Una espa?ola sienta en el banquillo a Frontex

Frontex, la todopoderosa agencia europea de fronteras, se sienta por primera vez en el banquillo por un caso de derechos civiles. Una espa?ola, Luisa Izuzquiza, ha sido la promotora de esta demanda ante el Tribunal de Justicia de la Uni¨®n Europea por lo que considera falta de transparencia en la gesti¨®n de la crisis migratoria que desarrolla esta organizaci¨®n. Demandantes y demandados defender¨¢n este martes sus posiciones en la vista oral que se celebra en Luxemburgo, sede de la instituci¨®n judicial comunitaria.

No resulta f¨¢cil construir un caso contra Frontex, la agencia que desde 2005 coordina la supervisi¨®n de las lindes exteriores de la UE y que, a ra¨ªz de la crisis migratoria desencadenada en 2015 (inicialmente como crisis de refugiados), reforz¨® sus poderes de actuaci¨®n. Hasta ahora ninguna iniciativa hab¨ªa prosperado. La organizaci¨®n, que ha desempe?ado un papel clave en la respuesta al fen¨®meno migratorio acentuado en los ¨²ltimos a?os, se ha topado con algunas quejas ante el Defensor del Pueblo Europeo. Todas fueron desestimadas, seg¨²n explica una portavoz.

Antes de dirigirse al tribunal europeo, Luisa Izuzquiza, experta en asuntos de transparencia, y su compa?ero Arne Semsrott exploraron otras v¨ªas. Lo primero fue solicitar, en septiembre de 2017, informaci¨®n de operaciones en el Mediterr¨¢neo a trav¨¦s del portal de transparencia de la Uni¨®n Europea. Como parte de una investigaci¨®n relativa a la respuesta que daban las instituciones comunitarias a la crisis de llegadas de 2015, estos dos ciudadanos preguntaron, a t¨ªtulo particular, detalles sobre los barcos que Frontex ten¨ªa desplegados en las costas italianas en el marco de la operaci¨®n Trit¨®n. Fue la primera misi¨®n comunitaria de calado para controlar las costas y auxiliar a potenciales n¨¢ufragos en el Mediterr¨¢neo central. La agencia con sede en Varsovia rehus¨® responder.

¡°Alegaron motivos de seguridad, pero nosotros respondimos que hay otras operaciones mar¨ªtimas mucho m¨¢s transparentes. Adem¨¢s, la agencia s¨ª publica en Twitter fotos y datos de barcos cuando es para promocionar su trabajo. Pese a todo, lo volvieron a denegar¡±, explica Izuzquiza en conversaci¨®n telef¨®nica. Aunque esta espa?ola afincada en Bruselas trabaja en Corporate Europe Observatory, una ONG que trata de denunciar el poder de los lobbies en la pol¨ªtica europea, el caso de Frontex lo construy¨® por su cuenta. Izuzquiza, Semsrott y tres abogados empezaron a armarlo y lo elevaron al tribunal general de la instituci¨®n con sede en Luxemburgo. Al tratarse de un organismo europeo, la instancia competente es la comunitaria. El primer fallo de ese tribunal general se puede recurrir ante la instancia superior, el Tribunal de Justicia de la UE.

Frontex argumenta que ya suministra mucha informaci¨®n p¨²blica y que la relativa a los barcos no puede divulgarse por motivos de seguridad. ¡°No es que no seamos transparentes. En estas operaciones mar¨ªtimas intervienen fuerzas de seguridad, as¨ª que hay ciertas informaciones que no se pueden desvelar¡±, defiende una portavoz. Como argumento de que hay m¨¢s datos que nunca sobre lo que hace esta agencia, ofrece la progresi¨®n de documentos publicados: en 2015 fueron 700; en 2017, alrededor de 2.000. Respecto a la idea de que en ocasiones Frontex publica en Twitter fotos y detalles sobre sus operaciones mediterr¨¢neas, la portavoz explica que se trata de algo ¡°espor¨¢dico, no exhaustivo¡±. Y siempre con informaci¨®n que no resulta sensible.

En realidad, el flanco de la transparencia es el m¨¢s concreto que han encontrado estos dos ciudadanos para realizar un cuestionamiento m¨¢s general de la pol¨ªtica de Frontex, hoy denominada oficialmente Agencia Europea de la Guardia de Fronteras y Costas. ¡°Es un primer paso para entrar en detalles relativos a si su comportamiento respeta o no los derechos humanos. La organizaci¨®n es tan opaca que resulta dif¨ªcil saberlo¡±, considera la espa?ola radicada en Bruselas. Las tareas de Frontex, que solo act¨²a en coordinaci¨®n con las fuerzas de seguridad de los Estados miembros donde interviene, han sido cuestionadas por algunas organizaciones de derechos civiles. La principal queja reside en que no ofrecen al migrante irregular todas las opciones para pedir asilo y, en su lugar, fomentan los retornos. La agencia sostiene que todas sus actividades se ajustan a las normas europeas.

Ambas partes tendr¨¢n este martes la oportunidad de confrontar sus argumentos en una sesi¨®n que ser¨¢ de car¨¢cter p¨²blico. A partir de ah¨ª, los jueces deliberar¨¢n. Los demandantes esperan el veredicto para final de a?o.