As¨ª es el ¡®Halc¨®n Malt¨¦s¡¯, uno de los veleros m¨¢s innovadores del mundo

Sus tres m¨¢stiles giratorios de carbono de 58 metros de altura (equivalentes a un edificio de 20 plantas); los 2.400 metros cuadrados de superficie de sus 15 velas (como medio campo de f¨²tbol); la velocidad de hasta 34 nudos (unos 63 kil¨®metros por hora) que puede alcanzar; adem¨¢s del lujo y las comodidades que ofrece, han convertido al Halc¨®n Malt¨¦s en un icono de la navegaci¨®n, un mundo que revolucion¨® en 2006 ¡ªel a?o en el que fue botado¡ª. Aunque solo por unas horas, el puerto de Santa Cruz de Tenerife tuvo la oportunidad de acogerlo hace poco m¨¢s de un mes, donde la embarcaci¨®n hizo escala para avituallarse antes de partir hacia Santa Luc¨ªa, en el Caribe.

¡°El bicho¡±. As¨ª es como llama al Halc¨®n Malt¨¦s Thierry Baudouin, director de Tenerife OffShore and Shipping Agency, la consignataria que se encarg¨® de atender al buque en su paso por la isla canaria. Su capit¨¢n, al que Thierry conoce de haber realizado escalas anteriores al mando de otros barcos, lo hab¨ªa llamado varias semanas antes desde Italia, donde el Halc¨®n Malt¨¦s estaba siendo sometido a una puesta a punto. ¡°Este tipo de embarcaciones busca no solo un puerto y un atraque seguro, sino que todo est¨¦ listo en el momento exacto de su llegada¡±, se?ala Thierry.

El Halc¨®n Malt¨¦s viajaba con 14 tripulantes, a los que se sumaron otros tres que se subieron al barco en la isla con la misi¨®n de prepararlo durante su traves¨ªa por el Atl¨¢ntico para los hu¨¦spedes que lo ocupar¨¢n en Santa Luc¨ªa. Tras cargarse con algo menos de los 100.000 litros de combustible inicialmente previstos, y de pertrecharse de las correspondientes provisiones, el barco zarp¨® solo cinco horas despu¨¦s de haber arribado a Tenerife (adonde se prev¨¦ que regrese el a?o que viene).

La emblem¨¢tica embarcaci¨®n fue encargada por el fallecido magnate Tom Perkins, antiguo directivo de HP e inversor en empresas como Google o Amazon, al astillero italiano Perini Navi. Pag¨® por ella m¨¢s de 100 millones de euros. La acaudalada empresaria Elena Ambrosiadou, fundadora del fondo de inversi¨®n Iko, lo compr¨® en 2009 por unos 80 millones.

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Lo que la convierte en ¨²nica es su revolucionario sistema de navegaci¨®n, denominado Falcon Rig, compuesto por sus enormes m¨¢stiles y velas, que se despliegan en seis minutos y que pueden ser manejados por una persona mediante una simple palanca de mando o joystick. La embarcaci¨®n navega preferentemente solo con ellas salvo que la fuerza del viento no sea suficiente, momento en el que entran en funcionamiento sus dos motores.

El barco est¨¢ disponible para ser alquilado como crucero. El lujo que rezuma y su exclusivo dise?o atraen a clientes de alto poder adquisitivo, capaces de hacer frente al importe que han de abonar para disfrutarlo: 230.000 euros a la semana. El precio incluye a los cerca de 20 miembros de la tripulaci¨®n (a los que manejan el barco y al personal de servicio de los hu¨¦spedes, como camareros, cocineros o peluqueros) y a una docena de pasajeros con todo incluido. Los clientes m¨¢s habituales son empresas que premian a sus directivos, o familias adineradas. Jacuzzi, spa, gimnasio, un tobog¨¢n, motos de agua o equipos completos para practicar windsurf o stand up paddle son algunos de los elementos que componen la oferta del Halc¨®n Malt¨¦s. En cualquier caso, el coste se?alado puede aumentar en funci¨®n de las necesidades de sus hu¨¦spedes. Lo matiza Thierry: ¡°Si quieren desayunar, almorzar y cenar langosta, y adem¨¢s que sea fresca, esa historia ya es otra cosa¡±. Pero recalca que ese tipo de cliente, cuando quiere algo, no pregunta cu¨¢nto cuesta. Solo si puede hacerse.