Ignacio Gonz¨¢lez, un pol¨ªtico escurridizo entre tramas corruptas

En la historia de la corrupci¨®n pol¨ªtica en Espa?a, probablemente no exista un pol¨ªtico con tantas causas judiciales abiertas y tan escurridizo como Ignacio Gonz¨¢lez. El expresidente madrile?o hizo una carrera pol¨ªtica exitosa a la sombra de Esperanza Aguirre. La victoria del PP en las elecciones generales de 1996 y 2000 le permiti¨® ejercer como subsecretario de Educaci¨®n (con Aguirre de ministra), secretario de Estado de Administraci¨®n P¨²blica y delegado del Gobierno para la Extranjer¨ªa y la Inmigraci¨®n.

La mayor¨ªa absoluta de Aguirre en las elecciones auton¨®micas de octubre de 2003 llev¨® a Gonz¨¢lez hasta la vicepresidencia del Gobierno regional, donde acumul¨® un inmenso poder. Para seguir su escalada, Aguirre le brind¨® en bandeja la presidencia de Caja Madrid en 2009 mediante un pacto con la oposici¨®n y los sindicatos. Pero Mariano Rajoy frustr¨® aquella operaci¨®n y eligi¨® a Rodrigo Rato para sustituir a Miguel Blesa, fallecido en julio de 2017, en el puesto.

La carrera pol¨ªtica de Gonz¨¢lez se fren¨® hasta 2012, cuando hered¨® el cargo de presidente de la Comunidad de Madrid tras la renuncia de Esperanza Aguirre, quien impuso el nombre de su sucesor contra los deseos de la direcci¨®n nacional de su partido. Tres a?os despu¨¦s, Gonz¨¢lez dej¨® la pol¨ªtica por la puerta de atr¨¢s. Alertado por algunas sospechas de corrupci¨®n que rodeaban a Gonz¨¢lez, el entonces presidente Rajoy eligi¨® a otra candidata, Cristina Cifuentes, para encabezar las listas del PP a las elecciones auton¨®micas de 2015.

Desde entonces, a Gonz¨¢lez le persigue el descr¨¦dito por su gesti¨®n en la Comunidad de Madrid. En todas las causas judiciales que tiene abiertas se sigue buscando la prueba directa que le incrimine. Los indicios contra Gonz¨¢lez son numerosos, pero el arma del delito contin¨²a desaparecida. Su ca¨ªda en desgracia comenz¨® por un asunto personal.

El ¨¢tico de Estepona. Ignacio Gonz¨¢lez disfrutaba desde 2008 de un ¨¢tico alquilado en Estepona por el que pagaba 2.000 euros al mes, lo que supon¨ªa el 40% de su salario como vicepresidente de la Comunidad de Madrid. Era el ¨²nico inmueble de toda la urbanizaci¨®n que hab¨ªa sido comprado por un extranjero, en este caso ciudadano estadounidense, y en extra?as circunstancias. Estos hechos se conocieron en 2011. Para zanjar la pol¨¦mica y ahuyentar las dudas, Gonz¨¢lez decidi¨® en 2013 adquirir el ¨¢tico por 770.000 euros.

El comisario Jos¨¦ Manuel Villarejo, hoy preso por corrupci¨®n, aire¨® en marzo de 2015, a dos meses de las elecciones auton¨®micas, una parte de la conversaci¨®n que grab¨® a Gonz¨¢lez en noviembre de 2011. En esa reuni¨®n, el vicepresidente comentaba su inter¨¦s por que no salieran a la luz noticias de su ¨¢tico y el polic¨ªa le ofrec¨ªa sus servicios para solucionar el problema. Aquella grabaci¨®n, que se hizo p¨²blica, fue la puntilla definitiva a la carrera pol¨ªtica de Gonz¨¢lez, que ya no repiti¨® como candidato y dej¨® la pol¨ªtica.

La causa judicial del ¨¢tico de Gonz¨¢lez lleva ocho a?os empantanada entre comisiones rogatorias a Panam¨¢, Estados Unidos y el Reino Unido, todas fallidas. El instructor no ha encontrado la prueba definitiva de que el ¨¢tico fue un regalo de empresarios a los que habr¨ªa beneficiado el entonces vicepresidente de la Comunidad de Madrid.

La compra de Emiss?o a cambio de 5,4 millones de d¨®lares. El Canal de Isabel II, empresa p¨²blica madrile?a cuyo presidente fue durante muchos a?os Ignacio Gonz¨¢lez, compr¨® en 2014 una sociedad brasile?a dedicada a la distribuci¨®n de aguas llamada Emiss?o. La compra se cerr¨® por 30 millones de d¨®lares (unos 27 millones de euros) y el vendedor dedic¨® una parte -5,4 millones de d¨®lares- a pagar una mordida a quienes gestionaron la adquisici¨®n. Ese dinero, depositado en cuentas suizas, iba destinado a directivos de Inassa, la filial del Canal de Isabel II en Latinoam¨¦rica, y, supuestamente, a Ignacio Gonz¨¢lez.

El principal responsable de la compra fue Edmundo Rodr¨ªguez Sobrino, exconsejero del diario La Raz¨®n y presidente de Inassa, colocado en ese puesto por Gonz¨¢lez.

Rodr¨ªguez Sobrino confes¨® el delito en la Audiencia Nacional y revel¨® que una parte de la comisi¨®n ilegal -1,8 millones de d¨®lares- iba destinada a Gonz¨¢lez. Pero el expresidente de la Comunidad de Madrid nunca retir¨® el dinero que supuestamente estaba reservado para el en una cuenta suiza.

La expresidenta madrile?a Cristina Cifuentes activ¨® una denuncia por estos hechos ante la Fiscal¨ªa Anticorrupci¨®n. Rodr¨ªguez Sobrino intent¨® neutralizar a Cifuentes mediante amenazas, utilizando para ello a directivos del peri¨®dico La Raz¨®n, seg¨²n las grabaciones incorporadas al sumario de este caso. Gonz¨¢lez colaboraba como columnista de La Raz¨®n cuando estall¨® el esc¨¢ndalo, con un sueldo similar al que cobraba como presidente de la Comunidad de Madrid.

La mordida de 1,4 millones del tren a Navalcarnero. La investigaci¨®n del caso Lezo descubri¨® el supuesto pago de una comisi¨®n ilegal por la concesi¨®n a OHL, la constructora de Jos¨¦ Manuel Villar Mir, de una l¨ªnea de tren a Navalcarnero.

Adri¨¢n de la Joya, empresario involucrado en m¨²ltiples negocios como intermediario, asegur¨® que OHL le ingres¨® 1,4 millones de euros en una cuenta suiza para que se los diese a Ignacio Gonz¨¢lez en supuesto pago por la concesi¨®n de la Comunidad de Madrid. Pero Gonz¨¢lez nunca cobr¨® ese dinero. De la Joya se qued¨® con los 1,4 millones de una deuda que supuestamente manten¨ªa OHL con este empresario por sus gestiones para la explotaci¨®n de unas minas en ?frica.

La financiaci¨®n ilegal del PP-Madrid. La investigaci¨®n del caso P¨²nica acumula pruebas de que empresas privadas, contratistas de la Comunidad de Madrid, pagaron a proveedores electorales del PP por servicios no prestados para financiar a esta formaci¨®n pol¨ªtica por v¨ªas ilegales. Esta operativa fue, supuestamente, ordenada por Ignacio Gonz¨¢lez a sus colaboradores en una reuni¨®n celebrada en la Asamblea de Madrid.

El principal testimonio sobre estas maniobras es indirecto: un exdirectivo de la empresa p¨²blica ICM confes¨® al juez que su jefe le cont¨® el contenido de la reuni¨®n y la orden que hab¨ªa recibido del entonces presidente de la Comunidad de Madrid. Pero los supuestos participantes en ese encuentro, Gonz¨¢lez incluido, han negado en sus declaraciones ante el instructor que esa reuni¨®n se celebrara.

Cuando en una causa solo existen indicios y no pruebas directas, el Tribunal Supremo considera que deben darse los siguientes requisitos para considerar v¨¢lida una sentencia condenatoria:

- ¡°Los indicios deben ser plurales y deben estar interrelacionados de manera que se refuercen entre s¨ª¡±.

- ¡°Si es un indicio ¨²nico, debe tener una singular potencia acreditativa¡±.

- ¡°La inducci¨®n o inferencia del tribunal debe ser razonable, no solamente que no sea arbitraria, absurda o infundada, sino que responda plenamente a las reglas de la l¨®gica y la experiencia¡±.

De todas las causas que Ignacio Gonz¨¢lez tiene abiertas en los juzgados, la primera por la que tendr¨¢ que sentarse en el banquillo se refiere a la compra de Emiss?o por parte del Canal de Isabel II. El Tribunal deber¨¢ determinar si los indicios existentes son suficientes como para hacer culpable a Gonz¨¢lez de una operaci¨®n delictiva confesada por sus principales ejecutores.