Los l¨ªderes auton¨®micos avisan de la ¡°situaci¨®n de emergencia¡±
Las comunidades reclaman un nuevo modelo de financiaci¨®n que reemplace al vigente, obsoleto desde 2014
La renovaci¨®n del sistema de financiaci¨®n es una a?eja reivindicaci¨®n de los presidentes auton¨®micos, con independencia de su signo pol¨ªtico. A falta de que se cierren los Ejecutivos regionales para los pr¨®ximos cuatro a?os, los pocos que ya tienen asegurado su mandato comparten la urgencia de que se apruebe un modelo que tenga en cuenta la falta de financiaci¨®n para los gastos de sanidad, educaci¨®n o dependencia. Arag¨®n, Asturias, Castilla-La Mancha, Castilla y Le¨®n, Galicia y La Rioja, con presidentes del PP y el PSOE, unieron fuerzas el a?o pasado para reclamar un cambio acorde a los problemas de despoblaci¨®n, dispersi¨®n y envejecimiento que comparten. Comunidades tur¨ªsticas como Baleares tienen el problema de la poblaci¨®n flotante. La Comunidad Valenciana achaca sus apuros a la infrafinanciaci¨®n del modelo vigente. Pero el malestar es general.
¡°Es urgente e imprescindible un nuevo sistema. Es inaplazable: el desastre es incalculable si no se afronta. No solo por las comunidades que ya estamos en situaci¨®n de emergencia. Es por el conjunto del sistema, que se encuentra en riesgo de colapso. Los expertos hablan de un d¨¦ficit del conjunto del sistema de 16.000 millones para mantener la sanidad, educaci¨®n... Y va aumentando a?o a a?o. Esto hace que tengamos que vivir enchufados al Fondo de Liquidez Auton¨®mica (FLA), una trampa porque genera m¨¢s deuda¡±, advierte el presidente valenciano, Ximo Puig.
¡°No se puede pedir a las comunidades que den m¨¢s prestaciones y nos ahoguen financieramente. No es un problema de anticipo a cuenta: la ley est¨¢ obsoleta¡±, considera Emiliano Garc¨ªa-Page. Para el presidente de Castilla-La Mancha ¡°es evidente que con un Gobierno ahora mismo en funciones y que est¨¢ ejecutando el presupuesto del anterior es complicado llegar a un acuerdo¡±, pero lo fundamental es que el modelo ¡°no se ajusta a las necesidades de las comunidades para prestar servicios p¨²blicos esenciales¡±.
La dificultad de aprobar un nuevo sistema lleva a Garc¨ªa-Page a proponer avances en un modelo centrado en la sostenibilidad de la sanidad. ¡°El principal gasto de cualquier comunidad aut¨®noma, y que adem¨¢s est¨¢ sometido a mayor tensi¨®n por variables que no son controlables, es el gasto sanitario. Ah¨ª adem¨¢s influye el gasto farmac¨¦utico, determinadas terapias o tratamientos que se incluyen en la cartera de servicios e igual no ten¨ªas previsto¡ Se puede intentar hacer, si hay voluntad, no abordar la reforma de todo el modelo de financiaci¨®n pero avanzar parcialmente¡±.
El presidente extreme?o, Guillermo Fern¨¢ndez Vara, el ¨²nico junto a Garc¨ªa-Page en ganar las elecciones del 26 de mayo con mayor¨ªa absoluta, advierte que hay que financiar ¡°adecuadamente¡± la sanidad. ¡°Estoy dispuesto a que lo discutamos aqu¨ª [el Parlamento regional], a volver a incorporar la financiaci¨®n de la sanidad como un elemento absolutamente imprescindible para su sostenibilidad... Si no, no lo ser¨¢¡±, recalc¨® en su discurso de investidura en la Asamblea de Extremadura. Fern¨¢ndez Vara, m¨¦dico de formaci¨®n, inst¨® a ¡°ser capaces de tener un sistema de sanidad que sea sostenible¡±.
El sistema es complejo, opaco y est¨¢ plagado de parches y excepciones que lo convierten en una suerte de Frankenstein. Pero b¨¢sicamente funciona as¨ª: cada verano, el Gobierno informa de su previsi¨®n de ingresos a las autonom¨ªas para que elaboren sus presupuestos. El Estado les transfiere anticipos mensuales de acuerdo con los impuestos cedidos (50% de IRPF e IVA, 58% de Especiales); dos a?os m¨¢s tarde, con las cuentas ya cerradas, se liquida la diferencia entre lo estimado y lo finalmente recaudado. Todo ese mecanismo est¨¢ regulado por la Ley Org¨¢nica de Financiaci¨®n de las Comunidades Aut¨®nomas, de manera que si el Gobierno central no aprueba sus presupuestos no se pueden actualizar las cantidades. ¡°Hay que lograr un gran acuerdo, no partidista, sobre qu¨¦ Estado del Bienestar estamos dispuestos a pagar¡±, se?ala Puig. Gobierne quien gobierne, sea la comunidad aut¨®noma que sea, la sanidad representa la mayor parte de los costes. En el caso de la Comunidad Valenciana supone casi 7.000 millones de un presupuesto de 22.000¡±, observa el presidente auton¨®mico.
Las aportaciones a la dependencia, cartera que guarda relaci¨®n con el sistema sanitario, son otras de las grandes preocupaciones de las comunidades aut¨®nomas. ¡°El Estado tiene que atender ya la financiaci¨®n de la dependencia. Sufrimos desde hace m¨¢s de cinco a?os una absoluta infrafinanciaci¨®n. La ley dice que el 80% del gasto de la dependencia debe ser p¨²blico, y el 20% restante privado y lo aportan los usuarios. Pero de la parte p¨²blica se deber¨ªa repartir a partes iguales y en nuestro caso estamos en un 82%-18%. Eso nos ha generado desde 2013 un desfase de 500 millones. Eso, en un presupuesto no financiero de 7.000 millones, es un gasto muy importante¡±, expone Garc¨ªa-Page.
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