Las empresas del 26-M responden: ¡°Unos irresponsables han puesto en tela de juicio el sistema¡±
Scytl y Vector, las dos compa?¨ªas que recopilaron los resultados de la noche electoral, explican por primera vez d¨®nde detectaron los problemas
"Toda la avalancha medi¨¢tica me ha dejado descolocada", dice Silvia Caparr¨®s, presidenta ejecutiva de Scytl, una de las dos empresas que se encarg¨® de recopilar el recuento provisional de las elecciones del 26 de mayo.?Una mezcla de errores humanos, defectos de dise?o y problemas t¨¦cnicos afectaron a la contabilizaci¨®n de votos. Las compa?¨ªas encargadas se explican por primera vez.
Carlos Delgado, consejero delegado de Vector ITC, la otra compa?¨ªa que hizo el recuento, es m¨¢s claro al describir la relevancia de los problemas que aparecieron desde la misma noche electoral: "No se estaba poniendo en cuesti¨®n ni al Ministerio del Interior ni a Scytl ni a Vector, sino el proceso electoral espa?ol envidiado en todo el mundo. No vamos a contribuir a carg¨¢rnoslo", explica, y a?ade: "No queremos dar nombres, pero unos irresponsables han puesto en tela de juicio el ejemplar sistema espa?ol".
Las elecciones municipales son las m¨¢s complejas por dos motivos: hay m¨¢s siglas y un pu?ado de votos puede cambiar concejales. Esta vez, adem¨¢s, iban acompa?adas de auton¨®micas y europeas: "Era la primera vez que estas elecciones tan complejas las hac¨ªa alguien distinto y han tenido m¨¢s foco", dice Delgado.
Espa?a tiene un sistema de recuento garantista. Los datos que vemos el domingo por la noche son solo un avance: desde cada colegio electoral se mandan los resultados con un m¨®vil a un centro en Madrid y all¨ª se recopilan en minutos. Pero eso es solo provisional, para el domingo. El resultado real sigue el camino tradicional de repasar las actas, valorar los votos nulos y solo lo avala la Junta Electoral Central d¨ªas despu¨¦s.
Normalmente, no hay diferencias importantes, as¨ª que todo parece salir bien. Aunque siempre hay errores. En las municipales de 2015, el Ministerio del Interior tuvo que sacar un comunicado para aclarar "anomal¨ªas o errores" de la noche electoral. Aquellas elecciones las hizo Indra, que es la empresa que tradicionalmente ha hecho el recuento en Espa?a, aunque las generales en diciembre 2015 las asumi¨® por primera vez Scytl.
?Han sido m¨¢s graves los errores esta vez? Depende. Scytl y Vector, que han esperado a la formalizaci¨®n de los Ayuntamientos para hablar, dicen que no. Fuentes del Ministerio del Interior admiten que el contrato formalmente no est¨¢ cerrado y est¨¢n analizando los informes t¨¦cnicos. Otros ver¨¢n errores grav¨ªsimos. Estos fueron los principales problemas:
1. Hubo errores en un 1% de las mesas. En Espa?a hab¨ªa 60.076 mesas electorales. En m¨¢s de 600 ¡ªalgo m¨¢s del 1%¡ª hubo discrepancias entre los resultados provisionales que dieron Scytl y Vector, y los definitivos. En 229 mesas de 98 municipios esa discrepancia en votos implic¨® cambios de concejales. Los casos m¨¢s sonados fueron Le¨®n e Ibiza.
?Esto es normal? S¨ª, seg¨²n Delgado: "Se estima como normal que no haya m¨¢s de un 2,5% de errores, m¨¢s en este proceso tremendamente complejo", dice.
La mayor¨ªa de estos errores son humanos de transcripci¨®n: la persona que lee el acta definitiva los canta mal o la persona que los introduce en la aplicaci¨®n los anota mal.
Pero hay m¨¢s variantes. Buena parte de las auton¨®micas las contaba Indra. En comunidades como Navarra o Cantabria ¨C¡ªdonde tambi¨¦n hubo errores¡ª, los encargados ten¨ªan dos aparatos: el de Indra y el de Scytl-Vector. Pudieron confundirse.
En algunos municipios el orden de los partidos no era el mismo que en las actas. Es algo que puede promover errores: "En el proceso de proclamaci¨®n de las candidaturas alguna puede desaparecer. Cuando hay variaciones despu¨¦s de la transmisi¨®n original que no se nos dicen, el dispositivo no tiene el mismo orden", dice Delgado.
?Pudo haber tambi¨¦n alg¨²n error en la transmisi¨®n de los datos achacable a las empresas? Es algo que solo Interior podr¨¢ aclarar.
2. La web dio un susto en la noche electoral. La noche electoral, la CUP dijo en rueda de prensa que les faltaban 54.000 votos. El problema fue que la web daba valores distintos por municipios y por provincias: en los municipios aparec¨ªan todos los votos, pero por provincia solo sal¨ªan los votos que hab¨ªan servido para obtener esca?os.
Las empresas cambiaron el lunes la presentaci¨®n de la web a petici¨®n del Ministerio del Interior. "Quiz¨¢ deber¨ªamos haber puesto una leyenda explic¨¢ndolo y as¨ª no se hubiera producido esa confusi¨®n", dice Caparr¨®s.
3. Las siglas de los partidos no estaban bien afinadas. Los partidos se presentan con siglas distintas en lugares diferentes. Pero para el total provincial o nacional, por ejemplo, el PSC es lo mismo que el PSOE. A nivel municipal, esas diferencias son mayores.
En esta elecci¨®n hubo casos que no se agruparon bien. Delgado pide m¨¢s colaboraci¨®n de los partidos: "Ha habido m¨¢s partidos que agrupar. La agrupaci¨®n de esos partidos peque?os en zonas rurales peque?as ha sido mayor. Es algo que deberemos plantear porque esas agrupaciones deber¨ªan ser realizadas por los propios partidos. A veces no sabemos si el partido A pertenece al partido B", explica.
4. Los simulacros generaron nervios. Hubo dos simulacros completos, 15 d¨ªas y una semana antes de las elecciones. En el ministerio las actuaciones generaron nervios. Hubo quien se hizo eco antes incluso de las elecciones. Scytl y Vector tienen una explicaci¨®n: es el momento de ponerlo todo a prueba y ver si resiste. "Los sistemas se estresan para delimitar su capacidad. Siempre hay errores al poner el sistema a prueba, porque se concentra todo en pocas horas", dice Caparr¨®s. "Metimos adem¨¢s una pieza previa de seguridad, que ten¨ªa problemas de configuraci¨®n. Se mont¨® un revuelo tremendamente intencionado", a?ade.
En el simulacro se hacen pruebas de ciberseguridad. Las elecciones son un punto d¨¦bil en el funcionamiento de un pa¨ªs y t¨¦cnicos del ministerio y empleados de las empresas estaban pendientes de aislar bien la red por donde iban a circular los datos electorales: "Hubo muchas m¨¢s pruebas de seguridad e hizo que se tuvieran que repetir bastantes simulacros", dice Caparr¨®s.
En los d¨ªas de la pol¨¦mica se habl¨® de que Scytl se hab¨ªa encargado del voto por Internet en las elecciones de la C¨¢mara de Comercio de Barcelona, donde vot¨® solo el 4,1% del censo y arras¨® el independentismo. Caparr¨®s responde a las insinuaciones: "Si los resultados no gustan, pues lo siento. La tecnolog¨ªa es neutral. Si a un grupo no le gusta, que impugnen. Nosotros ah¨ª estaremos si nos requieren. Hay pruebas auditables de la imposibilidad de manipulaci¨®n del voto. Cualquier cosa que se haga es trazable".
Intencionado o no, hubo tensi¨®n y problemas, cuya importancia depende de c¨®mo se mire. En ning¨²n caso afect¨®, sin embargo, a los pilares del sistema de recuento. "Nosotros no vamos a ser tan irresponsables como otros de echar por tierra lo que se ha construido durante 40 a?os. Hemos venido a quedarnos. Creemos que la competencia es sana. Este a?o ha habido dos procesos electorales seguidos y una ¨²nica compa?¨ªa se hubiera visto ahogada para hacerlo todo", dice Delgado.
En las pr¨®ximas elecciones, si nada cambia, habr¨¢ como m¨ªnimo dos opciones para el concurso que decida qui¨¦n hace el recuento la noche electoral.
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