El gasto militar se estanca en Espa?a pese a las presiones de Trump

Espa?a no se da por enterada de las presiones de Donald Trump para que los miembros de la Alianza Atl¨¢ntica eleven su gasto militar. La OTAN ha publicado este martes las cifras sobre cu¨¢nto dedicar¨¢n sus integrantes a defensa en 2019. Los datos sit¨²an Espa?a a la cola, con un 0,92% del PIB, solo por delante de Luxemburgo (0,55%). Desde 2016, el mismo a?o que Trump gan¨® la presidencia de Estados Unidos, esa cantidad no ha hecho m¨¢s que subir, pero con tan poco vigor que el crecimiento de la econom¨ªa ha eclipsado el avance real: en 2018 supuso el mismo porcentaje del PIB, lo que la deja entre las menos entusiastas con el vuelco promovido por EE UU.

El l¨ªder estadounidense ha logrado que el gasto militar centre pr¨¢cticamente todas las discusiones que acomete la Alianza Atl¨¢ntica, la mayor organizaci¨®n pol¨ªtico-militar del mundo dedicada a la seguridad. Pero el dogma en que ha convertido Trump una meta de gasto que solo se adopt¨® como orientaci¨®n en 2014 no ha condicionado demasiado las cifras espa?olas, que apenas rozan la mitad de lo exigido. Las cifras provisionales divulgadas este martes por la OTAN constatan un estancamiento del peso del gasto militar en Espa?a, aunque en volumen las cifras s¨ª avanzan levemente (hasta 12.336 millones de d¨®lares, casi 11.000 millones de euros, en 2019).

Esa situaci¨®n contrasta con la de la mayor¨ªa: en 22 de los 29 Estados que conforman la OTAN el porcentaje de gasto militar subir¨¢ este a?o; el avance conjunto de los socios europeos y Canad¨¢ ser¨¢ del 3,9% y suma un lustro de incrementos ininterrumpidos. Pese a todo, ese avance conjunto tambi¨¦n se desinfla. El 3,9% atribuido a 2019, seg¨²n la estimaci¨®n provisional, es una d¨¦cima inferior al 4% que creci¨® el gasto militar el a?o pasado en las dos regiones a las que se les exige m¨¢s esfuerzo, Europa y Canad¨¢.

La estad¨ªstica, anta?o relegada a un segundo plano, se ha convertido, desde los continuos llamamientos de Trump a repartir mejor las cargas entre los aliados, en una frontera entre cumplidores e incumplidores. La cumbre de Gales de 2014 consagr¨® el objetivo de que todos los miembros de la OTAN alcanzaran el 2% de gasto militar en 2024. Aunque esa decisi¨®n se adopt¨® con Barack Obama como presidente estadounidense, no fue hasta la irrupci¨®n de Trump y su amenaza de romper la cuerda transatl¨¢ntica cuando el pacto se convirti¨® en algo m¨¢s que una vaga promesa.

El secretario general de la Alianza, Jens Stoltenberg, se apresur¨® a celebrar la mejora de algunos Estados. ¡°Esperamos que este a?o ocho aliados gasten al menos el 2% del PIB en defensa. En 2014 eran solo tres. Es una buena tendencia. Esperamos que contin¨²e. La mayor parte de los aliados tienen previsto alcanzar el 2% en 2024¡±, se?al¨® en conferencia de prensa.

Aun as¨ª, Espa?a ya ha asumido que no estar¨¢ en el grupo de los m¨¢s aplicados. Pese a que el Gobierno ha invertido esfuerzos en los ¨²ltimos a?os para revertir la tendencia a la baja ¡ªy present¨®, como otros pa¨ªses, un plan detallado a la OTAN comprometiendo subidas de gasto en defensa¡ª, la ministra del ramo, Margarita Robles, admiti¨® hace unos d¨ªas que el objetivo es inviable. "Hemos de ser muy sinceros. Espa?a no va a llegar nunca al 2%", afirm¨®.

Los n¨²meros desglosados por la OTAN se han divulgado en las horas previas a la reuni¨®n que celebrar¨¢n este mi¨¦rcoles los ministros de Defensa de sus pa¨ªses aliados en Bruselas, que profundizar¨¢n en esa idea. Dado el bajo umbral del que parte, Espa?a necesita dedicar m¨¢s del doble de lo que actualmente destina a gasto militar en solo cinco a?os para alcanzar la meta. En a?os precedentes, siempre ha estado entre los de gasto militar m¨¢s modesto en la Alianza, y ni siquiera las coacciones de Trump, que incluso amag¨® con desvincularse de la obligaci¨®n de asistir a cualquier miembro de la Alianza que sufra un ataque, han alterado el panorama.

Donde Espa?a s¨ª ha actuado con diligencia es en cambiar las prioridades de su gasto militar. A diferencia del a?o pasado, ahora s¨ª cumple el objetivo de que al menos el 20% de las partidas se dedique a equipamiento, una meta que alcanzan 16 de los 28 miembros y que se identifica con la modernizaci¨®n de los equipos dedicados a la defensa.

Un criterio discutido

Espa?a recela del excesivo ¨¦nfasis que se da a estas metas num¨¦ricas y las contrapone a la participaci¨®n en misiones militares internacionales, tanto de la Alianza como de la UE y la ONU. Las fuerzas armadas espa?olas est¨¢n pr¨¢cticamente en todos los despliegues en el exterior (contribuyen a 19 misiones, con m¨¢s de 2.100 militares y guardias civiles desplegados en cuatro continentes, seg¨²n datos del Ministerio de Exteriores). El Gobierno considera este indicador mucho m¨¢s representativo de la implicaci¨®n del pa¨ªs en la seguridad global. Adem¨¢s, los criterios para computar el nivel de gasto no son homog¨¦neos en todos los pa¨ªses. Grecia, uno de los pa¨ªses que s¨ª cumple la directriz de gasto, computa las pensiones que abona a sus militares como gasto de defensa, lo que engorda esa partida. Espa?a lo contabiliza aparte.

Estados Unidos, Grecia, Estonia, Reino Unido, Rumania, Polonia y Letonia son los siete pa¨ªses de la OTAN que ya rebasan el suelo del 2% en gasto militar en un momento delicado (Lituania, Turqu¨ªa y Francia se acercan mucho). Aunque el tema no se tratar¨¢ en el encuentro ministerial, la crisis entre Ir¨¢n y EE UU sobrevuela la agenda, y fuentes diplom¨¢ticas reconocen "gran preocupaci¨®n y un riesgo creciente de conflicto armado".