aparato de los partidos. ¡°La agrupaci¨®n te da independencia y carta blanca para directamente rendir cuentas a tus ciudadanos¡±, expone Lav¨ªn, que sit¨²a su proyecto en el centro izquierda. ¡°Nunca te van a llamar desde Santander o Madrid para darte unas directrices, para que est¨¦s a favor de un plan o una autov¨ªa que choca con los intereses de tus vecinos¡±. El regidor, sin embargo, tambi¨¦n se?ala una desventaja clave: la financiaci¨®n. ¡°Te¨®ricamente las agrupaciones tenemos derecho a financiaci¨®n, pero los grandes partidos ocupan todas las partidas en los procesos electorales. Nunca hemos tenido un euro de subvenci¨®n porque no hemos podido llegar a esas partidas¡±, lamenta el alcalde, que este 26-M volver¨¢ a repetir esta modalidad, con el mismo orden en las listas que hace cuatro a?os. La campa?a le cuesta unos 2.000 euros y la financia "al 80%" con dinero de su bolsillo.
La ley contempla que esta f¨®rmula tiene derecho a subvenciones p¨²blicas, pero con importantes restricciones respecto a los partidos pol¨ªticos. No cubre por ejemplo, los gastos del mailing, el env¨ªo de propaganda electoral de las papeletas, ni tampoco da acceso al anticipo de las subvenciones, porque solo se conceden a las formaciones que se han presentado en las anteriores elecciones.
A pesar de las dificultades, la idea, y su exitosa puesta en marcha en estos dos municipios, parece haber calado en Cantabria. "Ha habido una eclosi¨®n", exclama Santiago Rego, que este a?o volver¨¢ a presentarse con una agrupaci¨®n a las elecciones en Li¨¦rganes. Tras su victoria en 2015, algunos vecinos de localidades cercanas se pusieron en contacto con ¨¦l y con Jos¨¦ Carlos Lav¨ªn en busca de asesoramiento para imitar su f¨®rmula. Crearon un grupo de WhatsApp con candidaturas de Santa Mar¨ªa de Cay¨®n y de Miera e incluso bromearon con la idea de presentarse a las elecciones auton¨®micas con Lav¨ªn como cabeza de lista, algo que al final acabaron desechando.?
Rego lamenta, en todo caso, que la ley no favorezca la proliferaci¨®n de agrupaciones de electores. Como ha pasado en Penagos, ¨¦l tambi¨¦n ha optado por ni siquiera solicitar subvenciones para el gasto electoral porque de todas formas no le iba a llegar. As¨ª, una vez m¨¢s, han vuelto a sufragar la campa?a con dinero de su bolsillo, "a escote" entre los integrantes de la agrupaci¨®n. En su caso, adem¨¢s, ha tenido que realizar el proceso dos veces, ya que en Li¨¦rganes habr¨¢ una urna m¨¢s para la junta vecinal de P¨¢manes. "Ya hemos pasado el calvario burocr¨¢tico", puntualiza Rego, "La ley no quiere agrupaciones de electores". Su candidatura parece tener este a?o el camino algo m¨¢s despejado por la decisi¨®n del PSOE de no presentarse en el municipio. De hecho, seg¨²n fuentes municipales, tanto los socialistas como Ciudadanos tantearon al regidor para ficharle, pero el equipo de Gobierno se opuso. Durante la legislatura, la oposici¨®n ha bloqueado en dos ocasiones los presupuestos y ha criticado al alcalde por la colocaci¨®n de unos bolardos en el casco hist¨®rico de la ciudad para ensanchar las aceras. Argumentan que forma parte de una peatonalizaci¨®n del centro hist¨®rico que no cuenta con la aprobaci¨®n de los vecinos. La manera de llegar al Ayuntamiento puede haber sido diferente, pero los problemas son los mismos que en otras poblaciones, como bien ha podido experimentar Rego en primera persona: "El poder desgasta".
¡°Antes llevaba una vida tranquila¡±, se?ala Rams¨¦s Arco, primer teniente de alcalde y concejal de obras. ¡°Ahora se ha complicado un poco. Para ciertas personas ya no eres la misma persona que antes". Rams¨¦s, que trabaja como bombero en el Aeropuerto de Santander, cuenta que la candidatura de 2015 la prepararon a ¨²ltima hora entre un grupo de padres con ni?os en un colegio: ¡°Fue un poco carambola¡±, recuerda. ¡°Salvo el alcalde ninguno tenemos sueldo. Hay una ganadera, el pastelero del pueblo, una enfermera¡¡±.
La ganadera es, desde hace 22 a?os, Ana Isabel R¨ªos, segunda teniente de alcalde y presidenta de la junta vecinal de P¨¢manes. De momento compagina como puede su trabajo entre terneros con su responsabilidad en el Ayuntamiento gracias a la ayuda de su hijo en el negocio familiar. ¡°A ver lo que pasa, porque esto de las urnas es ver para creer¡±, exclamaba este martes mientras repart¨ªa en coche propaganda electoral. En su primera experiencia en la pol¨ªtica ha vivido las dos caras de la moneda. La satisfacci¨®n de poder ayudar a sus vecinos, como cuando le dio agua a nueve personas del barrio Casa del Monte: "Por esos esfuerzos en Ayuntamientos tan peque?itos s¨ª que merece la pena estar ah¨ª"; y tambi¨¦n la parte menos grata: "Las criticas si son constructivas las llevo perfectamente. Lo que me duele es?que sin saber el fondo de la cuesti¨®n la gente te critique. Y, bueno, que me intenten perjudicar a m¨ª, vale, pero que lo hagan con mi familia es lo que m¨¢s me duele", lamenta la concejal, que se queda con una lectura clara de su paso a las instituciones: "La realidad es muy distinta de lo que se dibuja en los despachos de los grandes partidos pol¨ªticos".
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