El ¡®Open Arms¡¯ desaf¨ªa la prohibici¨®n del Gobierno y se dirige a aguas de rescate libias
El barco tiene expresamente prohibido realizar tareas de salvamento en esa zona del Mediterr¨¢neo Central
La organizaci¨®n Proactiva Open Arms ha decidido iniciar un pulso con el Gobierno espa?ol y ha enviado a su buque Open Arms a la zona de b¨²squeda y rescate libia. El barco tiene expresamente prohibido realizar tareas de salvamento en esas aguas del Mediterr¨¢neo Central, la regi¨®n del mundo donde m¨¢s migrantes pierden la vida desde 2014. El veto fue impuesto por el Ministerio de Fomento para evitar nuevas crisis derivadas del rescate de migrantes que acaban bloqueados en alta mar ante la negativa de Malta e Italia a abrirles sus puertos.
"Seis meses bloqueados. No aguantamos m¨¢s. Levamos anclas y nos vamos. Antes presos que c¨®mplices", anunci¨® ?scar Camps, l¨ªder de la ONG, el mi¨¦rcoles en su cuenta de Twitter. El Open Arms, que durante el a?o pasado rescat¨® m¨¢s de 400 personas que desembarc¨® posteriormente en Espa?a, desafiaba as¨ª al Gobierno en funciones de Pedro S¨¢nchez. El Ministerio de Fomento, de quien dependen los permisos de navegaci¨®n del buque, ha declinado manifestarse.
El Open Arms?lleva desde enero sin poder dedicarse al salvamento, la raz¨®n de ser de la organizaci¨®n catalana. Los diferentes despachos del buque le proh¨ªben expresamente ¡°realizar operaciones de b¨²squeda y salvamento u otras actividades que deriven con toda probabilidad en tales operaciones¡±. El incumplimiento puede conllevar multas de hasta 901.000 euros.?
En lo que va de a?o, el barco consigui¨® dos permisos para dirigirse en mayo a la isla griega de Samos y entregar ayuda humanitaria para los refugiados y para pasar la ¨²ltima semana en N¨¢poles en unas jornadas de puertas abiertas. Ha sido en esa ciudad al sur de Italia que la tripulaci¨®n ha decidido saltarse el bloqueo y volver a su actividad. ¡°No es tanto una desobediencia como una divergencia de criterio. No estamos de acuerdo con la decisi¨®n del Gobierno de penalizarnos por salvar vidas. Volvemos por las 590 personas que han muerto desde que nos bloquearon¡±, cuenta Camps a EL PA?S. ¡°Llega el buen tiempo y las salidas contin¨²an ocurriendo en silencio. Ahora mismo no hay ninguna operaci¨®n civil ni militar que garantice una misi¨®n r¨¢pida en caso de naufragio¡±, lamenta.
Denunciar violaciones
Camps defiende que el objetivo de la ONG en esta misi¨®n no es centrarse tanto en los rescates sino en documentar y denunciar las omisiones de socorro que se producen en la zona. Pero, m¨¢s all¨¢ de su papel de testigo, la organizaci¨®n asume que en caso de necesidad de rescate intervendr¨¢ como dicta la ley del mar.
En esta inmensa ¨¢rea de 350.000 kil¨®metros cuadrados, la responsabilidad de los rescates recae, con en benepl¨¢cito de la UE, en los guardacostas libios. Estos rescatadores armados, adem¨¢s de ser cuestionados por su capacidad y m¨¦todos de salvamento, est¨¢n inmersos en una guerra civil. ¡°Tenemos que denunciar las violaciones de los derechos humanos que ocurran¡±, advierte Camps.
El bloqueo de barcos humanitarios que actuaban en el Mediterr¨¢neo Central se ha convertido en una constante desde el verano pasado, cuando Italia y Malta decidieron cerrar sus puertos a las embarcaciones dedicadas al rescate de migrantes. Desde entonces, los socios europeos se han mostrado incapaces de crear un sistema de cuotas de acogida para facilitar el desembarco y en cada rescate se improvisa una soluci¨®n que mantiene a los migrantes bloqueados durante d¨ªas en alta mar.
Durante seis meses, Espa?a asumi¨® la responsabilidad de acoger estos barcos. Primero fue el Aquarius y despu¨¦s el Open Arms, que protagoniz¨® cuatro medi¨¢ticos desembarcos en puertos espa?oles. Hasta que en enero decidi¨® dejar de responsabilizarse de los migrantes rescatados en zonas que no le corresponden e impidi¨® la partida hacia el mediterr¨¢neo Central a los dos barcos de bandera espa?ola dedicados a esta actividad, el catal¨¢n Open Arms y el vasco Aita Mari.
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