N¨²ria Malats, onc¨®loga: ¡°Se est¨¢ detectando c¨¢ncer de p¨¢ncreas en personas m¨¢s j¨®venes y en una proporci¨®n mayor de mujeres¡±
La investigadora impulsa una alianza cient¨ªfica para desarrollar f¨®rmulas de detecci¨®n precoz y tratamientos para el segundo tumor, tras el de pulm¨®n, que m¨¢s muertes causa
El c¨¢ncer de p¨¢ncreas no da tregua. Es un tumor agresivo que, cuando se detecta, en la mayor¨ªa de los casos (el 80%), ya es tarde porque se encuentra en estadios avanzados. El 93% de los algo m¨¢s de 8.000 pacientes diagnosticados al a?o fallece en pocos meses. La ¨²nica estrategia es investigar, conocer sus causas y su comportamiento para desarrollar tratamientos m¨¢s efectivos y un diagn¨®stico precoz. En esta cruzada se ha implicado N¨²ria Malats, barcelonesa de 60 a?os y jefa del Grupo de Epidemiolog¨ªa Gen¨¦tica y Molecular del Centro Nacional de Investigaciones Oncol¨®gicas (CNIO). Esta cient¨ªfica impulsa la Alianza de Investigaci¨®n en C¨¢ncer de P¨¢ncreas (Alipanc), a la que ha conseguido sumar 45 equipos de investigadores de todos los ¨¢mbitos que intentan evitar un fat¨ªdico r¨¦cord: el carcinoma de p¨¢ncreas es la segunda causa de muerte por c¨¢ncer.
Pregunta. ?C¨®mo surge la alianza?
Respuesta. Empezamos a agruparnos en Madrid varios equipos interesados en investigar el c¨¢ncer de p¨¢ncreas. Durante la pandemia baj¨® la actividad y luego ha explosionado. Ahora somos 45 grupos multidisciplinares: la mitad hace investigaci¨®n cl¨ªnica y la otra mitad, b¨¢sica. Esta es la riqueza de la alianza, nos complementamos bien. Somos conscientes de que, si no juntamos esfuerzos y recursos en investigaci¨®n, no vamos a posicionarnos ni a conseguir un avance en el conocimiento de esta enfermedad. Queremos avanzar lo m¨¢ximo posible en el conocimiento para, luego, poder trasladar los avances a la pr¨¢ctica cl¨ªnica y tambi¨¦n porque es una cuesti¨®n de salud p¨²blica, para disminuir la incidencia y la mortalidad y mejorar la supervivencia y calidad de vida de estos pacientes.
P. ?Por qu¨¦ hay menos investigaci¨®n en c¨¢ncer de p¨¢ncreas que en otros tumores?
R. Hay varias razones. Aunque se sit¨²a el segundo en mortalidad, despu¨¦s del c¨¢ncer de pulm¨®n, en incidencia no es tan frecuente. El n¨²mero de pacientes con c¨¢ncer de p¨¢ncreas es menor que el de enfermos con tumores de mama, colon, pr¨®stata, pulm¨®n o vejiga, por ejemplo, que se llevan m¨¢s atenci¨®n por parte de los sistemas nacionales de salud. Otro motivo es porque, como el carcinoma de p¨¢ncreas es tan agresivo y los pacientes tienen una supervivencia tan corta, no da mucho margen a tratamiento y dificulta la investigaci¨®n. Antes hab¨ªa una percepci¨®n de que no se pod¨ªa hacer nada y a los pacientes con mal pron¨®stico ¡ªsolo se pod¨ªa operar al 20%¡ª no se les ofrec¨ªa tratamiento. Adem¨¢s, el 64% de la poblaci¨®n europea, hace cinco a?os, no hab¨ªa o¨ªdo hablar del c¨¢ncer de p¨¢ncreas. No sab¨ªa ni siquiera d¨®nde est¨¢ ni los s¨ªntomas para identificarlo en las fases m¨¢s precoces ni los factores de riesgo para prevenirlo. Siempre ha sido el gran olvidado. Pero esta actitud ha cambiado mucho debido al aumento de casos y a que todos estamos presionando a todos los niveles. Hay m¨¢s concienciaci¨®n por parte de la poblaci¨®n. Los m¨¦dicos de atenci¨®n primaria, cuyo papel es muy importante, cada vez son m¨¢s activos. Tambi¨¦n en el ¨¢mbito pol¨ªtico, en los servicios sanitarios y en la financiaci¨®n de la investigaci¨®n. Es el momento en el que nos estamos moviendo todos y entonces esto tambi¨¦n ayuda a que surja esta alianza.
P. ?Por qu¨¦ aumentan los casos?
R. Hasta ahora el c¨¢ncer de p¨¢ncreas estaba muy a la par en hombres y mujeres con una edad media de entre 67 y 70 a?os. Ahora se est¨¢ viendo m¨¢s en personas de menos edad, como sucede con el c¨¢ncer de colon. Tambi¨¦n la proporci¨®n de mujeres es un poco m¨¢s elevada. No sabemos qu¨¦ hay detr¨¢s. Se cree que puede estar relacionado con el aumento de la obesidad y de la diabetes. Pero seguramente que hay otros factores que no hemos identificado. Puede haber una disbiosis [desequilibrio microbiano] inicial en el colon por el abuso de los antibi¨®ticos. Tambi¨¦n investigamos la predisposici¨®n gen¨¦tica. Sabemos que hay factores de riesgo, pero no explican todo. No hay un solo elemento y probar todas las hip¨®tesis no es tan f¨¢cil. S¨ª es verdad que los casos identificados apuntan todos a un problema de inflamaci¨®n cr¨®nica en el p¨¢ncreas y esto da alguna pista.
Sabemos que hay factores de riesgo, pero no explican todo
P. ?Por qu¨¦ es tan agresivo?
R. Al c¨¢ncer de p¨¢ncreas se le ha llamado catastr¨®fico por su evoluci¨®n. Mientras que el periodo de iniciaci¨®n y desarrollo de otro c¨¢ncer hasta que es diagnosticado es de 15 o 20 a?os, para el de p¨¢ncreas es mucho menor. Incluso tumores muy peque?os, de un cent¨ªmetro, pueden ser metast¨¢sicos. Esto es por las caracter¨ªsticas de la gl¨¢ndula, porque no tiene barreras y tiene bastante irrigaci¨®n. Son muchos retos.
P. ?Hay f¨®rmulas para un diagn¨®stico precoz?
R. Estamos investigando, aunque no estamos en el punto de trasladarlo. El potencial de la biopsia l¨ªquida es muy alto. Si hay alguna manera de identificar c¨¢ncer de p¨¢ncreas en estadios muy precoces es con biopsia l¨ªquida y con toda la tecnolog¨ªa de inteligencia artificial aplicada a im¨¢genes. Ser¨¢ un campo importante en cuanto a marcadores de diagn¨®stico precoz, pero necesitamos definir tambi¨¦n la poblaci¨®n a la que aplicar estos biomarcadores. No puede ser a toda la poblaci¨®n porque la incidencia no es lo suficientemente alta. Necesitamos ir a la poblaci¨®n de m¨¢s alto riesgo. Hasta ahora, los programas de cribado se est¨¢n haciendo a quienes tienen posibilidades de c¨¢ncer de p¨¢ncreas hereditario o familiar. Pero representa solo el 10% y nos perdemos el 90%. Y tampoco son tan eficientes. Cuando aparece el c¨¢ncer de p¨¢ncreas entre dos o tres pruebas, ya est¨¢ avanzado y no se hab¨ªa visto nada antes. Esto es, seguramente, porque las herramientas de imagen que se utilizan sin inteligencia artificial no son lo suficientemente sensibles, porque la ventana de oportunidad deber¨ªa ser m¨¢s corta entre una prueba y otra y, tambi¨¦n, por las caracter¨ªsticas de este tumor, que nos lo pone muy dif¨ªcil.
Los programas de cribado se est¨¢n haciendo a quienes tienen posibilidades de c¨¢ncer de p¨¢ncreas hereditario o familiar. Pero representa solo el 10% y nos perdemos el 90%
P. ?Cu¨¢ndo podr¨ªamos alcanzar un nivel ¨®ptimo de diagn¨®stico precoz?
R. Dir¨ªa que, con muchas ganas, entre cinco y 10 a?os. Vamos a ver si lo logramos lo antes posible. Estamos aunando esfuerzos con grandes proyectos internacionales para conseguirlo en cinco a?os.
P. Al margen de la poblaci¨®n con antecedentes familiares, ?cu¨¢l ser¨ªa la poblaci¨®n de riesgo?
R. Es lo que estamos intentando identificar, integrando mucha informaci¨®n sobre los factores de riesgo que est¨¢n bien establecidos, pero tambi¨¦n con marcadores gen¨®micos, de microbioma, metaboloma, inmunoma¡ Necesitamos identificar aquellos marcadores que nos permitan llegar a una poblaci¨®n de muy alto riesgo para que el programa de cribado sea coste efectivo y tenga sentido. Sabemos que son mayores de 60 a?os, que la diabetes es importante, que la obesidad, el tabaco y el alcohol, tambi¨¦n, o si hay lesiones potencialmente malignas. Pero mi sue?o es llegar a tener una aplicaci¨®n en nuestros m¨®viles, como las que hay para seguimiento cardiovascular, con la que pudi¨¦semos estimar el riesgo y, aquellos que est¨¦n por encima de un umbral, que tenemos que determinar, ir¨ªan al sistema nacional de salud para, a partir de una bater¨ªa de biomarcadores que estamos investigando, entrar en programas de cribado.
Mi sue?o es llegar a tener una aplicaci¨®n en nuestros m¨®viles, como las que hay para seguimiento cardiovascular, con la que pudi¨¦semos estimar el riesgo
P. No parece muy dif¨ªcil.
R. Estamos en ello, desarrollando el algoritmo para que pueda ser utilizado por la poblaci¨®n. Donde es m¨¢s dif¨ªcil es en la otra parte sin identificar: en los marcadores que realmente tienen un papel en la definici¨®n de alto riesgo. Pero tenemos que continuar comprobando si discrimina no solamente cuando ya est¨¢n diagnosticados o en casos precoces, sino tambi¨¦n antes del diagn¨®stico y cu¨¢nto tiempo antes de este.
P. En cuanto a tratamientos, se habla de nanopart¨ªculas, de inmunoterapia, de virus¡ ?Hay alguno prometedor?
R. Alguien me dec¨ªa hace poco que hay que atacar por tierra, mar y aire. Con solo un tipo de tratamiento, no vamos a lograrlo y creo que ser¨¢ la combinaci¨®n de varios lo que finalmente nos ayudar¨¢ a controlar esta enfermedad. En atenci¨®n primaria, debemos ser capaces de encontrar c¨®mo prevenir el desarrollo; despu¨¦s, lograr un diagn¨®stico precoz para el 80% de la poblaci¨®n de riesgo y, entonces, ofrecer toda la bater¨ªa de tratamientos innovadores.
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