El sistema de cr¨¦dito social chino salta de la teor¨ªa a la pr¨¢ctica
Una empresa de alquiler de bicicletas anuncia penalizaciones para quienes tengan pocos puntos en su carn¨¦ de civismo y el Gobierno decide restringir sus movimientos
En la aplicaci¨®n m¨®vil de Alipay ¡ªla principal plataforma de pagos electr¨®nicos en China y en el mundo¡ª, hay que bucear a conciencia para encontrar la pesta?a de ¡®Zhima Credit¡¯. Es la que, una vez abierta, arroja un misterioso n¨²mero de tres cifras, comprendido entre el 350 y el 950. En el caso de quien escribe estas l¨ªneas es el 654. Se trata de una cifra calificada como ¡®excelente¡¯ por la propia aplicaci¨®n, pero lejana al m¨¢ximo que marca el gr¨¢fico. La mayor¨ªa de los usuarios no le presta atenci¨®n, pero tiene mayor importancia de la que creen: es el sistema de puntuaci¨®n social ideado por la rama financiera de Alibaba, el principal conglomerado de comercio electr¨®nico del planeta.
En teor¨ªa, se trata de un baremo para calificar el comportamiento de los usuarios y la confianza que merecen. La puntuaci¨®n est¨¢ calculada por un algoritmo cuyo funcionamiento resulta extremadamente opaco, pero que tiene en cuenta no solo que los usuarios hagan un buen uso del servicio, sino tambi¨¦n lo que compran y a qui¨¦n. Recientemente, diferentes fuentes aseguran que la puntuaci¨®n tambi¨¦n recoge informaci¨®n relativa al pago de multas o de cr¨¦ditos bancarios.
No es el ¨²nico sistema de puntos ideado por una empresa china. La mayor¨ªa lo utilizan para ofrecer servicios extra o ventajas a quienes cuentan con la mejor puntuaci¨®n, a modo de incentivo, para mantener un comportamiento ejemplar. Por ejemplo, los mejores usuarios de Alipay pueden acceder a salas VIP en diferentes aeropuertos, utilizar servicios de alquiler sin necesidad de pagar un dep¨®sito o pedir pr¨¦stamos a un inter¨¦s m¨¢s favorable.
Pero todo va a cambiar dentro de poco. De hecho, una de las principales empresas de alquiler de bicicletas de China, Mobike, ya ha anunciado que utilizar¨¢ su puntuaci¨®n para penalizar a los usuarios que la tengan m¨¢s baja. En este caso, quienes se queden en un ¡®aprobado¡¯ tendr¨¢n que pagar por el servicio el doble de lo que abonan quienes hayan logrado un ¡®sobresaliente¡¯. A los que califique con un ¡®deficiente¡¯ les podr¨¢ llegar a cobrar hasta cien veces el precio normal: unos 12 euros por cada media hora.
Los usuarios comienzan a utilizar el servicio con un ¡®notable¡¯, y pierden puntos si aparcan la bicicleta donde no deben, se saltan las normas de tr¨¢fico, o la da?an. En el otro extremo, pueden mejorar su nota de diferentes formas. La m¨¢s habitual es la de utilizar las bicicletas sin dar problemas. Pero tambi¨¦n se ganan puntos acusando a quienes se saltan las normas. Ser chivato siempre se ha premiado en China y no hay algoritmo que vaya a cambiar eso.
Todo esto puede parecer anecd¨®tico, pero estos baremos son la punta de lanza de un sistema de cr¨¦dito social p¨²blico y obligatorio, algo as¨ª como un carn¨¦ c¨ªvico por puntos que el Gobierno aprob¨® en 2014 y va a introducir paulatinamente. Se parece en cierta medida al sistema de puntuaci¨®n FICO de Estados Unidos ¡ªque eval¨²a la capacidad financiera de las personas¡ª, pero va mucho m¨¢s all¨¢.
El modelo chino tambi¨¦n tendr¨¢ en cuenta aspectos tan variados y difusos como ¡®la credibilidad jur¨ªdica¡¯ ¡ª la existencia de antecedentes o causas pendientes¡ª, ¡®la honestidad comercial¡¯ ¡ªpenalizar¨¢ el retraso en el pago de facturas¡ª, ¡®la integridad social¡¯ ¡ªnada de fumar en lugares p¨²blicos o provocar situaciones que alteren el orden¡ª e, incluso, el comportamiento en redes sociales ¡ªpenalizar¨¢, por ejemplo, la difusi¨®n de noticias falsas o rumores¡ª. Aparentemente, incluso la puntuaci¨®n de los amigos afectar¨¢ a la propia. Lo que todav¨ªa no est¨¢ claro es si el Gobierno terminar¨¢ integrando en este sistema los m¨¦todos desarrollados por empresas privadas como Alipay o Mobike, a cuyos datos puede acceder a placer.
S¨ª, es obligada la referencia al primer episodio de la tercera temporada de Black Mirror, Nosedive. Pero China todav¨ªa est¨¢ lejos de llegar al nivel de la ficci¨®n. De momento, el 16 de marzo, la Comisi¨®n Nacional para la Reforma y el Desarrollo anunci¨® en su web que, desde el pr¨®ximo 1 de mayo, quienes hayan cometido faltas administrativas o econ¨®micas ¡ªvariables que ser¨¢n clave en el sistema de cr¨¦dito social que se implementar¨¢ por completo en 2020¡ª ser¨¢n castigados con la prohibici¨®n de viajar en avi¨®n y en tren de alta velocidad. Aquellos que tengan cuentas pendientes con la justicia o que tengan deudas abultadas tambi¨¦n se ver¨¢n afectados por la medida. El veto durar¨¢ un a?o y ser¨¢ revisable.
No obstante, esta medida no es nueva. El a?o pasado, nada menos que 6,15 millones de personas ya quedaron excluidas de los sistemas de transporte m¨¢s avanzados. Pang, que pide mantener su nombre completo en el anonimato, es una de ellas. Y demuestra c¨®mo el sistema puede resultar injusto. ¡°Me enter¨¦ de que no pod¨ªa volar cuando trat¨¦ de comprar un billete por internet. Me sali¨® una p¨¢gina diciendo que estaba en la lista negra de morosos y que tendr¨ªa que buscar un transporte alternativo¡±, cuenta a EL PA?S.
Ella quer¨ªa volar de Shangh¨¢i a Guangzhou y descubri¨® que tampoco pod¨ªa utilizar el TAV. La ¨²nica alternativa era el tren lento, que tarda m¨¢s de 14 horas, o conducir. Pero lo m¨¢s grave para esta joven es c¨®mo se aplica esta lista negra. ¡°Mi padre tiene deudas. Uno de los cr¨¦ditos lo pidi¨® a mi nombre y, como no lo puede pagar, me castigan a m¨ª. Y eso a pesar de que he llegado a un acuerdo con el banco para ir amortiz¨¢ndolo mensualmente¡±, asegura. Aunque el mal est¨¦ siendo subsanado, la prohibici¨®n se aplica igual y sin necesidad de que haya una orden judicial de por medio. ¡°El banco simplemente inform¨® de la deuda a alg¨²n organismo oficial¡±, apostilla Pang.
De momento, el sistema es algo rudimentario. Es una lista negra que se ir¨¢ sofisticando seg¨²n se digitalicen y centralicen las diferentes variables que terminar¨¢n generando la puntuaci¨®n de los ciudadanos. El prop¨®sito es ¡°beneficiar a quien sea de confianza y restringir los movimientos y las operaciones de quienes no lo sean¡±. L¨®gicamente, el problema radica en que se trata de un modelo muy arbitrario en el que no solo se tienen en cuenta faltas financieras o sentencias en firme. Tambi¨¦n quienes resulten inc¨®modos para el r¨¦gimen pueden ver cercenadas algunas de sus libertades m¨¢s b¨¢sicas. Lo denunci¨® Human Rights Watch el a?o pasado con una informaci¨®n que tambi¨¦n critica la falta de un mecanismo de defensa en caso de que, como le sucede a Pang, los ciudadanos quieran apelar su puntuaci¨®n. El Gran Hermano chino es omnipresente y omnipotente.
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